sábado, mayo 18, 2024

Portal informativo de la Organización Médica Colegial de España

InicioHistoricoPara el acompañamiento a una persona en el final de su vida...

Para el acompañamiento a una persona en el final de su vida se requieren técnicos con «carácter humano»

Los profesionales dedicados a esta labor, según una experta en intervención social, han de tener unas competencias técnicas para evitar el dolor y facilitar el confort, pero también un «componente relacional especial» para cubrir el apoyo emocional a la familia

Madrid, 31 de agosto 2009 (medicosypacientes.com)

Para acompañar a una persona en el final de su vida además de conocimientos técnicos hay que poseer una «sensibilidad especial», al ser momentos impregnados de un fuerte componente emocional. Es por ello que la experta en intervención social Lourdes Bermejo es de la opinión de que «no todo el mundo sirve para acompañar a una persona en el final de su vida», tal como lo expuso, recientemente, en un curso de la Universidad de Cantabria bajo el título «Abordaje integral de la persona mayor al final de la vida». Bermejo recalcó que además de los pertinentes conocimientos técnicos, hay que poseer una «sensibilidad especial» porque «son momentos en los que no solo se trata de ser un técnico sino que también es imprescindible ser un técnico con carácter humano».

El personal que forma el equipo terapéutico que acompaña a personas en esta situación tiene que ser capaz, además, de «ponerse en el lugar del paciente, de percibir sus necesidades y de comprender las reacciones de la familia que expresan su rechazo a ese momento», tal como apuntó. Los profesionales han de tener unas competencias técnicas para evitar el dolor y facilitar el confort, pero también un «componente relacional especial» para cubrir el apoyo emocional a la familia, según sus palabras.

Además, indicó que «muchos equipos terapéuticos mienten o rehúsan decir la verdad cuando el paciente pregunta si se está muriendo». En su opinión, hay que respetar que la persona que está al final de su vida quiera saber qué le está pasando porque el derecho de información de la persona «es un derecho fundamental». Por tanto, apuntó que «hay que tener un componente técnico, relacional y ético, todo muy mezclado».

Durante el proceso, tal como recomienda Bermejo, «no hay que dejar que la situación te lleve sino, anticipándote, sabiendo lo que va a pasar, actuar antes para que no tengas que ir reactivo». Y, después de trabajar un caso, evaluarlo con una serie de indicadores objetivos que analicen cómo se ha trabajado como equipo y qué se puede mejorar para la próxima vez. «Son temas delicados como para no dejar que la improvisación sea tu motor».

Dicha experta en intervención social explicó que existen tres etapas en la atención final de vida de una persona. La primera, la fase previa, donde el equipo tiene que tener pensado qué puede ofrecer a la familia y qué normas se va a saltar, «porque en esas situaciones es inevitable». «La organización tiene que estar preparada antes de tiempo para saber con qué recursos cuenta, qué limitaciones y hasta dónde se puede entregar», concluyó.

Enlaces relacionados:

Relacionados

TE PUEDE INTERESAR

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Más populares