Un total de 166 médicos de Atención Primaria de Cantabria han firmado un manifiesto contra la sobrecarga asistencial que padecen, lo que repercute en la calidad de la asistencia que prestan a los ciudadanos
Madrid, 1 de diciembre 2009 (medicosypacientes.com)
El aumento constante de la población y el envejecimiento progresivo de la misma, la mayor oferta de prestaciones sanitarias, la atribución a la Atención Primaria de un mayor número de funciones y el aumento de sus tareas burocráticas, están poniendo en peligro la calidad de la atención sanitaria que éstos ofrecen a los pacientes, por lo que un total de 166 médicos de Atención Primaria de esta Comunidad Autónoma han hecho público un escrito denunciando esta situación.
Texto del manifiesto:
Como médicos del Servicio Cántabro de Salud (SCS) estamos soportando situaciones que ponen en peligro la calidad de la atención que prestamos debido a la desastrosa gestión que está llevando a cabo esta Administración en la que se constata que entre sus prioridades no se encuentran ni la salud de los usuarios ni la de sus propios trabajadores.
Existe un incremento constante de la presión asistencial debido, entre otros factores, al aumento de la población, a su envejecimiento, a la lógica exigencia de una mayor oferta asistencial por parte de una población más formada e informada, la atribución a la Atención Primaria de mayores funciones, el aumento de las tareas burocráticas que exige cada vez más informes para diversos organismos y la situación de las listas de espera de la atención especializada que genera un volumen de consultas añadidas que deben ser resultas, lo que lleva a los sanitarios implicados a una situación de deterioro progresivo de su trabajo por la falta de tiempo que pueden dedicar a los pacientes y el consiguiente desgate profesional.
La situación en sí difícil, se ha agraviado más si cabe por la negativa de las gerencias de Atención Primaria a sustituir las ausencias de los médicos que se encuentran de vacaciones, enfermos o de permiso reglamentario, sobrecargando con ello el trabajo de los que están en activo. Que los médicos de Atención Primaria sean sustituidos es un derecho de los pacientes, pero además es un compromiso firmado por la Consejería de Sanidad y publicado en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC).
Cada vez estamos más lejos del objetivo de tener al menos 10 minutos para cada paciente, al tener que atender a nuestros asegurados y a los de nuestros compañeros ausentes.
Las agendas personales de trabajo son continuamente manipuladas desde el área administrativa sin nuestro conocimiento, entorpeciendo la consulta, llegando al extremo de encontrar varios pacientes citados a la misma hora o con intervalos de imposible cumplimiento, deteriorando gravemente la calidad de la atención.
Y por si esto no fuera suficiente, enlentecen aun más el tiempo de consulta mediante una ?interferencia informática? introducida premeditadamente en el ordenador que utilizamos para recetar, que por deliberada intención de las gerencias retrasa el trabajo del médico con un propósito coactivo, cuya única finalidad es mediatizar la prescripción. El programa de ordenador dificulta la posibilidad de recetar genéricos o medicamentos de mara, retrasando cada paso que hay que dar para obtener estas recetas hasta llevar a la desesperación al profesional.
Mediante este mecanismo se pretende dirigir la voluntad del médico hacia una receta por principio activo, que no consigue abaratar el producto pero que contribuye a que, al existir diferentes marcas que van cambiando constantemente, se produzca una pérdida de seguridad en la administración del fármaco, al recibir el paciente su medicación con nombres y envases distintos cada vez que acude a la farmacia, lo que acarrea errores y confusiones.
La situación relatada ha sido reiteradamente puesta de manifiesto por los médicos de atención primaria a las Gerencias y a la misma Consejería de Sanidad, sin haber obtenido respuesta ni observado cambio alguno, y dado que entendemos que la situación es insostenible y afecta a la calidad de la atención sanitaria que recibe la ciudadanía, nos vemos obligados a denunciar públicamente esto hechos.
José Hernández Urculo, vocal de Atención Primaria Urbana del Colegio de Médicos de Cantabria, junto con 165 médicos más
