La ministra de sanidad ha explicado que tabaco y alcohol representan un coste importante para la sanidad pública como consecuencia del tratamiento de las enfermedades que provocan
Madrid, 5 de octubre 2011 (E.P.)
La Ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, ha manifestado su apoyo a la propuesta del candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, de subir los impuestos indirectos a tabaco y alcohol, ya que “cuestan a la sanidad pública un dinero importante como consecuencia del tratamiento de las enfermedades que provocan. Hemos hecho una propuesta real, tangible y concreta, para mostrar alto y claro que la sanidad y la educación pública se pueden mantener si hay voluntad política”.
La ministra ha explicado que aún el Gobierno puede reducir el déficit sin tocar la sanidad y la educación, tal y como ya ha demostrado “en los últimos meses”. “El Gobierno ha hecho algunas cosas no sólo para reforzar la sanidad y la educación pública sino también para ahorrar en las comunidades autónomas y que mantuvieran las prestaciones”, ha señalado en referencia a las medidas de ahorro farmacéutico.
Así, respecto al gasto en sanidad de las diferentes comunidades autónomas, Pajín ha afirmado que, de cara a las próximas elecciones, los representantes políticos deben explicar “cuáles son sus prioridades” respecto a la sanidad. Y, en este sentido, ha recordado que el PSOE, a través de su candidato, ha mostrado que “cree que es absolutamente posible mantener un sistema público de salud”, aunque “saneando las cuentas, con medidas de ahorro y con medidas de aumento de ingresos”.
Por otra parte, ha mostrado su opinión sobre la posibilidad de que vuelva a centralizarse la gestión de la sanidad pública. En este sentido, considera que el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud “tiene que tener una capacidad de decisión más vinculante” pero, por lo demás, su propuesta es trabajar en la misma dirección, con medidas como las que ya ha puesto en marcha el Gobierno que ayudan a contener el gasto y a desarrollar una asistencia igualitaria a nivel territorial.
“Hemos hecho un replanteamiento: que el Consejo Interterritorial debe tomar decisiones mucho más vinculantes que lo que son ahora. Eso no significa devolver al Gobierno las competencias”, ha explicado.
