Los Dres. Ismael Sánchez, presidente del Colegio de Médicos de Teruel, y Juan José Sánchez Luque, presidente del Colegio de Médicos de Málaga, exponen a «Médicos y Pacientes» su opinión sobre algunos de los aspectos que se abordarán en la jornada sobre los ?Factores condicionantes en la sostenibilidad del sistema sanitario? que celebrará la Organización Médica Colegial (OMC) mañana 20 de octubre en Madrid
Madrid, 19 de octubre 2010 (medicosypacientes.com)
La sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, en estos momentos, en la encrucijada, precisa un debate urgente del que fluyan medidas estructurales, nunca aisladas, y que engloben asuntos fundamentales como el catálogo de prestaciones, el exceso de burocracia, los problemas organizativos, y la financiación. El Consejo General de Colegios de Médicos está preparando para el próximo 20 de octubre una jornada sobre los ?Factores condicionantes en la sostenibilidad del sistema sanitario?. Por este motivo, ?Médicos y Pacientes? ha querido conocer la opinión de algunos presidentes colegiales al respecto.
¿Piensa que la garantía de la sostenibilidad del SNS pasa por la incorporación de medidas como el copago? ¿En su opinión, habría que proceder, previamente, a una revisión de otros conceptos como cartera de servicios, incentivación a los profesionales, exceso de burocracia, o impedir que el sistema se convierta en un bien de consumo?
Ismael Sánchez, presidente del Colegio de Médicos de Teruel:
Por supuesto, lo primero que hay que definir es la cartera de servicios del SNS de acuerdo con un organismo a crear que avalué la eficiencia de los distintos procedimientos médicos. No todo se puede y debe estar incluido en las prestaciones del SNS, sino solo aquello que realmente aumenta y mejora la salud de la sociedad.
Los médicos son los que mejor saben de las necesidades de los pacientes, por ello a ellos hay que encomendarles la gestión de las políticas sanitarias, la gestión de los distintos servicios, tanto en Atención especializada como en Atención Primaria.
Aquello que no es preciso que sea realzado por el médico, debe salir de su trabajo diario.
A la sociedad hay que concienciarla del uso adecuado de los recursos sanitarios, no se puede acudir al Sistema como el que va al mercado. Educación sanitaria. No se puede ir con las exigencias que una parte de la población manifiesta. A la sociedad hay que educarla para que sienta al médico como el más preparado para responder a sus necesidades en salud, evitando de este modo la medicina defensiva.
Juan José Sánchez Luque, presidente del Colegio de Médicos de Málaga:
El copago sería el resultado último de seguir tensando la cuerda. Hay bolsas de ineficiencia que sería fundamental abordar. Y sobre todo, romper el reparo a decir que el usuario en numerosas ocasiones y sobretodo en determinados ámbitos utiliza incorrectamente las prestaciones que ofrece el sistema sanitario. Los médicos nos encontramos con las manos atadas. Y entre todos tenemos que decir en voz alta que las consultas de atención primaria y urgencias están mal utilizadas. La pedagogía de un uso correcto tendría que introducirse en la sociedad actual que entre todos hemos medicalizado.
¿Habría que hacer un llamamiento a los Grupos Políticos, ante la falta de acuerdo sobre el Pacto por la Sanidad, siendo una de sus principales fricciones precisamente la financiación del sistema?
Ismael Sánchez, presidente del Colegio de Médicos de Teruel:
A los políticos hay que animarles a que lleguen a un acuerdo para el pacto por la sanidad. Es un tema tan importante y complejo que precisa del consenso de todos. Hay medidas que si no se toman con el acuerdo de todos, nunca se llevarán a cabo.
Juan José Sánchez Luque, presidente del Colegio de Médicos de Málaga:
La sanidad está politizada y en el contexto de crisis actual nos guste o no, hay que considerar la necesidad de priorizar, y evitar ofrecer a bombo y platillo nuevas ofertas de una cartera de servicios que está sobredimensionada en la realidad práctica asistencial.
Los procesos asistenciales y las unidades de gestión clínica son pilares claves, pero llevados a la práctica en sus fundamentos reales y no como mera declaración de buenas intenciones.
