Ante las altas temperaturas, los médicos de familia recomiendan un mayor control sobre los fármacos que se consumen y un especial seguimiento a sus efectos secundarios
Madrid, 21 de julio 2009 (medicosypacientes.com)
Los médicos de familia recomiendan ante las altas temperaturas extremar la precaución en los ancianos y enfermos crónicos, así como en los pacientes encamados y en los que toman determinados fármacos, en los menores de cuatro años, en los que padecen alguna enfermedad mental y en los obesos.
Entre los enfermos que requieren un especial seguimiento debido a los efectos secundarios de los medicamentos que consumen están los pacientes que sufren: demencia o Alzheimer; parkinson; depresión u otras enfermedades mentales; hipertensión y diabetes; enfermedades del corazón e insuficiencia renal crónica.
Entre los fármacos sobre los que hay que tener un mayor cuidado figuran los diuréticos (para aumentar la cantidad de orina), antihistamínicos (alergias), anticolinérgicos (depresión, parkinson, etc), betabloqueantes (hipertensión), fenotiazinas (trastornos mentales). El abuso de sustancias tóxicas como el alcohol y la cocaína también aumenta el riesgo, según recuerda esta sociedad científica.
Estas y otras advertencias han sido recopiladas en un documento elaborado por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) para prevenir los efectos de un calor excesivo.