Para el Dr. Alberto Oriol, «un profesional que no sea una buena persona no podrá ser un buen profesional» ya que no basta la capacidad técnica sino que esta debe ir acompañada de unos valores exigentes
Madrid, 2 de noviembre 2009 (medicosypaciantes.com)
En una entrevista concedida por el Dr. Alberto Oriol, presidente de la Fundación Educación Médica, al periódico ?Actualidad Médica? del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos, señala que ?la excelencia profesional no se construye solamente con competencias del conocimiento y de las habilidades, sino que debe incorporar conductas que reflejen actitudes fomentadas en valores exigentes. Es decir, que un profesional que no sea una buena persona no podrá ser un buen profesional, en tanto que uno que no tenga las competencias científicas y técnicas necesarias no es ni siquiera un profesional?.
A la hora de resumir los valores que debe tener un buen profesional, o en este caso concreto, un buen médico, el Dr. Oriol se refiere a los diez compromisos enumerados en los estatutos de la profesión para el nuevo milenio, proclamados por la Federación Europea de Medicina Interna en el año 2001 ?entre los que quisiera destacar los siguientes: el compromiso con la búsqueda de la excelencia y la formación continuada, por un lado, y con la rendición social de cuentas a través de la reacreditación periódica por el otro?.
En su opinión, los médicos son conscientes de la importancia de la formación continuada ?de otra forma no se explicaría que la profesión médica sea la que realiza una mayor actividad?. Expone también que los médicos ?viven la incertidumbre inherente a la naturaleza de su trabajo con plena conciencia de las limitaciones de su saber y buscan en la mejora de sus conocimientos una solución a su ansia de perfeccionar los servicios que prestan a sus pacientes?.
¿Formación o educación?
A menudo se utilizan los términos de formación y de educación como sinónimos, aunque en opinión del Dr. Oriol, ?el término formación hace referencia a los procesos utilizados para adquirir capacidades técnicas y el de educación a los procesos que comportan el desarrollo de la persona y que incluyen las dimensiones culturales y morales, además de las científicas y técnicas?.
Finalmente, con relación al concepto global de ?ser médico?, el presidente de la Fundación Educación Médica, ?creo que ya estamos viviendo procesos de cambio que irán corrigiendo paulatinamente el rumbo que se ha ido siguiendo en las últimas décadas, en las que se han realizado extraordinarios avances en el conocimiento y las capacidades técnicas de nuestros profesionales. Esta corrección de rumbo no debe representar que la adquisición de habilidades transversales y capacidades técnicas se haga a expensas de las mejoras que se van consiguiendo en lo científico-técnico, sino que serán su base más que su complemento?.
En resumen, el Dr. Oriol está convencido de que las organizaciones profesionales juegan un papel fundamental en todo lo relativo a la formación continuada y que la profesión médica tiene asumida ?su responsabilidad social como colectivo?.