No parece haber, de momento, intención de desconvocar la movilización del 23 de octubre, anunciada semanas atrás por el Foro de la Profesión Médica con la finalidad de hacer saber a las Administraciones y a la sociedad, en general, que las profesiones de Medicina y de Arquitectura corren riesgo de desquebrajarse por los efectos que la adaptación del Plan Bolonia pueden ocasionar a sus respectivas formaciones de grado. Salvo compromiso por escrito del Ministerio de Educación y el apoyo moral por parte de Sanidad, médicos y arquitectos saldrán a la calle para demandar justicia, convencidos del agravio comparativo que se les causa con respecto a otras profesiones y con el resto de Europa
Madrid, 16 de octubre 2009 (medicosypacientes.com)
Miembros del Foro de la Profesión Médica han
expresado su preocupación por el futuro de la
titulación en Medicina y sus repercusiones.
El pasado 2 de octubre el Foro de la Profesión Médica, en el que están integradas la OMC, la CESM, la FACME, el CNECS, el CEEM y la CNDFM, anunció la convocatoria de una manifestación para el próximo 23 de octubre, ante la preocupación que suscita en el colectivo la adaptación que las Administraciones sanitarias van a aplicar sobre los estudios de Medicina. Lo que empuja a la profesión médica en su conjunto a este tipo de medidas es la evidencia de que la aplicación del Plan Bolonia representa ?un claro agravio comparativo con repercusiones no sólo académicas, sino también profesionales y laborales?. Otro sector, el de los arquitectos, con similar problema, decidió también adherirse a la movilización.
Tras el anuncio de la manifestación, se han sucedido las reuniones entre los principales afectados, estudiantes de Medicina (CEEM), que mantuvieron un encuentro el pasado 14 de octubre con el director general de Política Universitaria del Ministerio de Educación, Felipe Pétriz, y hoy mismo, le toca el turno a la Conferencia de Decanos de Medicina (CNDFM). Si bien los ánimos parecen algo más templados tras haber empezado a circular tímidas intenciones de “escucha, de buena voluntad,…”, la situación, tras estos contactos, en poco ha variado, de tal forma que la movilización anunciada por el Foro de la Profesión sigue en pie, tal como ha sido ratificado en rueda de prensa, celebrada ayer en la sede del Colegio de Arquitectos de Madrid, con la participación de representantes de ambos sectores profesionales.
Por parte del sector médico comparecieron ante los medios de comunicación los doctores Serafín Romero, secretario general de la Organización Médica Colegial (OMC), y Patricio Martínez, portavoz del Foro y secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), acompañados por Lucas de Toca, presidente del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM). En el transcurso de la rueda de prensa ya lo advirtieron los convocantes, “la movilización sólo se desconvocará por un motivo y una justificación, a partir de la presentación de un proyecto de orden ministerial, de carácter excepcional, al igual que la de los ingenieros, que contemple que tanto médicos como arquitectos seguirán siendo denominados como tales y que tendremos el equivalente académico a grado+máster. De lo contrario, no hay desconvocatoria. No vamos a exigir la inmediata publicación en el BOE de esa demandada orden ministerial, pero sí el compromiso serio del Ministerio de Educación y el apoyo moral de Sanidad de que esa orden va hacia delante. No se admite ninguna otra situación”, según lo expresado por el portavoz del Foro, Patricio Martínez.
Crispación e inestabilidad
Los colectivos de médicos y arquitectos han decidido unir sus voces
para impedir el desquebrajamiento de sus profesiones.
El representante de la Organización Médica Colegial, el doctor Serafín Romero, ratificó, por su parte, este posicionamiento. “Nosotros queremos seguir llamándonos ‘médicos’. Y cuando deberíamos estar hablando de la calidad del nuevo sistema educativo o de la mejora que va a suponer a nuestros futuros profesionales, nos encontramos, en cambio, inmersos en algo que realmente no esperábamos, como son estas repercusiones sobre el título de médico, y que, además, son difíciles de explicar a los ciudadanos de a pie”.
“Problemas como el riesgo que corre la colegiación obligatoria, las contrataciones irregulares y ahora la devaluación del título de Medicina, lógicamente, arrastran hacia una crispación e inestabilidad del propio tejido profesional, pero sobre todo de cara a plantear cuál va a ser nuestro futuro, teniéndonos, incluso, que cuestionar hasta el dilema de cómo nos vamos a llamar”, lamentó el secretario general de la OMC.
El doctor Romero recordó, durante su intervención, que los estatutos de la OMC “contemplan, como no podía ser de otra manera, la defensa de la profesión y por eso estamos aquí, para defendernos de la situación que pone en peligro el título de Medicina”. Además, informó de que Colegios de Médicos a nivel provincial también han manifestado su preocupación por esta cuestión, y ya hay algunos que han mostrado su adhesión a nuestro posicionamiento. “Al fin y al cabo -como remarcó- no estamos defendiendo ningún tipo de privilegio, sino simplemente reivindicamos que queremos ser médicos y defender nuestra profesión.
El núcleo de la cuestión
El agravio comparativo descrito por los integrantes del Foro de la Profesión Médica es triple. Por un lado, con la mayor parte de los médicos de la UE, en clara desventaja por parte de los españoles, puesto que el resto sale con un título unificado de grado + máster. También con respecto a otros colectivos, dentro de nuestro propio país, que con 240 European Credit Transfer System (ECTS), van a ser gradudados en Ciencias de la Salud, mientras que los médicos necesitarán 360 ECTS para conseguir graduarse en Ciencias de la Salud. En este sentido, desde el Foro se piensa que esto puede llegar a comprometernos tanto desde el punto de vista profesional como desde el laboral y académico. La situación se recrudece cuando otros sectores como el de los ingenieros han conseguido, vía orden del Ministerio de Educación, el reconocimiento de grado+master, con 300 ECTS.
Ante este panorama, como indicó el presidente del CEEM, Lucas de Toca, “la realidad que se nos ofrece en estos momentos es que un médico en el tiempo que hubiera terminado el grado y preparado su MIR (una media de 12 años, en total como grado), otro graduado sería ya doctor en ese espacio de tiempo. Y de todo esto hay que informar a la sociedad, tal como señaló. “En el momento en que se nos dé garantías de que el problema se va a reconducir, será el propio Ministerio el que informe a la opinión pública y ya no tendrá sentido seguir denunciando por nuestra parte. Mientras tanto, mientras no tengamos esa garantía, nuestra obligación moral es exponerlo ante la ciudadanía”.
Y es que como recordó la decana del Colegio de Arquitectos de Madrid, Paloma Sobrini, “se trata de profesiones, la de Medicina y la de Arquitectura, que están completamente al servicio de la sociedad, que va a ser la realmente perjudicada. No se puede permitir que se rebaje de esta manera ni la calidad de nuestra enseñanza ni la categoría de nuestra titulación, con ello pierde categoría y calidad toda la sociedad civil”, tal como expresó.