El liderazgo de la metodología coaching tiene mucho que ver con el carisma, pero también con el trabajo en equipo, con la capacidad de negociación y la adaptación al cambio. Este proceso consta de tres fases: toma de conciencia, definición de una meta y desarrollo de un plan de acción; según se ha expuesto en un curso celebrado en el Colegio de Médicos de Zaragoza
Zaragoza, 21 de marzo 2011 (medicosypacientes.com)
Asistentes a la jornada
Un total de 41 participantes, entre ellos médicos aragoneses, MIR, alumnos de los últimos cursos de medicina y personal de gestión sanitaria han participado en una sesión celebrada en el Colegio de Médicos de Zaragoza sobre la metodología del Coaching. Para ello se contó con la intervención de tres coach entusiastas, Blanca Porres, Gregorio Porras y Chema Sansegundo, médico, empresario y abogado respectivamente, mostraron, con diferentes enfoques, el valor de esta metodología para acompañar a personas y organizaciones en sus procesos de desarrollo y cambio.
En inglés antiguo, ?Coach? hacía referencia a un carruaje. Hoy, esta palabra, señaló Blanca Porres al comienzo de la jornada designa al ?tutor que acompaña o dirige con el objetivo de mejorar comportamientos específicos y de crear nuevas competencias?. Porres, médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria que forma parte de la Junta Directiva del Colegio de Médicos de Zaragoza, es Coach personal y ejecutivo, y trabaja en aplicar las técnicas de Coaching en el mundo sanitario. Ella se encargó de hacer la presentación básica del coaching y cómo éste se puede aplicar en conductas, actitudes, creencias, valores e identidad en dependencia de las necesidades de las personas. ?El proceso coaching, explicó la doctora Porres, consiste en tres fases: la toma de conciencia, la definición de una meta y el desarrollo de un plan de acción?.
Durante su ponencia, Blanca Porres señaló que la metodología coaching ayuda a mejorar la observación de uno mismo. De hecho, advirtió, ?cuando interpretamos la realidad lo hacemos desde la educación, la cultura, la religión, la historia personal?pero la realidad puede verse de forma nueva?. Y tras la observación de la realidad, el descubrimiento de las emociones y cómo éstas pueden vincularse a la nueva interpretación de la realidad. Y todo ello para aceptar que existen posibilidades para mejorar, que se pueden ver los resultados. ?Lo importante, afirmó Porres, es la intención: lo puedo hacer, lo voy a hacer?. El coaching, en definitiva, tiene en cuenta la capacidad de acción y que se puede crecer.
Coaching y medicina
El ámbito médico, indicó Blanca Porres, muestra una alta competencia técnica, favorece el aprendizaje continuo y es un espacio de flexibilidad en el que se pueden desarrollar competencias como la asertividad. También, la relación con personas que padecen la enfermedad, el sufrimiento y la muerte. ?En todo ello, la metodología coaching puede ayudarnos, insistió Blanca Porres?. De hecho, reconoció, ?los sistemas sanitarios son grandes y complejos, y necesitamos redescubrir nuestro control profesional?. Y aquí es donde aparece uno de los términos clave de la metodología coaching, el liderazgo. En opinión de Blanca Porres, el médico tiene un triple reto de liderazgo: personal, asistencial y de opinión. Porres reconoció que ?tenemos mucha capacidad de acción? y recordó la frase de Albert Einstein: si siempre hacemos lo mismo obtendremos los mismos resultados.
Liderazgo e innovación
Los ponentes de la Jornada: Chema Sansegundo,
Blanca Porres y Gregorio Porras
Sobre el liderazgo versó la ponencia del empresario Gregorio Porras. En su opinión hay que desmitificar al líder porque el liderazgo se da en función de la situación. Cuando se habla de liderazgo, señaló Porras, ?se habla de compromiso y de tener la responsabilidad de tomar decisiones?. Así, el empresario partió de los ingredientes básicos del liderazgo como visión, pasión integridad, confianza, curiosidad, osadía. También, desde la óptica de los valores, habló de integridad, confianza, saber escuchar y respeto por los seguidores. Desde Stephen Covey, del aprendizaje continuo, la orientación al servicio, la irradiación de energía positiva o el creer en las personas. O desde Howard Gardner desgranó los atributos del liderazgo: visión de futuro, dominio de los cambios, diseño de la organización, aprendizaje anticipado, iniciativa? Así hasta concluir con los siete hábitos de la gente exitosa del propio Stephen Covey: ser proactivo, empezar con el final en la mente, las cosas importantes en primer lugar, pensamiento win-win, intentar primero entender y luego ser entendido, la sinergia y afilar el hacha. Todo ello para subrayar que ?el liderazgo de la metodología coaching tiene mucho que ver con el carisma, pero también con el trabajo en equipo, con la capacidad de negociación y la adaptación al cambio?. Al final, indicó Gregorio Porras, se trata de mirar al futuro, partir de nuevas ideas y cuidar el presente ya que en él vivimos el resto de nuestra vida.
La última ponencia de la jornada corrió a cargo del abogado Chema Sansegundo, que trató sobre la aplicación del coaching, en concreto del término innovar, ?que no es otra cosa que pensar distinto?, indicó. Para Sansegundo ?nos encontramos ante un momento muy especial ya que nuestra tribu se encamina hacia nuevos pastos y ha iniciado el desplazamiento hacia la nueva abundancia del conocimiento y del compromiso?. Y en esa nueva abundancia hay que poner el acento en las personas y en los recursos que atesoran. La clave, señaló el cocah Sansegundo, está ?en ampliar la visión e identificar estos recursos de las personas?. El mundo ha cambiado, concluyó Chema Sansegundo, y lanzó un reto a los participantes en la jornada: ?¿queremos prestigio?, lo tenemos que ganar?.