El consejero de Salud de Cataluña, Antoni Comín, no descarta la existencia de brotes "no detectados o reconocidos" de enterovirus en otras CC.AA. De hecho, como aseguró en respuesta parlamentaria, "profesionales de otras comunidades autónomas están pidiendo información y asesoramiento a los jefes de servicio de pediatría catalanes ante la existencia de posibles casos fuera de Cataluña"
Según los datos actualizados ayer por Comín en el Parlamento, en las últimas semanas se han detectado 101 casos, la gran mayoría de los cuales evolucionan favorablemente. A fecha de ayer seis menores están ingresados por este virus en diferentes hospitales, tres de los cuales están en la Unidad de Cuidados Intensivos.
El titular catalán de Salud defendió que, desde el inicio del brote, el sistema de salud de Cataluña “ha reaccionado con una eficacia asistencial absoluta”, Comín reiteró que tanto la consejería como los profesionales “han actuado con máxima responsabilidad e inmediatez ante esta situación, como lo demuestra el hecho de que, desde el primer día de detección del brote, ya se elaboró y aplicó una primera versión del protocolo de actuación”.
Los enterovirus que circulan ampliamente entre la población producen, por lo general, cuadros leves (fiebre, erupciones cutáneas o cuadro respiratorio) ya menudo las infecciones son asintomáticas. La mayor parte de infecciones por enterovirus no provocan alteraciones neurológicas y, si lo hacen, suelen ser cuadros leves.
A raíz de la aparición de un número excepcional de casos de infección por enterovirus con alteraciones neurológicas de mayor gravedad, el Departamento de Salud de Cataluña activó una mesa de seguimiento; y estableció un protocolo de detección y tratamiento precoz de los cuadros con afectación neurológica más grave, que se ha enviado al conjunto de la red asistencial, y ha reforzado la vigilancia epidemiológica.
Recomendaciones
Ante la situación el Departamento de Salud recomienda hacer vida normal, y sólo en caso de fiebre, como ya se aconseja siempre, los niños y niñas no tienen que ir a los centros, a los centros recreativos de verano, a las colonias o en las guarderías.
Las infecciones por enterovirus se transmiten fundamentalmente por vía fecal-oral y respiratoria. Por tanto, se recomienda reforzar medidas higiénicas que ya son muy habituales en las escuelas u hogares de nuestro país: lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón o soluciones alcohólicas, especialmente después de ir al baño y cambiar pañales; taparse la boca y la nariz con un pañuelo desechable en caso de estornudo, o bien con la parte interna del codo pero nunca con las manos, ya que es la vía de contagio de virus a otras personas .
Hay que llevar a los menores al pediatra cuando presenten algunos de los síntomas que se asocian a la afectación neurológica en el contexto de la infección: temblores, sacudidas, debilidad, dificultad para tragar o somnolencia muy marcada, generalmente acompañado de fiebre.