El Dr. Rubén García Sánchez, coordinador de tutores de residentes en el Hospital Universitario de Salamanca, participa en el X Congreso del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), que tendrá lugar del 9 al 11 de noviembre en Bilbao, en la mesa “Analizando el modelo educativo” para hablar de la perspectiva de los tutores en la salud mental de los médicos residentes. Tal y como asegura en esta entrevista en Médicos y Pacientes, “una de las funciones inherentes al cargo de tutor es estar alerta ante posibles signos de malestar psicológico del residente”
El X Congreso PAIME y I Encuentro Internacional tiene como lema “Congreso de Atención Integral al Sistema de Salud Enfermo” y es organizado por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) y el Consejo de Colegios de Médicos de País Vasco (CCMPV). Para acceder al programa e inscripciones click aquí
¿Cómo es la situación actual de la salud mental residentes?
Lamentablemente se están apreciando niveles crecientes de alteraciones en la esfera mental de los residentes. Desde hace lustros se identifica este periodo formativo como una etapa especialmente vulnerable. Es una fase de cambios y retos que pueden hacer mella es su estabilidad psíquica.
Como tutor, ¿conoce entre sus residentes casos de estrés y malestar psicológico en la carrera?
Por desgracia, sí he presenciado estos problemas en alguna ocasión. Situaciones de descompensación sí han vivido algunos residentes ya desde el periodo de aprendizaje que suponen los años en la Facultad de Medicina.
¿Cuál es el papel de la universidad en este campo?
En el caso de la Universidad de Salamanca se dispone de un programa de ayuda psicológica si la precisan.
Cuando ocurre, ¿cómo se procede en su hospital?
Es fundamental la confianza de los residentes con los tutores, que les transmitan sus inquietudes. Así mismo, una de las funciones inherentes al cargo de Tutor es estar alerta ante posibles signos que muestre un residente que reflejen un malestar psicológico del mismo. En estos casos se contacta con el Servicio de salud laboral para una valoración inicial. Y, por supuesto, siempre que se considera necesario se inicia el proceso de entrada en el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo.
¿En qué medida la carga asistencial y presión de esta etapa formativa afecta a la salud mental de los alumnos?
De un modo crítico. Enfrentarse a las guardias, el miedo a cometer errores, las dificultades para relacionarse con los adjuntos y Jefes de Servicio… Son múltiples factores que pueden menoscabar la salud mental del residente.
La FPSOMC dispone de un Programa de Atención a la Salud del Médico Interno Residente (MIR) ¿Cómo evalúa este programa?
De una manera muy positiva. Está realizando una gran labor y permitiendo que la gran mayoría de los residentes que lo precisan retomen su práctica laboral habitual.
¿Cree que los tutores y residentes están concienciados sobre la salud mental y el autocuidado y gestión emocional? ¿Existe estigma?
Cada vez están más concienciados. Así mismo se les están entregando más herramientas, especialmente formativas, para saber cómo afrontar esta problemática. Y sí, por desgracia, este tipo de trastornos siguen siendo bastante estigmatizantes aunque se van dando pasos a nivel social para comprenderlos mejor.
¿Considera que falta formación en este aspecto?
Siempre va a faltar formación. Y, desde luego, cuanto más se avance en este aspecto los resultados serán más satisfactorios.
¿Considera que promover cambios en el sistema formativo español mejoraría la salud mental de sus residentes?
El Sistema MIR es una de las fortalezas de la Sanidad de nuestro país y así es reconocido en el resto del mundo. En ese sentido, más que cambiar, habría que incrementar la formación en esta área no sólo en la época de la residencia sino también durante los estudios de Medicina.
¿Qué opinión le merece el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME)?
Considero que es una de las grandes joyas de la Sanidad española.
