El presidente del Colegio de Médicos, el Dr. Carlos Arjona, valora en este editorial publicado en la revista de la corporación, “Escuela Médica”, la labor de la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC), una institución "basada en los principios de solidaridad y universalidad" que ayuda a los médicos y sus familias a "superar momentos duros y difíciles en la vida" desde las aportaciones voluntarias que realizan: "Los médicos somos solidarios con nuestros compañeros en momentos de necesidad"
Dr. Carlos Arjona, presidente del Colegio de Médicos de Cáceres
100 años de Solidaridad
En 2017 se celebró el centenario de la Fundación para la Protección Social de los Colegios de Médicos de España. ¡Cuantos médicos, hijos de médicos y familiares se habrán beneficiado durante estos cien años! Una fundación de cien años de existencia, con una impecable gestión y un importante patrimonio es digna de tener en consideración y colaborar para que perdure gracias a nuestras aportaciones.
Tenemos múltiples ejemplos en nuestro propio entorno, que gracias a la solidaridad entre médicos, han conseguido superar momentos duros y difíciles en la vida. Podríamos llenar la revista de testimonios de beneficiarios de Cáceres porque todos, en un momento dado de la vida estamos expuestos a necesitar estas ayudas.
Esta Fundación establece lazos solidarios que unen a los miembros de los Colegios de todo el país. ¡De la conducta de cada uno de nosotros depende el futuro de los demás!
La fundación está basada en los principios de solidaridad y universalidad atendiendo a la protección de todas las contingencias sociales mediante el fondo de solidaridad. En nuestro Colegio durante 2016 se dieron ayudas por valor de 170.000€, datos públicos que están a disposición de todos los colegiados. Mientras, ese mismo año en España se concedieron más de 13.000.000 de euros.
Los médicos vivimos una vida muy activa y pocas veces nos paramos a pensar en las necesidades de los compañeros que nos rodean. Pero os aseguro, que en los años que llevo en el Colegio he visto viudas de compañeros con grandes problemas económicos, médicos con necesidades importantes en sus últimos años, huérfanos de médicos que no podían seguir estudiando, médicos enfermos con adicciones. Para todos ellos la fundación ha tenido ayudas económicas, becas de estudio, residencias geriátricas o centros de tratamiento.
Se suele acusar a los médicos de que somos muy corporativistas. Yo no creo mucho en esta afirmación, pero es verdad que somos solidarios con nuestros compañeros en momentos de necesidad. Ante este hecho, nuestra Fundación es la envidia de los demás Colegios Profesionales.
Os pediría que leyeseis las prestaciones de la Fundación, valoraseis las ayudas dadas, y una vez leídas penséis si conoces alguna organización como la nuestra, que por tan poco de tanto. Una vez leídas estoy seguro de que nadie podrá decir que no merece la pena realizar la aportación. La fundación pues es la joya de nuestra casa y tenemos que conseguir que perviva otros cien años más.
