Teresa Romero, la primera paciente contagiada de ébola fuera de África, ha abandonado el Hospital Carlos III después de 30 días ingresada y lo ha hecho entre la muestras de afecto de profesionales y compañeros que se han congregado para transmitirle su afecto. Desde el Comité Científico creado por el Gobierno se ha afirmado que su vida a partir de ahora es “totalmente normal” y que no va a recibir ningún tipo de fármaco para el virus, aunque podría pasar por examenes rutinarios
Madrid, 6 de noviembre 2014 (medicosypacientes.com/E.P.)
Teresa Romero, la primera paciente contagiada de ébola fuera de África, abandonó ayer miércoles al mediodía, el Hospital Carlos III después de 30 días ingresada, entre muestras de afecto de profesionales y compañeros que se congregaron para transmitirle su afecto. Romero y su marido, Javier Limón, abandonaron el centro sanitario en su vehículo, entre aplausos y carteles de apoyo a Romero.
Minutos antes, la auxiliar de enfermería señalaba, ante los medios de comunicación que “No sé lo que falló, ni siquiera sé si fallo algo… sólo sé que no guardo rencor ni reproches”, mostrándose visiblemente emocionada y respaldada.
“Tenemos la mejor sanidad del mundo”, remarcó Romero para resaltar que el sistema sanitario tiene a profesionales “abnegados”, capaces de “obrar el milagro” pese a “muchas veces la nefasta gestión política”.
Seguidamente, reconoció que aún está “débil” y pidió “tranquilidad”, además de expresar que espera que su contagio sirva para “algo, para “investigar la enfermedad”. “Si mi sangre sirve para curar a otras personas aquí estoy”, concluyó, no sin antes indicar que “ahora serán sus abogados los que informen de los pasos legales a seguir“,
Vida normal
Desde el Comité Especial creado por el Gobierno para la gestión del ébola, el catedrático en Medicina por la Universidad Autónoma de Madrid, Fernando Rodríguez Artalejo, ha afirmado que Teresa Romero hará, a partir de ahora, una vida “totalmente normal”. Asimismo, ha asegurado que ya no va a recibir ningún tipo de fármaco para el virus, “aunque podría pasar por examines rutinarios para conocer mejor la evolución de la respuesta inmunológica en las personas que han superado la enfermedad”.
Respecto a la psicosis que ha provocado la crisis del ébola, Rodríguez Artalejo ha explicado que “el miedo frente a los problemas de salud es algo que ha acompañado al hombre desde que existen las enfermedades”. “No hay ningún tipo de justificación” para rechazar a las personas contagiadas”.
A juicio de este experto, “el miedo se combate con mejor información y con conductas ejemplares por parte de los que la tienen, como son los auxiliares”, por tanto ha considerado que el papel de los medios de comunicación es fundamental. Asimismo, ha lamentado que dentro de las redes sociales se hayan dado informaciones que no sean ciertas y ha defendido que “lo que hay que hacer es dar información y veraz”.
Finalmente, ha recordado que “esta enfermedad se cura y no se contagia nada fácilmente”, y, por lo tanto, ha animado a las personas que estaban en contacto con el centro de estética donde Teresa Romero acudió cuando estaba infectada a que sigan yendo. “Que vayan con toda confianza. Es cierto que ese centro ha estado cerrado pero les garantizo que no hay el más mínimo peligro. Los que hay que hacer es ayudar a estas empresarias”, ha concluido.
Mensaje de apoyo de la ministra
Por su parte, la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha optado por enviar a Romero un mensaje de apoyo, cariño y agradecimiento por su labor. La ministra ha asegurado que la recuperación de la paciente es “una enorme satisfacción para toda la sociedad española”, y ha expresado su “alegría”, recordando que la curación de Romero “ha sido la prioridad de todo el Gobierno y de todos los profesionales sanitarios desde que se confirmó su contagio”.
Asimismo, ha reiterado su “reconocimiento y gratitud” a la auxiliar de enfermería, que se prestó voluntaria para atender a los pacientes con Ébola. Un agradecimiento que ha hecho extensivo al equipo que la ha atendido durante el último mes en el Complejo Hospitalario La Paz-Carlos III y a “todos aquellos profesionales que día a día trabajan en nuestro magnífico sistema sanitario para preservar la vida de los ciudadanos, aun poniendo en riesgo su salud”. Una vez más, ha reiterado,” han demostrado su preparación y capacidad”. La ministra finalmente ha enviado una muestra de afecto a los familiares de Teresa Romero.