Sanitarios y políticos, de acuerdo en la necesidad de dar más pasos para mejorar la Ley del Tabaco

 

Tras la reunión se celebró una rueda de prensa para exponer ante los medios de comunicación las conclusiones de este encuentro en el que se constató “la voluntad de que la prevención y control de tabaquismo regresen a la agenda política”, como expresó el presidente de la OMC, Dr. Serafín Romero.

 

Desde su punto de vista, es fundamental que España vuelva a liderar la lucha contra el tabaquismo a nivel europeo como ya lo hizo en la primera década del 2000, y paliar los efectos del tabaco sobre la salud de la población.

 

La iniciativa corresponde en primer lugar, según recordó, a los agentes sanitarios al igual que sucedió con las anteriores leyes, y, en ese sentido, expresó su satisfacción por los primeros pasos que se dieron ayer en este sentido.

 

Otro de los pasos a dar, como anunció el Dr. Romero, es «exponerle al Ministerio de Sanidad nuestras propuestas para que impulse la iniciativa legislativa y poder así reducir el número de muertes al año por este problema de salud pública» y que superan, anualmente, las 50.000, de las que el 25% corresponden a personas de edad entre los 35 y 65 años, según datos manejados por el Dr. Romero.

 

Animó también a hacer frente a la industria del tabaco, al igual que se hizo en 2010 cuando se decidió introducir mejoras a través de la Ley 42/2010 del Tabaco. 

 

Por todo ello es necesario, como recalcó el presidente de la OMC, un cambio legislativo que incluya las 10 medidas que hemos propuesto, ya que, como subrayó, “todo lo que no aparezca en el BOE será de difícil cumplimiento”.

 

 

La Dra. Dalmau hizo un repaso a algunas de las acciones llevadas a cabo por el CNPT al que definió como líder en el movimiento contra el tabaquismo en España, gracias a la suma del esfuerzo de las 34 organizaciones del ámbito sanitario (Sociedades Científicas, Colegios profesionales, asociaciones de pacientes). 

 

Recalcó la importancia que adquiere la disuasión del consumo entre los menores y subrayó la importancia de emprender nuevas campañas enfocadas a este grupo de población.“Una de las claves para acotar la epidemia -subrayó- está en frenar el consumo del tabaco entre los adolescentes”. No en vano, el 80 % de los fumadores se inician en el hábito antes de los 18 años, según datos del CNPT.

 

La presidenta del CNPT insistió en la necesidad de un esfuerzo constante por parte de los profesionales sanitarios, de las Administraciones y de los políticos para reducir en la medida de lo posible esta epidemia, incluyendo la actualización de las normativas vigentes sobre la materia.

 

La Dra. Dalmau no quiso pasar por alto los avances que han aportado a la salud las leyes de 2005 y 2010 del Tabaco, aunque criticó el «parón» de los últimos años durante los que, a su juicio, no se ha producido ningún tipo de innovación en políticas de control del tabaquismo. En este sentido, lamentó que no se haya aprovechado el Real Decreto Ley 17/2017, en el que se traspone la Directiva europea, para la introducción de avances adicionales.

 

 

Precisamente, la tardanza en la trasposición de la directiva ha sido uno de los motivos por los que, a juicio del presidente del ENSP, Dr Francisco Rodríguez, no se ha podido introducir ninguna mejora en la regulación del consumo del tabaco, «limitándose a plasmar los mínimos establecidos por la Unión Europea».

 

De ahí, su demanda de replantear nuevas medidas con el fin de que España no quede a la cola de Europa en la prevención del tabaquismo. Entre las medidas a las que hizo alusión el Dr. Rodríguez se encuentra la de la trazabilidad, “poder seguir la ruta del tabaco desde que sale de la fábrica hasta que llega a manos del consumidor, que va a evitar, en cierto modo, el contrabando de este producto, «y que tanto preocupa a los Gobiernos que ven mermar su recaudación mediante impuestos. Hay que tener en cuenta que un 80 por ciento del precio son impuestos”. Otro de los riesgos de este comercio clandestino, al que aludió y en el que, muchas veces, está presente la propia industria tabaquera, son sus destinatarios, «muchos de ellos, menores de edad de los sectores más desfavorecidos que se inician, de esta forma, en el hábito tabáquico». “No en vano, en España, se comienza a fumar en torno a los 13 años”, como recordó.

 

En definitiva, remarcó la importancia de que dicho sistema de trazabilidad se desligue y sea independiente con respecto a la industria del tabaco. Apeló a que, en España, «sea el gobierno el que establezca un sistema independiente de trazabilidad para evitar la influencia de la propia industria».

 

El empaquetado genérico es otra de las medidas que el Dr. Rodríguez Lozano reivindicó, y que, como explicó, ya se cuenta con la experiencia de otros países como Australia, Nueva Zelanda, Reino Unido, Irlanda y Francia. Junto a ello defendió el incremento del precio del tabaco como medida disuasoria efectiva, sobre todo, entre los jóvenes. “En Australia, los menores no fuman porque una cajetilla les cuesta 16 euros; mientras que en Reino Unido su precio es de 13 euros y en Francia está previsto incrementarlo a 10 euros”.

 

Finalmente, abogó por el necesario entendimiento entre todos los agentes para lograr una reforma de la Ley del Tabaco consensuada por todos y que consiga acabar con el mayor problema de salud pública que sufre el país.

 

En el encuentro con los medios fueron invitados a participar los portavoces de los Grupos Políticos. Fueron los representantes sanitarios del PSOE y de Ciudadanos los que, finalmente, intervinieron, mientras que los del PP y Unidos-Podemos se comprometieron a transmitir las propuestas expuestas en la reunión a sus homólogos de Sanidad.

 

 

Tras agradecer la iniciativa adoptada por la OMC y el CNPT, lamentó que sólo dos meses después del debate parlamentario para la transposición de la directiva europea 2014/40/UE de Productos del Tabaco, se insista en la necesidad de introducir mejoras legislativas para combatir la epidemia de tabaquismo.

 

Igea reconoció la frustración de su partido con el resultado de la tramitación de la trasposición de la Directiva,  el pasado mes de noviembre, de donde derivan, a su juicio, las claves de las actuales demandas en política de tabaquismo, ya que, según explicó, “en un principio fue planteado y consensuado como un anteproyecto de ley para su tramitación urgente y, sorprendentemente, 24 horas después, fue convertido en un simple Decreto-Ley, impidiéndose de esa forma introducir muchas de las medidas del tipo de las que nos han propuesto los profesionales sanitarios”.

 

De ahí que el representante de Ciudadanos descartase que su partido vuelva a participar en “nada que suponga un blanqueamiento de las posturas de partidos políticos”. “Estaremos –recalcó- en la tramitación de iniciativas legislativas concretas que produzcan medidas concretas pero no apoyaremos nada sin transcendencia legislativa o que suponga el blanqueamiento de posturas de partidos políticos”.

 

En este sentido, coincidió con el resto de los intervinientes en la necesidad de alcanzar un consenso, dar un nuevo impulso e introducir nuevas medidas para acabar con la lacra del tabaquismo.

 

 

Fernández celebró las medidas planteadas por el CNPT y OMC, unas iniciativas que, a su juicio, “deberían haber partido del Ministerio de Sanidad” y coincidió con el representante de Ciudadanos en la oportunidad desperdiciada para dar los pasos necesarios en esta materia en beneficio de la salud de las personas.

 

Recordó que la ley 42/2010, impulsada por el Gobierno socialista, establecía revisiones bienales de la normativa, algo que no se ha hecho con regularidad desde 2013, si bien reconoció la existencia de un último informe presentado en 2016. En este sentido, criticó que no se esté haciendo una vigilancia adecuada de la implantación de la actual normativa. Asimismo, lamentó la eliminación del Observatorio del Tabaquismo como órgano de referencia a nivel nacional en la lucha contra la dependencia del tabaco, integrado por la Administración General del Estado, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos, agentes sociales, sociedades científicas, asociaciones de consumidores y usuarios, y organizaciones no gubernamentales.

 

Abogó, finalmente, por avanzar en nuevas medidas que “permitan, al menos, reducir en dos o tres puntos la prevalencia del tabaquismo entre la ciudadanía española. En este sentido, el PSOE presentó, hace dos meses, una proposición no de ley al objeto de avanzar en la prevención y el tratamiento del tabaquismo en España. “Su contenido coincide, ampliamente, con los planteamientos expuestos por el CNPT”, aseguró el portavoz socialista quien espera su próximo debate en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, mostrando su predisposición a introducir en la misma todas aquellas medidas necesarias y solicitó para ello el apoyo de todos los grupos políticos.