El Grupo de Tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) ha incidido en los riesgos del uso de los cigarrillos electrónicos como método para dejar de fumar, ya que, como ha señalado en un comunicado, “por el momento no está demostrada ni su eficacia para tal fin ni los riesgos para la salud que puede provocar”
Madrid, 21 de abril 2014 (medicosypacientes.com)
El Grupo de Tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) ha incidido en los riesgos del uso de los cigarrillos electrónicos como método para dejar de fumar, ya que, como ha señalado en un comunicado, “por el momento no está demostrada ni su eficacia para tal fin ni los riesgos para la salud que puede provocar”.
Según ha afirmado el coordinador de dicho Grupo de Trabajo, José Luis Díaz-Maroto, “Debemos dejar muy claro a nuestros pacientes que los cigarrillos electrónicos no se utilicen como ayuda para dejar de fumar”, al tiempo que ha insistido en algunos de los graves problemas de este producto como es el desconocimiento de la composición productos, o el contenido de las sustancias presentes en el vapor que desprende”.
Lo que sí se sabe, puntualiza, es que en una gran mayoría estos cigarrillos contienen nicotina, por lo que considera “muy importante” comunicar a la sociedad que, cuando un paciente fumador quiera hacer un intento serio para dejar de fumar, “el mejor tratamiento es el farmacológico y el apoyo psicológico”.
Díaz-Maroto criticó, además, que la regulación europea del cigarrillo electrónico “no exija a estos dispositivos catalogarse como medicamento para ayudar a dejar de fumar, ya que así “se hubieran pasado todos los controles que se exigen para comercializar cualquier producto medicinal, y que demuestran mediante los ensayos clínicos correspondientes, que son medicamentos seguros y eficaces”.