Cerca del 15 por ciento de las madres primerizas termina necesitando cirugía por alguna razón, incluidos escapes de orina o un desgarrón que no sana correctamente
Madrid, 9 de julio 2009 (medicosypacientes.com)
Más de la mitad de las mujeres que paren de forma natural sufren, al menos la primera vez, problemas intestinales, de la vejiga o alguna disfunción sexual, según la directora del Programa de Recuperación de la Salud en el Postparto del sistema de Salud en la Universidad de Michigan (Estados Unidos), Dee Fenner, quien aconseja a estas mujeres que vigilen también su salud después del parto.
Cerca del 15 por ciento de las madres primerizas termina necesitando cirugía por alguna razón, incluidos escapes de orina o un desgarrón que no sana correctamente, según Fenner, también profesora en el Departamento de Obstetricia y Ginecología y directora de los Servicios de Ginecología y Cirugía.
“Desafortunadamente, muchas mujeres sufren en silencio, no se quejan ni saben que puede hacerse algo al respecto (…) Queremos dar a las mujeres la educación y las herramientas para atender esto”, expresó la experta, que aconseja a estas mujeres acudir al médico si, tras el parto, experimentan síntomas como incontinencia intestinal o urinaria, episiotomía que no cicatriza, laceraciones profundas, fístulas rectovaginales o dificultades en las relaciones sexuales.
En este sentido, la clínica de la Universidad de Michigan incluye a médicos, enfermeras, parteras y fisioterapeutas, entre otros profesionales, en su programa de atención integral a las madres primerizas tras el parto, que además ofrece educación mediante hojas de instrucción que indican qué es normal y qué se considera anormal, cuándo hay que preocuparse y cuándo se trata, simplemente, de esperar a que cure.