Aproximadamente 50 500 personas murieron tras el terremoto que sacudió Turquía el 6 de febrero de 2023. Sin embargo, es probable que el número real de víctimas sea mucho mayor.
Según la organización miembro turca, AHEF, el Ministerio de Salud turco no ha brindado ningún apoyo a los médicos de familia que han tenido que garantizar su seguridad y la de sus familias después del terremoto, así como el cuidado de sus pacientes.
La UEMO (Unión Europea de Médicos Generales/de Familia) apoya plenamente a nuestros colegas turcos y recomienda encarecidamente a las autoridades turcas la implementación de las siguientes medidas de reconstrucción posteriores al terremoto para garantizar servicios eficaces y de calidad para los pacientes, que incluyen:
- Protección de ingresos para Médicos de Familia que trabajan en zonas sísmicas
- Proyectos de vivienda masiva de nueva construcción que incluyan obligatoriamente
- Dotación suficiente de servicios de atención primaria adecuadamente ubicados en relación con la densidad de población
- Diseño y construcción sismorresistentes de los edificios de los centros de salud
- Reemplazo, a cargo del gobierno, de los dispositivos, herramientas y equipos médicos destruidos o saqueados tras el terremoto
- Establecimiento de líneas robustas de suministro a los centros de salud de insumos, desechables y vacunas costeadas por el Ministerio de Salud
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