La mesa final del IV Congreso de Cooperación Internacional celebrado en Valencia ha puesto en relieve que para hacer frente al cambio climático y paliar sus consecuencias en la salud Global son necesarias una mayor Implicación e información, así como una transición hacia un cambio de modelo industrial y de consumo
El Dr. Tomás Cobo, presidente del Consejo General de Médicos (CGCOM) y de su Fundación para la Cooperación Internacional (FCOMCI), ha sido el encargado de presentar la última mesa del IV Congreso de Cooperación Internacional. Cristina Ramón, presidenta de la Coordinadora ONGs Valenciana, Óscar Díaz, director de la Fundación Estatal Salud, Infancia y Bienestar Social (CSAI), Borja Cabezón, embajador de Salud Global en España del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, y el Dr. Pedro Cabrera, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Las Palmas y coordinador del observatorio del cambio climático del CGCOM, han sido los protagonistas de esta última mesa de debate del Congreso, que ha servido de antesala al broche final del encuentro: la Declaración de Valencia.
El Dr. Cobo, presidente de la FCOMCI, ha resaltado la importancia de contar con una Fundación para la profesión médica como la FCOMCI que “poco a poco ha creado una red con 33 oficinas de cooperación en los colegios de médicos para establecer sinergias con las instituciones; potenciar y promover entre los más jóvenes este camino de la cooperación y el voluntariado; impulsar la formación y protección para que los médicos vayan al terreno de una manera profesionalizada y con la debida protección; contar con un registro de profesionales y, finalmente, avanzar en la armonización del desarrollo e implantación de la ley de cooperación y de voluntariado”, ha explicado.
Por su parte, la presidenta de la Coordinadora ONGs Valenciana ha querido resaltar los dos aspectos en los que, según ha explicado, más se han repetido en este Congreso. “Hemos escuchado y se han visto evidenciados datos demoledores sobre la interacción entre el cambio climático y la salud humana. Se prevé que entre 2030 y 2050 el cambio climático cause 250 000 mil muertes adicionales. Que efectos del cambio climático afecten más a los países en vías de desarrollo es el otro punto para destacar y reflexionar que tantas veces se ha repetido en estas jornadas”.
El director de la Fundación Estatal Salud, Infancia y Bienestar Social ha explicado algunos de los principales ejes y acciones que se llevan a cabo desde su Fundación: “El apoyo a los investigadores, la lucha contra la pobreza y vulnerabilidad infantil, así como el trabajo conjunto que hacemos con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) en relación con la formación en especialidades médicas en los países solicitantes de esta ayuda, son las piedras angulares de nuestro trabajo.
El coordinador de la Alianza Médica Contra el Cambio Climático, Dr. Pedro Cabrera, ha puesto en valor esta iniciativa creada hace más de un año cuyo primer objetivo consiste en poner sobre la mesa la emergencia de salud qué supone el cambio climático “La profesión médica teníamos que estar sí o sí frente al cambio climático porque éste trae enfermedades, por tanto, combatir el cambio climático es hacer medicina preventiva y la medicina preventiva es una obligación inherente a la profesión”.
Finalmente, Borja Cabezón ha puesto en relieve la necesidad de renovar el modelo liberal, renovar el modelo industrial y de consumo y potenciar acciones como la búsqueda de energías limpias y renovables o la lucha contra la desinformación en este ámbito del cambio climático a través de políticas transversales a nivel nacional, europeo e internacional.
