«La dimensión ética del ejercicio profesional no es un espacio limitado para un reducto de aficionados, sino que debe interesarle a cualquier médico», según se expuso durante la inauguración de la segunda edición del Curso «Título Experto en Ética Médica», promovido por la OMC, a través de su Fundación para la Formación (FFOMC) y la Fundación Ortega Marañón. Dicha actividad parte con el objetivo de crear un ámbito académico para la formación de los miembros de las Comisiones Deontológicas y conseguir que los médicos desarrollen habilidades para el análisis de cuestiones éticas de la práctica asistencial, en plena etapa de maduración de la ética médica en España según corroboraron los expertos, en este acto
Madrid, 29 de octubre 2012 (medicosypacientes.com)
Crear un espacio académico para la formación de los miembros de las Comisiones Deontológicas y conseguir que los médicos desarrollen habilidades para el análisis de cuestiones éticas de la práctica asistencial, es uno de los principales fines del curso “Título de Experto en Ética Médica”, cuya segunda edición se puso en marcha el pasado viernes, 26 de octubre, con un acto inaugural celebrado en la sede de la Organización Médica Colegial.
«Promover un curso de estas características era una aspiración que se venía valorando desde hace tiempo como una necesidad y, a la vez, como una obligación, porque los Colegios de Médicos como instituciones de derecho público reciben la encomienda de la sociedad para asumir la responsabilidad en la promoción y la regulación de la Deontología Médica», tal como manifestó el director académico del curso, el doctor Rogelio Altisent en el acto inaugural.
Tras dar la bienvenida a los alumnos, como portavoz del grupo de profesores, constituido por 30 expertos, de unas 15 Universidades diferentes, el doctor Altisent recordó la breve historia del curso, iniciado en octubre de 2011, con gran acogida pese a la crisis que embarga al sistema sanitario “La bioética en España tiene su recorrido, de hace 20-25 años, pero dentro del ámbito de la bioética este tipo de formación en ética médica estaba muy poco desarrollada. En los últimos años ha experimentado un cierto proceso de maduración hasta atrevernos a hablar de mayoría de edad”. Es por ello, como remarcó Altisent, “estamos asistiendo a la puesta de largo de la ética médica en España, algo así como la mayoría de edad de esta disciplina.
Este experto en ética médica animó a ir tomando conciencia de la dimensión ética del ejercicio profesional que, como indicó, “no es un espacio limitado para un reducto de aficionados, sino que debe interesarle a cualquier profesional, y cualquier profesional de la medicina necesita una formación básica en los aspectos éticos al formar parte del núcleo de la excelencia profesional a la que, en principio, todos aspiramos”.
En línea con lo anterior, reconoció que se necesitan grupos de profesionales con una especial formación académica que puedan liderar las cuestiones docentes y de investigación en esta disciplina. “Éste es precisamente uno de los principales objetivos de este curso, contribuir a que haya grupos de profesionales involucrados en una formación estructurada y sistemática, que después sean capaces bien dirigir un curso, bien impartir sesiones, formar parte de los comités de ética”.
La realidad ha demostrado que a lo largo de estos años no se ha dispuesto de estructuras docentes que preparasen a los profesionales para formar parte de las Comisiones Deontológicas, y como indicó en este sentido el doctor Altisent, «si bien muchos de los integrantes de estas Comisiones han hecho importantes aportaciones a la Deontología Médica, pero gracias a la especialidad en la que se movían, o por considerar la ética una materia muy atractiva», “hemos entendido que hay que subsanar la situación dada su importancia”, manifestó el director académico de este curso de carácter universitario.
En nombre de la OMC, participó su vicesecretario, el doctor Jerónimo Fernández Torrente, quien agradeció la asistencia a la sede de la OMC de los nuevos alumnos de este curso. «La presencia de estos colegas ilusionados por mejorar su cualificación en Ética Médica tiene varios significados que merecen ser valorados», tal como señaló.
Inició su intervención recordando los primeros pasos de esta actividad, «estamos asistiendo al nacimiento de un proyecto que llevamos gestionando con mucha ilusión desde hace tiempo conscientes de que teníamos una deuda con la profesión, puesto que la ética médica es probablemente la justificación más importante que sostiene esta casa». Aludió, por otra parte, a la responsabilidad social que tiene la Organización a la hora de promover y garantizar la calidad ética de la profesión e indicó, dirigiéndose al alumnado, que «este curso es el primer paso de un recorrido. Por tanto, os tenéis que sentir de algún modo responsables del proyecto junto con el claustro de destacados profesores del curso».
Asimismo, recordó a los asistentes que más allá de las convicciones «hemos de ser capaces de argumentar y razonar nuestras posiciones éticas. Por ejemplo, habéis discutido que una relación médico-paciente de calidad humana es difícilmente exigible mediante una norma legal, pero que al mismo tiempo es imprescindible para ser un buen profesional. Este es un buen ejemplo para entender que necesitamos médicos con formación académica en ética que sean capaces de explicarlo y enseñarlo con altura».
En otro momento de su intervención se refirió a la importancia de la investigación en ética y deontología. «Y para lograr nuevo conocimiento se necesitan investigadores. Esperamos que muchos de vosotros, al terminar este curso, os enganchéis en este proyecto porque os necesitamos. Tenemos que ver más artículos en las revistas científicas donde se traten las cuestiones éticas con altura, participando en los debates públicos desde la experiencia asistencial, construyendo y divulgado doctrina deontológica con rigor académico».
Finalmente, el vicesecretario de la OMC se dirigió a las nuevas generaciones de médicos exponiéndoles que, «nos preocupan mucho que las jóvenes generaciones de médicos puedan recibir un mensaje poco ilusionante de sus colegas mayores que viven en estos años momentos de cierto desengaño, desesperanza, y hasta apatía. Pero la Medicina es una profesión que se sigue viviendo como una vocación. Esto significa cultivar ideales de servicio a la sociedad y a nuestros pacientes. En este escenario la ética en sus diferentes dimensiones, juega un papel decisivo. Debemos lanzar a los colegas jóvenes un mensaje de optimismo porque si estamos unidos en nuestros ideales éticos seremos capaces de sacar esto adelante».
Para finalizar el acto, la coordinadora docente Marian Jiménez, alumna, a su vez, de la primera promoción, expuso a los nuevos alumnos algunas de sus experiencias obtenidas en la primera edición. Subrayó el esfuerzo realizado por todos los profesionales involucrados en este proyecto, la cuidada planificación y los objetivos, que, en la primera edición, como aseguró, «se cumplieron con creces». Destacó, además, el valor de los instrumentos de aprendizaje que se ponen a disposición del alumnado, como el portfolio o los foros de debate, “una excelente plataforma de aprendizaje, tanto vertical, con el profesorado, como horizontal con los compañeros de curso”. Para terminar, aludió a un trabajo de investigación que sobre las enseñanzas adquiridas se pondrá en marcha en breve y sobre el que casi las dos terceras partes de los alumnos de la pasada edición han mostrado su interés.
Tras el acto inaugural comenzó el primer modulo presencial dentro del cual el secretario de la Comisión Central de Deontología de la OMC, el doctor Jacinto Bátiz, impartió una ponencia sobre la razón de ser de las Comisiones Deontológicas en los Colegios de Médicos. Su intervención se centró en explicar detalladamente lo que es una comisión de deontología como asesora de la Junta Directiva de un Colegio de Médicos y las funciones que tiene atribuidas, «partiendo de que habrá colegiados que acabarán formando parte de la Comisión Deotológica, es preciso que conozcan de antemano lo que es este órgano y que sepan que, además de la función de analizar las conductas que no sean adecuadas de los colegiados, hay otras funciones como puede ser la de formar en deontología a los colegiados, la de asesoramiento en otros temas de ética y deontología».
Como recordó este experto, «una de las principales funciones de estas Comisiones es la de vigilar la deontología médica de los colegiados, una de las áreas primordiales de un Colegio de Médicos, junto con el buen hacer de los médicos y la vigilancia de las normas del Código Deontológico». Precisamente, otro de los conferenciantes, el profesor Joan Monés, se ocupó de la presentación dicho Código que entró en vigor desde julio de 2011, y que consta de 21 capítulos, 66 artículos, y casi 200 subapartados, como recordó, y habló también de la actividad de las Comisiones Deontológicas.
Curso pionero en España
El curso “Título de Experto en Ética Médica”, es el primero de estas características en España, por iniciativa de la Organización Médica Colegial, a través de su Fundación para la Formación (FFOMC) y el Instituto Universitario Ortega y Gasset y su Fundación Ortega-Marañon. Dicha actividad está dirigida a todos los médicos/as y profesionales interesados en adquirir formación académica en ética médica, con especial orientación a las labores a desempeñar a través de las Comisiones Deontológicas de los Colegios de Médicos, de los Consejos Autonómicos o en las unidades de ética asistencial de los centros sanitarios.
El objetivo principal de este curso es la adquisición de conocimientos sólidos sobre los fundamentos éticos de las principales cuestiones de la práctica médica; conseguir que los médicos desarrollen habilidades para el análisis de cuestiones éticas de la práctica asistencial y adquirir experiencia en los procedimientos y actividades desarrollados en las Comisiones de Deontología.
Dicha actividad formativa ha sido diseñada sobre una base de más de 30 temas fundamentales de Ética Médica entre los que cabe destacar: cuestiones éticas y deontológicas de la historia clínica y documentación sanitaria; confidencialidad y secreto profesional; la relación clínica, sus tipos e implicaciones éticas; cuestiones éticas en las tecnologías de la información y la comunicación en Medicina; aspectos éticos de las redes sociales en el futuro de la sanidad; ética de la gestión clínica y de la prescripción; y la capacidad del paciente, por citar sólo algunos de ellos. Más de una treintena de profesores con amplia experiencia en materia ética componen el cuadro docente para la enseñanza y la difusión de todos estos aspectos.
Tras su finalización se podrá obtener un título universitario que servirá a aquel que lo obtenga para promocionarse en todos los terrenos en los que se maneje la ética médica, en todos los aspectos profesionales en los que esté presente esta disciplina.Todos los contenidos que se a bordarán se encontrarán incorporados en el contexto del campus o plataforma virtual de la FFOMC a la que se accederá a través de la web: www. ffomc.org.
