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Entrevista con el presidente de la Federación Española de Medicina del Deporte, el doctor Pedro Manonelles

?La desaparición de la especialidad de Medicina del Deporte haría imposible prestar servicios médicos del deporte a los millones de ciudadanos que ya los utilizan y que los demandan cada vez con más necesidad?

Los especialistas en Medicina del Deporte han vuelto a dar la voz de alarma sobre el futuro de su especialidad. Los máximos representantes de las principales Agrupaciones que la representan muestran su preocupación una vez conocido el borrador de R.D. sobre Troncalidad. El doctor Pedro Manonelles, presidente de la Federación Española de Medicina del Deporte (FEMEDE) es uno de los máximos exponentes de la lucha por la consolidación de esta rama de la Medicina. Su mensaje es claro y conciso, al respecto: el cuidado de la salud de cualquier deportista, ya sea de élite o amateur, requiere el trabajo de médicos especializados que entiendan que cuando se convierte en paciente, tiene unas peculiaridades importantísimas que se deben de tener en cuenta para su manejo

El presidente de FEMEDE,
doctor Manonelles.

Madrid, 19 de julio 2010 (medicosypacientes.com)

-¿Cuál sería, desde su punto de vista, el papel que realmente ha de ejercer esta especialidad para el conjunto de la sociedad?

-Desde luego, el papel que viene realizando de una forma consolidada hace muchos años y que consiste, genéricamente, en el cuidado de la salud del deportista y que, resaltando las líneas de trabajo más destacables, se podría resumir en los siguientes aspectos, cuyo orden no refleja ninguna prioridad:
-Prescripción de ejercicio para el manejo de un número cada vez más numero de enfermedades crónicas. Algunas de ellas, verdadero azote de nuestra sociedad como la obesidad (también en edades jóvenes), hipertensión arterial, hiperlipemias, diabetes, cardiopatías, enfermedades respiratorias, enfermedades reumáticas y del aparato locomotor, depresión y ansiedad, algunas formas de cáncer, etc.
-Prescripción de ejercicio en los ancianos, grupo social cada vez más numeroso y activo, en el que el ejercicio permite aumentar la autonomía, retrasar la dependencia, prevenir fracturas por caídas y mejorar la calidad de vida.
-Prevención de procesos patológicos, algunos tan importantes como la muerte súbita del deportista, mediante reconocimientos médicos para la aptitud deportiva y el resto de controles periódicos de salud del deportista.
-Diagnóstico y tratamiento de lesiones producidas por la práctica de la actividad física y deportiva.
-Control del dopaje y supervisión de la medicación y sustancias que usa el deportista.
-Asistencia a eventos deportivos.
-Valoración funcional para prevención de lesiones y de enfermedad y para apoyo al entrenamiento científico.
Ciertamente, el ámbito de actuación de la Medicina de la Educación Física y del Deporte es enorme, tanto por las múltiples funciones que debe abordar el especialista, como por la gran cantidad de ciudadanos que practican alguna forma de actividad física y deportiva. Es muy importante destacar que la Medicina del Deporte no se limite exclusivamente al ámbito de la alta competición o del deporte profesional. La realidad es que la mayor parte de usuarios de servicios médicos del deporte no son ni profesionales ni deportistas de alto nivel. La desaparición de la especialidad haría imposible prestar estos servicios médicos a los millones de ciudadanos que ya los utilizan y que los demandan cada vez con más necesidad. Estos son argumentos suficientes para que la especialidad quede definitivamente consolidada e incluida en el catálogo de especialidades médicas de nuestra sociedad.

-Según datos recientes, un 37 por ciento de la población entre 14 y 74 años desarrolla alguna actividad deportiva en España, lo que demuestra la importancia sociosanitaria de que existan especialistas en Medicina del Deporte, ¿cómo afectaría a este amplio porcentaje de población su no existencia?

-Efectivamente, la práctica de actividades deportivas cada vez está más extendida en nuestra sociedad. Esta práctica es fundamentalmente beneficiosa, pero los usuarios deben ser asesorados convenientemente sobre la forma de realización del ejercicio físico. Además, el ejercicio físico trae consecuencias que tienen implicaciones sanitarias que debe asumir el especialista, como lesiones u otros problemas médicos. Un aspecto primordial es el de la prescripción de ejercicio en la gran cantidad de procesos crónicos en los que se ha demostrado su enorme utilidad. Pero la prescripción no debe quedarse en una mera recomendación estandarizada. El paciente debe recibir recomendaciones individualizadas respecto a su enfermedad y situación personal, muchas veces basadas en una necesaria valoración funcional. Además, es necesario monitorizar su evolución. Aquí es donde se muestra la necesidad de incorporación progresiva de especialistas en Medicina del Deporte que, en una primera fase, asesorarían a los médicos que estuvieran en contacto más directo con los pacientes, pero que irían ocupando un papel más notorio con el paso del tiempo.

La lucha contra el dopaje,
incuestionable

-La desaparición de la especialidad, además, ¿tendría consecuencias nefastas sobre el desarrollo de otras normativas como, por ejemplo, la aplicación de la Ley de Protección de la Salud y lucha contra el dopaje en el deporte, en vigor desde 2007?

-Esa Ley, que fue un tema prioritario de la legislatura y que se alcanzó con un consenso completo entre los grupos políticos, marcó un hito en la concepción de la forma de atender las necesidades de cuidado de la salud del deportista. Tiene, aparte de todo el desarrollo del control contra el dopaje, aspectos de gran importancia para la salud del practicante de actividades deportivas, tanto deportistas de competición como de recreación. Estos aspectos son: los reconocimientos médico-deportivos, los exámenes de salud, la tarjeta sanitaria del deportista, la asistencia médica a eventos deportivos, entre otros. Muchos de estos aspectos sería imposible llevarlos a efecto sin la presencia de especialistas en Medicina de la Educación Física y del Deporte. El cuidado de la salud del deportista requiere el trabajo de médicos especializados que entiendan que el deportista, cuando se convierte en paciente, tiene unas peculiaridades importantísimas que se deben de tener en cuenta para su manejo. Corresponde al médico especialista controlar y supervisar la medicación y suplementos que, por diversos motivos, tenga que tomar. El deportista requiere una atención, en cuanto a horarios y dedicación, que sólo se encuentran al alcance de un médico especializado al servicio del cuidado de los deportistas, los controles de dopaje están dirigidos por un médico que, lógicamente debe ser un especialista, etc. Por ello, entre otros aspectos, la desaparición de la especialidad sería un enorme inconveniente para el desarrollo de esa ley y, sin duda la privaría del desarrollo de algunos de sus aspectos más importantes, desde el punto de vista de la salud.

-La lucha contra el dopaje en el deporte es fundamental ¿qué labor ejerce un especialista en Medicina del Deporte en este terreno?

-Desde luego, pero es un aspecto que no se suele tener en consideración. El especialista es el encargado de supervisar la medicación y suplementos que toman los deportistas que, no hay que olvidar, pueden enfermar como cualquier otra persona. Hay medicaciones que están incluidas en las listas de sustancias prohibidas y otras que necesitan un procedimiento estricto para poder ser utilizadas por los deportistas. Lógicamente, si el deportista acude e cualquier facultativo recibirá un tratamiento si lo precisa, pero ese facultativo no tendrá en consideración posiblemente las sustancias sujetas a restricciones y, mucho menos, conocerá algunos aspectos concretos de utilización de esas medicaciones. Esta es una labor que corresponde al especialista en Medicina del Deporte. Hay que pensar que un hallazgo analítico adverso (lo que antes se llamaba un ?positivo?) puede conllevar una inhabilitación para la práctica deportiva de dos años, además de las correspondientes sanciones económicas, retirada de becas y premios, y anulación de resultados y de récords. El médico especialista es el único que, entre sus múltiples funciones, tiene la obligación de conocer los cambios que se producen cada año respecto a los procedimientos de control de dopaje, sustancias prohibidas y realización de los procedimientos legales para poder utilizar sustancias y medicamentos con riesgo de sanción.

-Los especialistas en Medicina del Deporte trabajan mayoritariamente en consultas o centros privados, sin embargo, cada vez se ve claramente su papel de apoyo en consultas, por ejemplo, de Atención Primaria,?.

-Así es, aunque hay un buen número de especialistas trabajando también en centros de Medicina del Deporte autonómicos y locales, además de en organismos deportivos, como federaciones y clubes. Efectivamente, los médicos de Atención Primaria, aunque también otros especialistas como cardiólogos, neumólogos, rehabilitadores?, ocupan un lugar primordial a la hora de luchar frente a patologías de primer orden en nuestra sociedad, algunas de ellas verdaderas epidemias de la sociedad desarrollada, como son la obesidad que está llegando a niveles extraordinariamente preocupantes, incluso en las edades infantiles y adolescentes, la hipertensión, la diabetes, la hipercolesterolemia, en las que se ha demostrado la necesidad de aplicar ejercicio físico regular y programado para su control y que constituyen una prioridad en los objetivos de trabajo de la Unión Europea.

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