El ejercicio de la Medicina lleva inherente una serie de derechos y deberes por parte de los médicos cuyo desequilibrio puede, incluso, llegar a afectar a la calidad de la asistencia, según se puso de manifiesto en una jornada sobre los derechos en el ejercicio de la profesión médica, organizada por las Vocalías de Medicina Privada por Cuenta Propia y por Cuenta Ajena de la Organización Médica Colegial (OMC) en colaboración de la Asociación Profesional de Médicos de Ejercicio Libre (ASPROMEL). En la misma se hizo un repaso a una serie de derechos relacionados con el ejercicio de la profesión que han de estar siempre presentes y sobre los que se requiere una "reflexión colectiva", como coincidieron en señalar buena parte de los participantes
El desequilibrio entre derechos y deberes del médico afecta a la calidad de la asistencia
Durante el encuentro se habló de derechos vinculados a la práctica asistencial y relacionados con en el ejercicio de la profesión, con la relación médico-paciente, con el ámbito de los sistemas de salud y el de la propia salud, en la formación e investigación y docencia, y también en el laboral y retributivo. Todos ellos como garantía también para el paciente y como soporte de la confianza y seguridad de los ciudadanos.
La jornada fue inaugurada por el Dr. Juan José Rodriguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), y por el Dr. André Bolliguer Horisberger, presidente de la Asociación Profesional de Médicos de Ejercicio Libre (ASPROMEL), además de los representantes nacionales de Medicina Privada por Cuenta Propia y Ajena, Dres. Manuel Carmona y José María Nieto, respectivamente.
El Dr. Carmona explicó el objetivo del encuentro, “muy oportuno en los tiempos que corren”, donde “los derechos de los médicos han de ser abordado de una forma transversal, ya que abarcan a todas las categorías y especialidades”. Sin embargo, como lamentó “estos derechos de los médicos, pese a que todo el mundo los da por hechos no están escritos en ningún sitio”.
El origen de esta Jornada, como recordó el representante nacional de Medicina privada por cuenta propia, surge de la “Declaración de Madrid”, de junio de 2015, (http://www.medicosypacientes.com/articulo/medicos-de-ejercicio-libre-de-europa-estudian-el-modelo-de-colaboracion-publica-privada-en) en la que se expresaba un rotundo rechazo a la violación de ciertos derechos fundamentales reconocidos a todo médico, propulsada por la Asociación Europea de Médicos de Ejercicio Libre (EANA).
El presidente de la OMC, Dr. Rodríguez Sendín recordó, durante la inauguración, que las obligaciones y compromisos de los médicos están necesariamente concatenados a una serie de derechos; “es imposible servir a esos deberes sin derechos garantizados”, remarcó.
En otro momento de su intervención indicó que la profesión médica se justifica en base a la ciencia, sustentando su argumento en cuatro premisas: “Utilización siempre del conocimiento aplicado ante las necesidades de los pacientes; dicha aplicación se hará mediante el desarrollo científico e innovación; se perseguirá una búsqueda constante de las mejoras posibles; y el alcance de la excelencia sólo es posible si va acompañada de componentes éticos tal como marca el código deontológico”.
El vínculo entre derechos y deberes lo ilustró con algunos ejemplos como la libertad de prescripción, el uso de las técnicas. así como el derecho a tener un salario digno. “Salarios y condiciones de empleo son un claro ejemplo de nuestros derechos, pero también hay que considerarlos como una respuesta a los deberes con nuestros pacientes”, según sus palabras.
Por otra parte, se refirió al dilema planteado de hasta qué punto “los deberes de los médicos y sus derechos pueden estar condicionados a los medios que la Administración o el pagador nos quieran imponer”, o, si por el contrario, “deberían mantenerse unos derechos o deberes constantes” Y es que, a su juicio, “la vida del paciente no solo depende del clínico sino también del entorno y del sistema en el que ejerce”.
En la primera mesa de la Jornada, el presidente de ASPROMEL, Dr. André Bolliguer, tras destacar la necesidad de este tipo de foros donde se hable de los derechos fundamentales de los médicos y de establecer un espacio a modo de “laboratorio de ideas y análisis”, centró su intervención en los “Derechos Humanos y el Médico”, Desde su punto de vista, “los derechos no deben quedar en una ‘carta abstracta’, sino que “tienen que vivirse y ponerse en práctica”.
Abordó, en otro momento de su intervención, el vínculo entre derechos humanos y el médico que, a su juicio, “es bidireccional”. “El médico, como ser humano, es beneficiario de los derechos humanos que le protegen y, por otra parte, es garante de esos derechos humanos frente al paciente, siendo éste el punto de donde emanan los Códigos Deontológicos”.
El vicepresidente de la OMC, Dr. Serafín Romero, también participante en esta primera mesa, ahondó sobre los “Derechos en el ámbito de su propia salud y a ser reconocidos socialmente”. Recordó que los médicos como ciudadanos han de tener derecho a la salud y como trabajadores se tiene garantizado servicios de salud laboral, adaptado a sus puestos de trabajo, amparados por normativas.
El Dr. Romero citó el Código Deontológico donde también se contempla la protección de la salud de los médicos y por ende al ciudadano al que se le presta asistencia, y que da lugar al Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) que vela por la salud de los profesionales, y también pedimos que ésta se certifique a través de la Validación Periódica de la Colegiación (VPC).
Además, en el ámbito internacional, reivindicó que “se sigan manteniendo las declaraciones internacionales que protejan al médico voluntario y cooperante para poder desarrollar su labor”.
En otro momento de su intervención, se refirió al derecho a la defensa del prestigio profesional, “solo desde el profesionalismo y el abandono de la cultura de la queja podremos de forma individual y con efecto colectivo renovar nuestro contrato social, que es el que nos garantiza el reconocimiento por parte de los ciudadanos”, según señaló.
Derechos en el ejercicio de la profesión
Por su parte, el presidente del Colegio de Médicos de Badajoz, Dr. Pedro Hidalgo, se centró en los “Derechos en el ejercicio de su profesión”, a través de un decálogo basado en el Código Deontológico en el que se contemplan, entre otros, el derecho de poder ejercer su actividad médica en forma libre y sin presiones de ninguna naturaleza.
Además, el médico tiene derecho a ser respetado en su juicio clínico (diagnóstico y tratamiento) y en su libertad de prescripción así como en su decisión de rechazar la atención de un paciente, siempre que tales aspectos se sustenten sobre bases éticas, científicas y normativas.
Otro de los derechos a los que se refirió el Dr. Hidalgo es el de desarrollar su actividad profesional en instalaciones que garanticen las medidas de seguridad e higiene, en función de lo que establece la normativa.
Recibir de la Institución donde realiza la prestación de sus servicios, el apoyo de personal servicios, el apoyo de personal totalmente capacitado, así como el equipo, los instrumentos e insumos equipo, los instrumentos necesarios, de acuerdo con el servicio que presta es otro de los derechos a los que se refirió.
También incluyó los derechos a abstenerse de garantizar resultados en relación a un determinado proceso asistencial y a no omitir juicios concluyentes sobre los resultados esperados de la atención resultados esperados de la atención médica.
Otros derechos mencionados por el Dr. Hidalgo fueron los relativos a un Trato Respetuoso, a que se facilite el acceso a la educación médica continua, a participar en actividades de investigación y enseñanza, a asociarse en organizaciones, asociaciones y colegios profesionales, a la defensa de su prestigio profesional y a ser remunerado por los servicios profesionales que preste de acuerdo a su condición laboral, contractual o a lo pactado con el paciente
Concluyó el vocal nacional de Medicina Privada por cuenta ajena, Dr. José María Nieto, quien expuso sus argumentos sobre “Derechos en la Formación Profesional y en el ámbito de Investigación y Docencia”, destacando el derecho a la formación especializada, tras la obtención del grado. Respecto a la formación continuada subrayó el deber y el derecho sobre la misma por parte de los profesionales. Además, aludió al derecho del médico a participar en proyectos de investigación y docencia como parte de su desarrollo profesional.
En definitiva, y a su juicio, “es la propia sociedad la que debe facilitar al profesional el derecho a la formación, puesto que es la que después recibe el beneficio de la mejora de las competencias manifestadas en el profesionalismo del médico”.