Estos datos se desprenden de un estudio realizado por médicos de Atención Primaria, publicado en la última edición de la ?Revista Española de Cardiología?. De estos resultados se desprenden la necesidad de una estrategia integral de prevención de las enfermedades cardiovasculares
Madrid, 2 de noviembre de 2010 (medicosypaicentes.com)
Enfermedades cardiovasculares como la insuficiencia cardiaca y la arteriopatía periférica afectan cada vez más la población española, según un estudio realizado por médicos de Atención Primaria que ha analizado la incidencia de enfermedades cardiovasculares como la cardiopatía isquémica y la enfermedad cerebrovascular.
El estudio, publicado en la última edición de la ?Revista Española de Cardiología?, se ha llevado a cabo en dos centros de salud de Atención Primaria de Barcelona entre junio de 1998 y junio de 2008), con una muestra de 931 sujetos con edades comprendidas entre 35 y 84 años, sin enfermedades cardiovasculares previas y seleccionados aleatoriamente.
Los resultados el estudio confirman que la cardiopatía isquémica fue especialmente frecuente en los mayores de 65 años (54,4% de los casos), además en el caso de la angina, la proporción es aún mayor, con un 68 por ciento. Por sexos, en esta franja de edad, se observó una incidencia del infarto de miocardio cinco veces superior en hombres, mientras que en el caso de mujeres el ictus tuvo una incidencia ligeramente superior. Las cifras fueron similares en el caso del accidente isquémico transitorio.
El director del estudio e investigador del IDIAP Jordi Gol y investigador asociado del Institut Municipal d’Investigació Mèdica (IMIM), el doctor José M. Baena-Díez, señala que “es necesaria una estrategia integral de prevención de las enfermedades cardiovasculares”.
“Para ello hay que abordar, en primer lugar, la prevención, el control y el tratamiento de los factores de riesgo cardiovascular, con el objetivo de reducir la incidencia de las enfermedades cardiovasculares. En segundo lugar, debemos realizar una correcta valoración del riesgo cardiovascular de los pacientes mediante el uso de funciones validadas en nuestro medio. Finalmente es necesario aplicar un tratamiento precoz, adecuado e intensivo de las enfermedades cardiovasculares cuando aparecen”, añade.