La fibrilación auricular es un tipo de arritmia muy frecuente, que representa casi el 4 por ciento de las urgencias españolas generales, de ahí que cardíologos y urgenciólogos hayan actualizado conjuntamente un documento de consenso con el objetivo de homogeneizar la práctica clínica de su abordaje
Madrid, 19 de septiembre 2012 (medicosypacientes.com)
La fibrilación auricular es un tipo de arritmia muy frecuente, que representa el 3,6 por ciento de las urgencias españolas generales, de ahí que cardíologos y urgenciólogos haya actualizado conjuntamente un documento de consenso con el objetivo de homogeneizar la práctica clínica de su abordaje.
Las sociedades españolas de Cardiología (SEC) y Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) han actualizado el documento que existía para tal fin publicado en 2003. En el actual se incluye nuevos avances terapéuticos, modificaciones de los criterios de anticoagulación y nuevas indicaciones en el control de la frecuencia cardiaca, según se ha explicado durante su presentación en la sede de la Organización Médica Colegial.
Una de las características más destacadas del consenso, según explicó el doctor Alfonso Martín, coordinador del Grupo de Arritmias Cardíacas de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), es que es el único documento que se centra en el abordaje de la fibrilación auricular en su fase aguda y que cuenta con el aval de las dos Sociedades Científicas mayormente involucradas en el manejo de las arritmias”.
“Pretendemos que la atención del enfermo siga un tratamiento lineal y que lo que se decida en Urgencias se continúe luego desde el Servicio de Cardiología, con el fin de incrementar la adecuación del tratamiento y de optimizar el uso de los recursos”, señaló el presidente de la Sección de Electrofisiología y Arritmias de la SEC, el doctor Ignacio Fernández Lozano.
La fibrilación auricular es la arritmia cardiaca de mayor prevalencia en la práctica diaria de los servicios de urgencias, siendo responsable del 3,6% de las urgencias generales de nuestro país –cerca de 864.000 si tomamos como base las casi 24 millones de visitas totales que se registraron en 2009- y del 10% de los ingresos en el área médica. Es una enfermedad grave de prevalencia creciente en los servicios de urgencias, pues es donde acuden los pacientes cuando comienzan los síntomas (palpitaciones, dolor torácico, fatiga, mareos y disnea de esfuerzo) o se detecta la arritmia, y es el lugar donde se deben aprovechar estas mayores posibilidades de prevenir las complicaciones de la arritmia y de recuperar el ritmo sinusal.
Por su parte, en los servicios de urgencias la fibrilación auricular afecta preferentemente a pacientes de edad avanzada, con cardiopatía estructural, alto riesgo de tromboembolismo y elevada comorbilidad, datos todos ellos decisivos para diseñar el tratamiento.
Más concretamente, el 57% de los pacientes con fibrilación auricular tienen más de 75 años y los principales factores asociados son la hipertensión arterial (en el 58% de los casos), la existencia de cardiopatía estructural (47%), diabetes mellitus (22%) e hipertiroidismo (1,5%). El 89% de los pacientes que acuden a urgencias presentan factores de riesgo para el desarrollo de tromboembolismo que los califican como sujetos de alto riesgo y, por tanto, candidatos a la prescripción de anticoagulación oral de forma indefinida1. Precisamente, la fibrilación auricular ha sido una de las grandes protagonistas del último Congreso Europeo de Cardiología (ESC 2012), celebrado en Munich a finales del mes de agosto, lo que pone de manifiesto la importancia de un problema creciente de salud pública debido a los siguientes factores: envejecimiento de la población, aumento de la esperanza de vida, elevada prevalencia de cardiopatías crónicas y mayor supervivencia de los pacientes con cardiopatía.
La nueva actualización del documento de consenso, que puede descargarse en la web de SEMES ‘www.semes.org‘