El «continuum educativo» en Medicina, entendido como la suma de grado, formación especializada y desarrollo profesional continuo, que en España, según expertos, no se da, de momento, tiene su oportunidad con la adaptación de los planes de estudio al Espacio Europeo de Enseñanza Superior (EEES)
Madrid, 19 de octubre 2009 (medicosypacientes.com)
«Las distintas etapas formativas de un profesional médico tienen que coordinarse y confluir», tal como expresó la vicepresidenta del Consejo Nacional de Especialidades en Ciencias de la Salud, la doctora Verónica Casado, en un momento de la presentación de la Jornada «Bolonia y la Especialización Médica», organizada recientemente por Diario Médico y la Fundación BBVA, dentro del ya tradicional «Día de las Especialiades» que anualmente celebran ambas organizaciones.
La mayoría de los participantes en dicho acto coincidieron con las palabras de la doctora Casado, es por ello que todos al unísono apuntaron al Plan Bolonia como una oportunidad única para que dicho continuum educativo se planifique adecuadamente con modernidad, con herramientas evaluativas y con formación en competencias. Competencias que como apuntó el doctor Arcadi Gual, secretario de la Sociedad Española de Educación Médica (SEDEM) y subdirector del Sistema Español de Acreditación de la Formación Médica Continuada (SEAFORMEC), «son el hilo conductor, el único que nos permite organizar el continuum educativo, que, hoy por hoy, no se da todavía». Es por ello que como recalcó la doctora Casado, «estamos ante un momento importante para tener incardinadas todas las partes». Para lo cual es imprescindible el liderazgo de las Administraciones más la implicación de los propios profesionales.
El director general de Política Universitaria del Ministerio de Educación, Felipe Pétriz, se mostró de acuerdo en que la palabra clave en la adaptación de los planes de estudios al Espacio Europeo de Enseñanza Superior (EEES) es la de «coordinación». En su opinión, la oportunidad se presenta, asimismo, para una renovación de las metodologías, incorporando nuevos agentes como las tecnologías de la información y comunicación. Ahora bien, como advirtió Pétriz, «esto no se va a resolver de hoy para mañana, es un camino que está bien definido pero que requiere tiempo».
El objetivo radica en formar a unos profesionales competentes y dotarles de instrumentos para un mantenimiento indefinido de formación a lo largo de su ejercicio profesional, según señaló, por su parte, el subdirector general de ordenación profesional Juan Antonio López Blanco, en lo que coincidió con el presidente de la Conferencia de Decanos de Facultades de Medicina, el doctor Joaquín García Estañ.
Así, durante el acto, se pusieron sobre la mesa diversos aspectos que cobran relevancia con la adaptación al Plan Bolonia, tales como troncalidad como una nueva forma de concebir la formación continuada; de desarrollo profesional continuo; y de la importancia de una buena planificación de RR.HH. para lo cual resulta imprescindible la presencia de los registros profesionales.
Reforma del MIR y recertificación del profesional
Alguno de los intervinientes se detuvieron en un tema candente como es el de la reforma del sistema de formación del Médico Residente (MIR). En este sentido, el presidente de la Conferencia de Decanos, el doctor García Estañ, se refirió al papel que van a poder jugar las Facultades de Medicina al respecto, avanzando que se va a intentar evaluar las competencias y habilidades del alumno, «de tal manera, según sus palabras, que se pueda organizar una prueba, a través de la Conferencia de Decanos, basada en una serie de principios tales como la igualdad, mérito, capacidad, que se pueda realizar en cada Facultad y CC.AA. en las mismas fechas, bajo las mismas características, con sello estatal, con criterios uniformes y bien acreditada y aceptada por todos, de tal forma que pueda servir como referente verdaderamente del éxito del Plan Bolonia en las Facultades de Medicina».
La motivación de García Estañ por este proyecto le llevó a insinuar que de alcanzarse el éxito de esta evaluación «podría, incluso, sustituir al propio examen MIR actual, que tiene una función más selectiva que distributiva», tal como señaló.
Quien también lanzó algunas novedades fue el subdirector general de ordenación profesional, Juan Antonio López Blanco, en esta ocasión relativas al ámbito del desarrollo profesional continuo. Así, dentro de la Comisión de Formación Continuada, hay grupos de trabajo sobre algunos puntos importantes a desarrollar como la definición de los Diplomas de Acreditación y de Acreditación Avanzada, destinados a certificar el nivel de formación alcanzado por un profesional en un área funcional específica en función de actividades de Formación Continuada en esa área. Dichos diplomas tendrán validez sobre la carrera profesional y sobre los sistemas de provisión de plazas. Según López Blanco, cabe la posibilidad de que a lo largo de 2010 se vaya a avanzar en la definición de dichos Diplomas. Ello, a su vez, enlazaría con lo que sería un posible modelo de recertificación de los profesionales, según la intención de la Administración sanitaria.
