El presidente del CGCOM, Consejo General de Colegios de Médicos, Dr. Tomás Cobo, moderó la mesa redonda ‘Seguridad del paciente: las especialidades médicas, las competencias clínicas. Los seguros de responsabilidad civil profesional. Impacto jurídico’. En ella, participaron los ponentes la Dra. María Isabel Moya, vicepresidenta 1ª del CGCOM; Dra. María Teresa Vidal, vocal de la Comisión Central de Deontología Médica del CGCOM; y Philippe Paul, CEO de SHAM España
El presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), el Dr. Tomás Cobo, ha participado en el V Congreso de Derecho Sanitario como moderador de la mesa redonda titulada ‘Seguridad del paciente: las especialidades médicas, las competencias clínicas. Los seguros de responsabilidad civil profesional. Impacto jurídico’. En ella, le han acompañado como ponentes la Dra. María Isabel Moya, vicepresidenta 1ª del CGCOM; la Dra. María Teresa Vidal, vocal de la Comisión Central de Deontología Médica del CGCOM; y Philippe Paul, CEO de SHAM España.
El objetivo de esta mesa, en palabras del Dr. Tomás Cobo, ha sido “poder establecer hasta dónde pueden llegar las competencias profesionales del médico, hasta dónde cubre el seguro de responsabilidad profesional la actividad del profesional y hasta qué punto es deontológico que un especialista en un ámbito asistencial aplique habilidades adquiridas que no corresponden directamente a la especialidad que desarrolla habitualmente pero para la que cuenta con los conocimientos necesarios”.
En este sentido, la Dra. María Isabel Moya inició la ronda de intervenciones aclarando que las competencias son “el conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y valores de un profesional titulado para ejercer la Medicina y estar actualizado, con el fin de garantizar la seguridad del paciente y poder evitar los efectos adversos en cualquier proceso asistencial”. De este modo, la vicepresidenta 1ª del CGCOM recordó que “la calidad asistencial comienza con las adecuadas competencias profesionales y con equipos de trabajo que sean competentes en su ámbito”.
La Dra. Moya estableció las barreras que existen en torno a las competencias profesionales aludiendo a la LOPS, la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, la cual “data de 2003, está obsoleta y deja abierta las competencias entre especialidades y profesiones sanitarias, lo cual genera conflictos de delimitación de las competencias y provoca una desvinculación entre formación y competencias”.
Por su parte, la Dra. María Teresa Vidal, destacó que “desde el punto de vista de la Deontología Médica, la relación médico-paciente es la base de la asistencia sanitaria y los profesionales hemos de trabajar siempre en beneficio último del paciente, considerando la autonomía del paciente, escuchando sus necesidades, facilitándole información y entendiendo que la formación médica continuada es una obligación durante toda nuestra trayectoria profesional”.
Así, la Dra. Vidal, insistió en que “la Medicina no es un mercadeo ni puede funcionar a demanda, sino que en bajo nuestras competencias tenemos que ofrecer una Medicina que garantice siempre el mayor beneficio en cuestión de salud” y apostó por “la autoregulación de la profesión y la certificación de la formación de los compañeros”.
Por su parte, el Dr. Cobo recordó que “una de las quiebras de nuestro sistema sanitario es que los profesionales solo contamos con cinco días reconocidos al año para formación, que son claramente insuficientes para poder mantener actualizados nuestros conocimientos”.
En cuanto a la recertificación médica, el presidente del CGCOM, determinó que “tras las experiencias que conocemos de otros países europeos como Reino Unido y Países Bajos, la recertificación es necesaria pero no debe ser obligatoria, ya que de este modo se aleja de su objetivo final y se convierte en un simple proceso burocrático”.
En este sentido, el Dr. Cobo apostó por “potenciar, impulsar, fomentar y promover la formación continuada desde las organizaciones, de modo que los profesionales puedan acceder a ella de la manera más práctica y útil”.
Conclusiones
Entre las conclusiones de la mesa redonda, el Dr. Cobo remarcó “la importancia de un mapa de competencias profesionales que protejan tanto la actividad del médico como la seguridad del paciente; recertificación sí pero no obligatoria; la necesidad de que el consentimiento informado quede siempre reflejado; y que las administraciones cuenten con el Consejo General de Colegios de Médico como asesores gratuitos para la toma de decisiones que afectan al ejercicio de la Medicina en nuestro país y, por tanto, a la calidad de la asistencia y la seguridad de los pacientes”.
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