Según un estudio de la Universidad de Schleswig Holstein en Luebeck (Alemania) que se publica en la edición digital de la revista ‘European Heart Journal’, se podrían evitar entre 50 y 80 ataques cardiacos, ictus y muertes asociadas a la enfermedad cardiaca por cada 1.000 pacientes durante 10 años si los médicos siguieran el ejemplo de los profesionales que mejor siguen los objetivos de reducción de colesterol fijados por las guías médicas
Madrid, 12 de marzo 2010 (medicosypacientes.com)
Sólo la mitad de los pacientes bajo alto riesgo de enfermedad cardiaca reciben una atención correcta para reducir sus niveles de colesterol, según un estudio de la Universidad de Schleswig Holstein en Luebeck (Alemania) que se publica en la edición digital de la revista ‘European Heart Journal’.
El estudio investigó la forma en la que los médicos de atención primaria evalúan los factores de riesgo de sus pacientes y otros problemas de salud cuando deciden los objetivos de reducción del colesterol y aunque la investigación se centra en doctores y pacientes alemanes, los autores creen que refleja una perspectiva similar en el resto de Europa.
Según los investigadores, se podrían evitar entre 50 y 80 ataques cardiacos, ictus y muertes asociadas a la enfermedad cardiaca por cada 1.000 pacientes durante 10 años si los médicos siguieran el ejemplo de los profesionales que mejor siguen los objetivos de reducción de colesterol fijados por las guías médicas.
Los investigadores descubrieron que en una encuesta de 907 doctores, que implicaba a 25.250 pacientes, sólo el 55 por ciento de los hombres y el 49 por ciento de las mujeres recibían objetivos correctos de reducción del colesterol malo LDL.
Los pacientes eran más propensos a que se les fijaran los niveles correctos de colesterol si tenían antecedentes de ataque cardiaco, enfermedad de arteria coronaria, cirugía de bypass y diabetes. Sin embargo, los médicos eran más propensos a subestimar el riesgo de las mujeres y asignarles niveles incorrectos de reducción del colesterol.
Así, a pesar de idénticos antecedentes de ataque cardiaco reciente, cerca del 68 por ciento de los hombres y sólo un 60 por ciento de las mujeres recibían el tratamiento adecuado para reducir el LDL hasta los niveles indicados por las guías médicas.
Según señala Heribert Schunkert, director del estudio, si más doctores siguieran las guías médicas existentes para fijar los niveles adecuados de reducción del colesterol podrían prevenir un mayor número de incidentes relacionados con la enfermedad cardiaca como ataques cardiacos, ictus y muertes.
En relación a las razones que explicarían estos resultados el investigador apunta que las mujeres suelen ser pasadas por alto por sus médicos en lo que se refiere al riesgo cardiovascular.
«Además, no todos los médicos creen en el concepto de reducción del riesgo por modificación del LDL, aunque la evidencia es abrumadora. Sus razones pueden ser multifactoriales: algunas podrían ser la confusión ante las guías médicas diferentes y cambiantes y algunos podría carecer de tiempo para sus pacientes en la atención primaria. Los médicos necesitan más ayuda para determinar el riesgo de sus pacientes, por ejemplo con enfermeras o programas informáticos», añade en términos más generales Schunkert.