El doctor Kepa Urigoitia preside, además del Colegio de Médicos de Álava, el Consejo de Médicos del País Vasco, que aglutina a los profesionales de los tres territorios históricos. En esta entrevista, concedida a «El Correo» reclama una Sanidad «que no está al albur de las decisiones políticas y advierte sobre los efectos de los recortes aplicados por Osakidetza
Álava, 5 de noviembre 2013 (medicosypacientes.com)
Es la cabeza visible de los facultativos vascos porque, además de secretario general del Sindicato Médico de Euskadi, preside el Consejo de Médicos del País Vasco, que aglutina a los profesionales de los tres territorios históricos. En esta entrevsta cocedida al periódico «El Correo» reclama una Sanidad «que no está al albur de las decisiones políticas y advierte sobre los efectos de los recortes aplicados por Osakidetza.
-El Consejo de Médicos del País Vasco acaba de aprobar sus estatutos. En cuanto reciban el visto bueno del Gobierno vasco tendrá plena capacidad de obrar. ¿Para qué sirve un Consejo de Médicos?
-Sus funciones específicas son representar a la profesión en la comunidad autónoma, ordenar el ejercicio de la Medicina en el ámbito de sus competencias, recoger las normas deontológicas, velar por que no haya intrusismo,…También tiene funciones disciplinarias, además de colaborar con las instituciones para elaborar normativas sanitarias.
-El Consejo se constituyó en septiembre de 2005. Han necesitado ocho años para aprobar sus estatutos ¿Por qué tanto tiempo?
-Por diferencias entre los colegios a la hora de diseñar los órganos de gobierno. Somos tres colegios y el consenso ha sido difícil. La presidencia y la sede será rotatoria. Cambiará cada dos años. Administrativamente, a efectos de dirección postal, está en Bizkaia.
-¿Qué preocupa a los médicos como colectivo profesional?
-Hay una gran preocupación porque toda nuestra actuación se puede ver condicionada por la Ley de Colegios Profesionales, en fase de anteproyecto, del Gobierno central, que pretende someter a los colegios médicos a una excesiva tutela por parte de la Administración, además de atribuirse potestades que ahora son de las juntas directivas de los colegios. Llega a otorgarse la potestad de disolver las juntas de gobierno de los colegios, una facultad que, como mucho, sería de los jueces.
-Preside el Colegio de Álava desde hace ocho años y es el secretario general del Sindicato Médico de Euskadi. Los gestores de la Sanidad Vasca niega que haya recortes en Osakidetza ¿Qué opina?
-¡Claro que hay recortes en Osakidetza! Como trabajadores los estamos sufriendo, pese a no ser los responsables de la crisis. Desde nuestro punto de vista, como profesionales de la Medicina, los recortes en personal repercuten en la calidad asistencial. Si no hay sustituicones, se juega al más por menos. Decir que se puede hacer más con menos es pura demagogia. Hacer más por menos repercute en la calidad. Hace ya años, cuando el consejero era Gabriel Inclán, él mismo dijo que la eficiencia del sistema sanitario vasco no daba más de sí porque ya estaba a tope. A los médicos esto nos preocupa. Y mucho. Los recortes repercuten directamente en el tiempo que se dedica a los pacientes. Cuando hay menos tiempo, la relación entre médicos y pacientes se resiente. No hacer sustituciones supone incrementar la productividad a costa de dedicar menos tiempo al paciente.
-¿Tiene alguna solución para dar un vuelco a la situación?
-Profesionalizar, despolitizar los cargos directivos de la Sanidad. Se necesitan unos cargos que tengan muy presente que dirigir la Sanidad no es dirigir una empresa de fabricación de tornillos. La Sanidad necesita un gran pacto político para profesionalizar a sus dirigentes, de forma que no estén al albur de las consignas políticas.
-Está planteado una utopía
-Para nada. Es bastante sencillo. En otros países, como Inglaterra, los cargos políticos no llegan hasta los niveles de gestión que llegan aquí.
-En Euskadi existe un Código del Buen Gobierno de la Sanidad. Se aprobó al final de la pasada legislatura
-Si. Y nada más aprobarse nombraron a dedo a un montón de gente.
-¿Por qué tuvo tan mala relación con el anterior consejero, Rafael Bengoa? Está considerado un profesional de prestigio.
-Yo no tenía nada personal en su contra. Él sentía hacia mi una especie de animadversión a raíz de una rueda de prensa con otras fuerzas sindicales. Me atribuyó unas declaraciones que yo nunca había hecho.
-¿Se lleva mejor con los nuevos dirigentes?
-Agradecemos al nuevo consejero de Salud, Jon Darpón, que nada más llegar al cargo nos convocase a una reunión de toma de contacto. Luego tuvimos otra antes del verano. Las declaraciones que hace respecto a que quiere contar con los profesionales están muy bien, pero hay que demostrarlo.
-¿Y no están contando?
-Es difícil que sea así cuando lo que hay son recortes en las condiciones económicas y en las laborales.
-¿Esos recortes se notan más en la asistencia Primaria o en la Especializada?
-En la Primaria no se hacen sustituciones; en la Especializada solo se cubren largos períodos.
-Todos los gestores sanitarios aseguran que consiguen mantener, cuando no mejorar, las listas de espera ¿Lo ven así los profesionales o piensan que las manipulan?
-Todos sabemos cómo se hacen las listas de espera.
-¿Cómo?
-Al gusto del que gobierna. Ese tipo de datos deberían estar controlados por un grupo ajeno a las personas del Gobierno.
«Si Euskadi pagara las pensiones, ya veríamos si nos obligaban a jubilarnos a los 65 años»
-El acuerdo regulador de las condiciones de trabajo en Osakidetza, el convenio, tenía vigencia hasta 2009 ¿Alcanzarán uno nuevo en esta legislatura?
-Lo veo muy difícil. Cuando se impone una congelación de horas, ¿qué se puede negociar?
-Osakidetza quiere forzar la jubilación forzosa de los médicos a los 65 años ¿Por qué se oponen muchos facultativos?
-Lo que no se entiende es que se nos quiera obligar a jubilarnos a los 65, cuando desde Europa se está hablando de subir la edad de jubilación. Es curioso que una comunidad deficitaria en el sistema de pensiones, es decir, que no cubre con las cotizaciones lo que cobran sus pensiones, quiera jubilar antes que nadie. Si Euskadi pagara las pensiones, veríamos si nos obligaban a jubilarnos cuando llega la edad.
-Alcanzaron un principio de acuerdo para jubilarse a los 67 años ¿Es firme ese pacto?
-No. Al principio, nos hablaron de 67 años y ahora nos vuelven a hablar de 65. Es una falta de respeto al colectivo decir que hay que dar paso a jóvenes más preparados. Osakidetza no los ha preparado, los han preparado los profesionales de los que ahora se quieren desprender.
-En la bolsa de Osakidetza hay cerca de 3.000 médicos llamando a la puerta.
-Lo que habría que saber es cuántos había antes de los recortes, antes de que se dejaran de hacer sustituciones. En cualquier caso, lo que se ha dado es una total falta de planificación de las necesidades.
