El presidente del Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León, el doctor José Luis Díaz Villarig, ofrece en esta entrevista concedida a «MedicosyPacientes» su punto de vista sobre la situación que afecta a la profesión médica en general y de su comunidad autónoma en particular. Recortes, merma de la calidad en la asistencia, con incremento de listas de espera, cambios en el modelo retributivo de los profesionales, jubilaciones forzosas,… son algunos signos de la realidad actual, ante la cual, la preocupación va en aumento dado que, como considera el presidente de los médicos castellanoyleoneses, «seguimos con un desconocimiento absoluto de lo que pasa en España con el sistema sanitario»
León, 11 de octubre 2012 (medicosypacientes.com)
-Se teme por la tentación de las Administraciones públicas a ensañarse con el médico a base de recortes indiscriminados en las retribuciones, en plazas asistenciales,… lo cual puede repercutir considerablemente en la calidad asistencial y en la propia seguridad del paciente. ¿Qué respuesta han de dar los médicos ante esta situación?
-Los recortes están repercutiendo negativamente tanto en la calidad de la asistencia como en las condiciones laborales para ejercer la Medicina. Todo lo que está pasando en el sistema sanitario público tiene como consecuencia un aumento de las listas de espera y a medida que éstas van creciendo también se pone en peligro la seguridad de los ciudadanos, y el sistema se va a masificar más de lo que ya está. Si los médicos no paramos la situación de recortes a nuestro colectivo y logramos mantener las condiciones laborales y económicas que, a lo largo de tantos años hemos conseguido en nuestra profesión, la situación, realmente, va a deteriorarse mucho más y el sistema se va a poner verdaderamente en riesgo en un futuro más o menos próximo.
-En el terreno profesional se está barajando la posibilidad de un cambio de modelo retributivo ¿qué opina?, ¿se tiene en cuenta a los profesionales para debatir sobre este cambio?
-Siempre he defendido que una parte de nuestros emolumentos se deben pagar en función de nuestro compromiso, de la actitud, de la actividad y de los resultados, pero en ningún caso, como podría estar planteándose la Administración, restar una parte de los sueldos fijos que tenemos en estos momentos, para convertirla en variable. Nuestros sueldos son los que son y, de ninguna manera, se nos puede quitar lo que tenemos fijo.
En nuestra comunidad, en particular, recientemente nos han quitado la productividad variable que, en definitiva, es un pago por objetivos. Por tanto, si ya están quitando eso, la idea que pueden tener de hacer un nuevo sistema retributivo en función de resultados, en función del compromiso con la Administración, podría ser restándolo del fijo que tenemos ahora y contemplarlo como una parte variable, y no estamos dispuestos.
Otro aspecto muy importante es que nos deberían pedir ayuda y colaboración a las organizaciones profesionales, pero, lamentablemente, no contactan con nosotros ni para esto ni para casi nada, pese a ser una obligación. Si lo hicieran probablemente las cosas irían bastante mejor no sólo al gestor sino también a todos los ciudadanos.
-Las jubilaciones forzosas no conllevan beneficios ni asistenciales ni de plantillas y, en cambio, se perderá una experiencia importante y rr.hh. imprescindibles,… ¿Cómo está la situación en este sentido en su Comunidad Autónoma?
-En Castilla y León, al igual que en otras CC.AA., se está haciendo una reordenación de RR.HH. para poder jubilar obligatoriamente a todos los médicos que tienen entre 65 y 70 años. La justificación que dan es que tienen que rejuvenecer las plantillas, y que el compromiso que tienen los médicos cuando se hacen más mayores, a su juicio, es menor que el que pueden tener los médicos más jóvenes. Los mayores son propietarios de la plaza mientras entre los jóvenes los contratos que abundan son los eventuales, con lo cual pudiera ser más fácil “poderles obligar”.
Sin embargo, con este tipo de medidas no van a rejuvenecer las plantillas, ya que si hay 500 médicos para jubilar y jubilan al 80 por ciento, en su lugar van a echar mano de los médicos eventuales, pero en el puesto de los eventuales no va a entrar nadie, lo que significa, claramente, una reducción de plantilla que nosotros calculamos por encima de 400 médicos.
Todo eso va a redundar en un deterioro de la calidad asistencial. Además hay otro tema, como es que la reducción de plantillas se debe a un asunto puramente económico, poniendo en peligro la calidad de la asistencia o la situación que tiene en este momento la Sanidad de nuestra comunidad. Por otra parte, se deja perder un capital humano muy importante por pura economía y sin beneficio de ningún tipo, que tiene mucho que aportar a edades todavía jóvenes para los profesionales con grandes conocimientos y experiencia, como lo demuestran los expertos con fama mundial que tienen más de 65 años.
-Otra de las preocupaciones es el futuro incierto de las próximas generaciones de médicos. Se reducen las plazas MIR y se incrementan las plazas universitarias. ¿Qué consecuencias se pueden desprender de ello a medio-largo plazo?
-Todo esto forma parte de la mala planificación existente en RR.HH. por parte de la Administración. Ello ha provocado, además, pasar de una época en la que se tenían 30.000 médicos en paro, a otra en la que parecía que teníamos que traer médicos de cualquier parte del mundo, hasta llegar a la actual en la que se teme va a ir al paro un porcentaje elevado de los médicos tras salir del sistema MIR.
Seguimos con un desconocimiento absoluto de lo que pasa en España con el sistema sanitario, y siguen planteándose un incremento de estudiantes de Medicina. En Castilla y León, no hace muchos años se decidió incrementar por parte del Gobierno autónomo el número de estudiantes de Medicina en 200 cada año en las Facultades de Medicina de Valladolid y de Salamanca.
Ahora, a los más preparados de la juventud española lo estamos metiendo en una profesión en la que la mayoría va a ir al paro o van a trabajar en condiciones muy precarias o van a tener que emigrar, con el alto coste para el sistema que ello conlleva. Lo más lamentable es que a los profesionales ni nos han convocado ni preguntado sobre lo que opinamos sobre este tema.
-A raíz de cómo se está desarrollando el R.D 16/2012, existe preocupación por una transformación del sistema sanitario universal, equitativo y de calidad, a otro de aseguramiento privado,…
-Como Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León apostamos por el sistema sanitario público por muchas razones: es universal, equitativo, y porque es bueno pese a todas las ineficiencias que pueda tener, que, por otra parte, se deberían subsanar, y que para eso están los gestores y la colaboración de nuestro colectivo.
Tenemos sospechas muy fundadas de que el sistema se quiere cambiar hacia una semiprivatización de la Sanidad pública, lo cual podría tener consecuencias nefastas para todos los ciudadanos españoles. Desde luego, desde este Consejo nos manifestamos en contra de ese tipo de medidas, aunque nos tememos que éstas se tomarán no tardando mucho. No en vano, la tentación la lleva teniendo el PP desde hace años.
Nos manifestamos en contra de que se privatice el sistema sanitario, entre otras cuestiones porque llevaría al paro a un 40-50 por ciento de la profesión, y entraríamos en un sistema en el que primaría la ley de la oferta-demanda, que conduciría a un deterioro de las condiciones laborales y económicas del colectivo médico. Creemos que no sería positivo ni para profesionales ni para ciudadanos.
El sistema privado-concertado puede tener ciertos beneficios y ciertos segmentos en el tratamiento médico, pero dudo que pudiera actuar en la mayoría de cosas importantes de la salud del ciudadano. Pese a que, por otra parte, el sistema privado-concertado puede colaborar con el público.
En definitiva, creemos que la Sanidad pública puede mejorar muchísimo, a pesar de estar muy satisfechos y contentos de cómo hemos mejorado en los últimos años.