Se considera imprescindible mejorar la información sobre hábitos saludables de la población -en general- y de la infancia -en particular- para desterrar los falsos mitos y creencias que en materia de salud aún existen. La Organización Médica Colegial ha editado más de 30 guías cuyas ediciones digitales pueden consultarse en su página web
Madrid, 31 diciembre 2008 (medicosypacientes.com)
La Organización Médica Colegial (OMC) ha insistido en numerosas ocasiones en la necesidad de regular la publicidad engañosa en hábitos y consumos alimentarios, ya que aspectos como la tensión arterial, colesterol, índice de masa corporal, dieta inadecuada, inactividad física, consumo excesivo de alcohol, etc., están relacionados con la forma de comer y con el ejercicio físico. Se considera imprescindible mejorar la información sobre hábitos saludables de la población -en general- y de la infancia -en particular- para desterrar los falsos mitos y creencias que en materia de salud aún existen.
Así, por ejemplo, se ha exigido la eliminación de la denominación ?Light? tanto en las campañas de publicidad como en los productos, así como el control, regulación y prohibición de los anuncios engañosos o que fomenten el consumo, con especial vigilancia para aquellos que se visionan o escuchan en horario infantil.
En este contexto, y ante cualquier caso de publicidad o información engañosa sobre alimentación o cualquier otro aspecto relacionado con la salud, el médico debe ser considerado como informador y educador sanitario.
Para ayudarles en esta labor, desde la OMC se han editado más de 30 guías sobre las patologías más prevalentes en la población general, en las que se ofrece un abordaje claro y sencillo sobre aspectos como el tabaquismo, el abuso del alcohol, la depresión y ansiedad, la anticoncepción, vacunación infantil, etc.
Estas guías, cuyas ediciones digitales pueden consultarse en Organización Médica Colegial (OMC) son una eficaz herramienta para que los médicos orienten a sus pacientes en estos temas con una información clara, sencilla, precisa y basada en evidencias científicas y criterios profesionales. A la hora de conceder fiabilidad a una información, lo primero es la propia fiabilidad de la fuente, y en este sentido los médicos son el primer interlocutor válido en todo lo relacionado con la salud.