En España, más del 61% de la población utiliza la receta electrónica y casi 20 millones de ciudadanos están ya incluidos en la base de datos de la historia clínica digital. En esta materia, la ministra ve prioritario el diseño de plataformas digitales que favorezcan el mercado único en el ámbito de la salud
Madrid, 6 de septiembre 2013 (medicosypacientes.com)
En España, más del 61% de la población utiliza la receta electrónica y casi 20 millones de ciudadanos están ya incluidos en la base de datos de la historia clínica digital, según datos ofrecidos por la ministra de Sanidad, Ana Mato, durante su intervención en la Conferencia «Hacia un mercado único digital: salud y consumidores», celebrada ayer en Madrid, en la sede de la Comisión Europea, y en la que también intervino el comisario europeo de Salud y Consumo, Tonio Borg.
Mato calificó de prioritario el diseño de plataformas digitales que favorezcan el mercado único en el ámbito de la salud, lo que se conoce como e-health. Por ello, en el último año y medio se han hecho importantes avances en la implantación de la historia clínica digital y la receta electrónica y ahora, la intención es «hacer realidad lo antes posible la historia clínica digital europea».
Tanto la historia clínica como la receta electrónica, según la ministra «mejorarán la interconexión de los datos sanitarios de los pacientes» y son posibles hoy gracias a la creación de la base de datos de la Tarjeta Sanitaria Única Interoperable. Precisamente, este proyecto de tarjeta única, «que impulsamos nada más llegar al Gobierno», según la ministra, ha permitido la identificación única dentro de todo el territorio español. De este modo, «facilitará que los datos más relevantes del historial médico del paciente estén disponibles en todo momento y en cualquier lugar donde pueda recibir asistencia sanitaria, mejorando así la calidad del servicio».
Por su parte, el comisario europeo de Salud ha reconocido estar «impresionado» con los avances de España en la incorporación de las nuevas tecnologías. «Es de los países que se toma más en serio la sanidad digital, aunque todavía queda por hacer», ha asegurado.
En su intervención, Borg destacó la importancia de las nuevas tecnologías para lograr que los sistemas sanitarios sigan siendo sostenibles, y ha defendido que para ello también son necesarias reformas que, en todo caso, «no pueden hacerse se forma arbitraria».
