Mª Luisa Sánchez, viuda del médico Francisco Morán Moliz, médico Intensivista del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, es beneficiaria de la Fundación para la Protección de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) desde 2016, año en el que falleció su marido
Desde ese año tanto ella como sus hijas Encarnación y Mª Luisa percibieron las ayudas de la FPSOMC. Encarnación gracias recibir la prestación de la Fundación actualmente es Residente de primer año en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y a su hermana, Mª Luisa, le ayudaron para la realización de un Master de Administración de Empresas, gracias al cual está, hoy también, trabajando.
¿De qué manera ha influido la ayuda de la FPSOMC en los estudios de sus hijas y en su vida en un momento tan delicado?
En aquellos momentos tan delicados, me supuso una gran tranquilidad de ánimo ya que sabía que, con la ayuda, de todos, podrían seguir mis hijas con los estudios.
¿Considera que la FPSOMC ha sido un apoyo fundamental en esos momentos difíciles para su familia?
Si, la FPSOMC fue un apoyo económico, además del cariño recibido por parte de todas las personas que nos conocían, e incluso, las que no nos conocían.
¿Cómo describiría la labor de la FPSOMC en apoyo a los médicos y sus familias?
La labor de la FPSOMC es de amparo y ayuda cuando más se necesita. Es como una SEGUNDA FAMILIA que está detrás de todo.
El corporativismo es muy importante en todas las profesiones y en la profesión médica se demuestra todos los días.
¿Qué significa para usted que su marido perteneciera a una profesión solidaria que destina de forma voluntaria recursos para ayudar a sus compañeros en momentos difíciles?
Mi marido fue una persona muy solidaria con todas la personas, e incluso fuera de su profesión. Siempre me he sentido muy orgullosa de que perteneciera al Colegio de Médicos y pudiera ayudar a los demás cuando lo necesitaran. Fue un gran ejemplo para mis hijos, especialmente para la que ha estudiado medicina que se colegió nada más terminar la carrera y, así, poder seguir ayudando para que la CADENA NO SE ROMPA.
¿Cómo animaría a aquellos que han recibido ayuda como usted a considerar la posibilidad de contribuir como socios protectores o donantes en el futuro de la Fundación?
Animo a que cada uno dé su testimonio personal ya que la muerte llega cuando menos lo esperas, como le ocurrió a mi marido. ¡todos nos necesitamos!. mi marido contribuyó mientras ejerció la medicina. ahora, nos ha tocado a mi familia recibir la ayuda. es por eso que mi hija está contribuyendo, ya, para las familias que lo necesiten. como he dicho anteriormente, la cadena de solidaridad no se puede romper.
