La Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales cifra en casi 3.000 millones de euros el recorte llevado a cabo por el Gobierno de Mariano Rajoy en el Sistema de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia entre 2012 y 2015. Según la entidad, el Ejecutivo, ahora en funciones, reconoce haber recortado, entre 2012 y 2014, el dinero para la Dependencia en 2.300 millones de euros, a lo que hay que sumar, a juicio de dichos gerentes, lo mermado en 2015, de lo que se obtiene una cantidad cercana a los 3.000 millones de euros
La realidad es que el gasto público en Dependencia se ha estancado desde la adopción de las medidas pero ha bajado la proporción del esfuerzo estatal frente al autonómico, según se destaca desde dicha Asociación.
Considerando el gasto público, el esfuerzo del Gobierno de España pasó del 29,1% en 2011 al 22,6% (cuando debía ser del 50%). El resto del gasto púbico es soportado por la exhaustas arcas autonómicas y produce parte de su déficit y por el incremento del copago de los ciudadanos, tal como indican en un comunicado.
“La brutalidad del recorte”, según la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales es ya, en todo caso, una evidencia imposible de esconder. Pero lo más sorprendente, doloroso y hasta vergonzoso es la pretensión de que tales medidas tuvieron efectos beneficiosos para las personas.
La lista de espera descendió hasta la incorporación de los dependientes moderados en julio de 2015. No obstante el número de atendidos permaneción casi constante. En el periodo 2012-2015 estimamos que fallecieron sin llegar a ser atendidas más de 130.000 personas.
Finalmente, recuerdan que el Gobierno insiste en la actualidad en no computar en la lista de espera a los dependientes moderados cuyo derecho a atención entró en vigor en julio de 2015. Actualmente (datos oficiales de marzo de 2016) hay 1.202.427 dependientes reconocidos en España de los cuales 400.158 están sin atención.