Un estudio de la National Aeronautics and Space Administration (NASA), el Hospital Universitario de Álava (HUA) y el Hospital Clínic de Barcelona ha demostrado que la variación lumínica afecta a la edad de inicio del trastorno bipolar
Madrid, 4 de enero 2013 (medicosypacientes.com/E.P.)
Un estudio de la National Aeronautics and Space Administration (NASA), el Hospital Universitario de Álava (HUA) y el Hospital Clínic de Barcelona ha demostrado que la variación lumínica afecta a la edad de inicio del trastorno bipolar.
Los resultados han sido publicados en la revista “Bipolar Disorders”. Entre los autores del estudio se encuentran la jefa de Psiquiatría Clínica del HUA, la doctora Ana González Pinto, y el doctor Eduard Vieta, del Clínic de Barcelona.
Ambos, miembros del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM), han explicado en un comunicado que los cambios de exposición lumínica producen variaciones en los seres vivos, como la floración o los cambios en la conducta sexual.
En este sentido, han señalado que las investigaciones llevadas a cabo demuestran que estos cambios podrían estar relacionados con el desencadenamiento, en personas genéticamente vulnerables, de trastornos afectivos como el trastorno bipolar.
La NASA aportó al estudio datos obtenidos a través de sus satélites, relacionados con aspectos físicos como la exposición lumínica de una cierta zona de la Tierra. Al cruzar estos datos con los de un total de 2.414 pacientes bipolares de distintas zonas geográficas del planeta se observó una relación entre el intervalo de máxima variación lumínica (primavera) y la edad de inicio del trastorno bipolar.
De esta manera, se concluyó que cuanto más grande era la variación mensual en la exposición a la luz solar en la localidad más jóvenes eran los pacientes en el momento de inicio del trastorno.
La doctora González Pinto ha afirmado que los pacientes con trastornos mentales graves “son conscientes de que la luz tiene alguna influencia en su ánimo”. “Lo que nadie sabía es que es la variación lumínica es lo que más influye en el inicio de algunas enfermedades mentales, como el trastorno bipolar”, ha destacado.
El estudio se ha realizado gracias a la colaboración de muchos científicos repartidos por todo el mundo. De esta forma, se ha podido comprobar que California, Chile y “curiosamente” también Noruega tienen los máximos cambios de luminosidad mensuales, “sobre todo en la primavera”.
En este sentido, la doctora ha apuntado que, “probablemente, los cambios lumínicos más suaves son menos negativos para el organismo”. “En definitiva, lo que está claro es que el ambiente familiar y social juegan un papel crucial en el desencadenamiento de las enfermedades mentales, pero el medio ambiente también tiene importancia”, ha concluido.