La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado que todas las personas a las que se diagnostique con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) comiencen a ser tratadas “lo antes posible” con antirretrovirales tras constatarse su efectividad a la hora de prolongar la vida de los enfermos
Madrid, 1 de octubre de 2015 (medicosypacientes.com/EP)
La recomendación supone un cambio en la política mantenida hasta la fecha por la OMS, ya que suprime las limitaciones respecto a los pacientes a los que se deberían tratar con este tipo de medicamentos, considerando ahora que cualquier persona diagnosticada, independientemente de su edad o grupo de población, pueda recibirlos.
El organismo internacional sustenta esta recomendación en “hallazgos recientes de estudios clínicos que confirman que el uso temprano de antirretrovirales mantiene a las personas con VIH vivas, más sanas y reduce el riesgo de transmisión a sus parejas”.
En un comunicado, la OMS también recomienda que las personas que se encuentren en un riesgo “sustancial” de tener VIH reciban tratamiento antirretroviral preventivo, la llamada profilaxis pre-exposición (PrEP), que desde 2014 se recomendaba para los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres.
“La PrEP debería ser vista como una opción preventiva adicional en base a un paquete integral de servicios, incluidas las pruebas de VIH, el asesoramiento y el apoyo y acceso a condones y jeringuillas seguras”, defiende la OMS.
37 millones de persona con VIH
En base a estas nuevas recomendaciones, que se incluirán en la actualización de las “Directrices consolidadas de la OMS sobre el uso de antirretrovirales para la prevención y el tratamiento de la infección por VIH” que se publicará antes de finales de año, el número de personas que podrían recibir antirretrovirales pasaría de los 28 millones actuales a los 37 millones de personas que actualmente viven con VIH en el mundo.
La expansión del acceso a este tratamiento forma parte de los nuevos objetivos fijados para 2020 con el fin de acabar con el sida para 2030. Entre ellos figuran el que el 90 por ciento de las personas que viven con VIH sean conscientes de ello, que el 90 por ciento de ellas reciban antirretrovirales y que el 90 por ciento de personas que reciban este tratamiento no tengan virus detectable en su sangre.
Según las estimaciones de ONUSIDA, extender los antirretrovirales a todas las personas que viven con VIH y extender las opciones de prevención podría ayudar a evitar 21 millones de muertes relacionadas con el sida y 28 millones de nuevos contagios para 2030.