El fallo cardíaco es una enfermedad crónica y progresiva que afecta a millones de personas y genera una importante morbilidad, mortalidad y un alto gasto en el sistema sanitario
Madrid, 28 de julio 2010 (medicosypacientes.com/Europa Press)
El fallo cardíaco es una enfermedad crónica y progresiva que afecta a millones de personas y genera una importante morbilidad, mortalidad y un alto gasto en el sistema sanitario. Aunque diversas investigaciones científicas y guías nacionales han demostrado la efectividad de determinadas terapias, estos tratamientos todavía están infrautilizados.
La atención al fallo cardíaco puede mejorar a través de la práctica de intervenciones cardiológicas ambulatorias, según un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de California, en Los Ángeles (UCLA). El trabajo, publicado en la edición ‘on line’ de ‘Circulation’, probó una nueva intervención para mejorar la adherencia a las terapias recomendadas por las guías nacionales para pacientes ambulatorios con este mal.
Aunque diversos programas han ayudado a mejorar el cuidado de estos pacientes en el hospital, el estudio realizado por UCLA es la mayor intervención para mejorar el uso de las recomendaciones recogidas por las guías nacionales en pacientes de tratamiento ambulatorio.
El nuevo programa incluye intervenciones clave, como las herramientas de ayuda para las decisiones clínicas, las estrategias de mejora estructuradas y auditorías de las historias clínicas con un ‘feedback’ que ayude a los médicos a aplicar mejor las terapias para el fallo cardíaco que aumentan la supervivencia de los pacientes y otros resultados clínicos.
Según el principal autor del estudio, Gregg Fonarow, profesor de Medicina Cardiovascular y Ciencia y director del Centro de Cardiomiopatía Ahmanson, de UCLA, «han encontrado mejoras sustanciales y clínicamente relevantes en el número de pacientes con fallo cardíaco que recibían tratamientos tras introducir estas nuevas iniciativas para mejorar los programas de intervención en las prácticas cardiológicas».
El Programa IMPROVE HF utiliza un ‘kit’ de herramientas para ayudar a los médicos a tomar decisiones sobre el cuidado de sus pacientes, que incluye la educación, sistemas de recuerdo, datos prácticos específicos, informes de calidad sobre los cuidados y guías basadas en los algoritmos de las mejores prácticas, entre otras iniciativas.
Diversas revisiones realizadas antes de poner en marcha el programa y durante varios momentos diferentes durante los dos años posteriores a su primera aplicación revelaron una mejora significativa en el uso de cinco de estas siete recomendaciones recogidas en las guías de tratamiento y basadas en la evidencia científica.