Estudios realizados por científicos del Centro Médico de la Universidad de Amsterdam, en Holanda, constatan que la actividad física influye en el rendimiento escolar de los niños, siendo éste mayor cuanto más ejercicio practican, tal como informa la revista ‘Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine’. según sus autores, esta asociación podría deberse a que el ejercicio parece producir un incremento en el flujo de sangre y oxígeno al cerebro
Estudios realizados por científicos del Centro Médico de la Universidad de Amsterdam, en Holanda, constatan que la actividad física influye en el rendimiento escolar de los niños, siendo éste mayor cuanto más ejercicio practican, tal como informa la revista ‘Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine’. según sus autores, esta asociación podría deberse a que el ejercicio parece producir un incremento en el flujo de sangre y oxígeno al cerebro
Madrid, 4 de enero 2012 (medicosypacientes.com/E.P.)
Estudios realizados por científicos del Centro Médico de la Universidad de Amsterdam, en Holanda, constatan que la actividad física influye en el rendimiento escolar de los niños, siendo éste mayor cuanto más ejercicio practican, según informa la revista ‘Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine’. según sus autores, esta asociación podría deberse a que el ejercicio parece producir un incremento en el flujo de sangre y oxígeno al cerebro.
«Los niños que aprenden a participar en actividades deportivas también aprenden a obedecer reglas. Esto podría significar que están más disciplinados y capaces de concentrarse mejor durante el estudio», explica una de las expertas, la doctora Amika Singh.
Para esta esta investigadora, las conclusiones de dichos estudios ponen de manifiesto la necesidad de que los niños estén físicamente activos «al menos durante al menos una hora cada día», al tiempo que se debe seguir estudiando esta asociación para ver si se puede concretar qué actividades son más recomendables y cuánto hay que practicarlas.
El objetivo inicial de la doctora Amika Singh y su equipo era analizar la relación entre la actividad física y el rendimiento académico ante el temor de que la presión por obtener mejores calificaciones pudiera llevar a muchos niños a pasar más tiempo estudiando descuidando su actividad física. Para ello, recopilaron los datos de un total de 12 de estudios realizados en Estados Unidos, uno en Canadá y otro en Sudáfrica, con niños de entre 6 y 18 años y con un periodo de seguimiento que osciló entre ocho semanas y más de cinco años.
Basados en la evidencia de esos los estudios, los científicos encontraron una «relación positiva significativa» entre la actividad física y el rendimiento académico. Asimismo, observaron que la actividad física también reduce el estrés y mejora el estado de ánimo, lo que hace que los niños tengan más probabilidad de comportarse mejor en el aula.