La Sanidad pública francesa inició el pasado mes de abril un estudio nacional en 16 hospitales con la finalidad de comprobar si el incentivo económico puede ayudar a abandonar el hábito tabáquico a mujeres embarazadas. Se trata de recompensarlas hasta con 300 euros a cambio de recibir, durante el embarazo, ayuda para la deshabituación tabáquica y someterse a exámenes médicos periódicos que demuestren haber superado el hábito
Se trata de un estudio nacional realizado por la Asistencia Pública-Hospitales de París, con el apoyo financiero del Instituto Nacional del Cáncer (INCA). El programa es una experiencia piloto que durará 36 meses con el que se quiere comprobar si el incentivo económico logra convencer a las fumadoras para que dejen el tabaco durante la gestación.
Las participantes, en torno a 400, son voluntarias embarazadas de menos de 18 semanas y que consuman más de cinco cigarrillos diarios, o tres si son de liar. Aquellas que se apunten al seguimiento, irán recibiendo vales de 20 euros por cada visita física, hasta poder llegar a obtener 300 euros en total al final de su embarazo. El compromiso que adquieren es el de invertir el dinero en productos para el bebé y someterse a exámenes médicos para comprobar que han dejado de fumar. Los requisitos incluyen, además, no utilizar cigarrillos electrónicos y mostrar voluntad por dejar el hábito tabáquico.
Los antecedentes de este estudio se encuentran en Reino Unido, donde de 612 embarazadas fumadoras más del 20% lograron superar la adición.
CNPT: “España debería abrir una reflexión”
Sobre esta iniciativa se ha pronunciado el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) que considera positivo que se lleven a cabo medidas como la promovida en Francia aunque considera más difíciles de implantar en España, al tiempo que opina que la medida debería llevar a España a abrir una reflexión sobre el tratamiento actual que da en este aspecto a las gestantes. En este sentido, considera necesario el manejo de protocolos específicos dentro de la sanidad pública para sistematizar la ayuda médica que se da a las embarazadas para abandonar el tabaco.
Como recordó el portavoz del CNPT, Dr. Francisco Camarelles, “cuando una embarazada fuma asume el riesgo de tener un parto prematuro y de que el bebé nazca con bajo peso, además de poner en riesgo su propia salud”, por lo que, como señaló, “todas las iniciativas que se adopten para mejorar esta situación son positivas y bienvenidas”.