?Esta institución es el primer referente de los médicos ante la Administración, la profesión y la sociedad en su conjunto?
El doctor Isacio Siguero Zurdo, natural de Segovia, licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla en 1965 y especialista en Oftalmología por dicha Universidad, ha compaginado el ejercicio de su profesión con la más alta representación de la Profesión Médica en las principales instituciones; primero como presidente del Colegio de Médicos de Sevilla, posteriormente, como presidente del Consejo Andaluz de Médicos, y finalmente asumiendo la presidencia del Consejo General de Colegios de Médicos en el año 2005. Casado y padre de cuatro hijos varones, asegura que su principal soporte es la familia y muestra un especial interés por la historia de España
Madrid, 16 de abril 2009 (medicosypacientes.com)
El doctor Isacio Siguero fue elegido presidente del Consejo General de Colegios de Médicos (CGCOM) el 16 de abril de 2005, y desde el primer momento se apreció un cambio en el rumbo de esta institución, tanto a nivel interno de la organización como en su proyección exterior. Con la ilusión de todos consiguió, entre otros logros, formar una Comisión Permanente cohesionada y centrada en unos objetivos comunes: la inauguración de una obra de tanta trascendencia social como la Residencia de Mayores Siglo XXI ?Doctor Sacristán?; un excelente posicionamiento a nivel internacional; la defensa permanente y decidida de la profesión médica frente al intrusismo, y un mayor acercamiento a la sociedad, potenciando la comunicación fluida de esta institución con los profesionales y los ciudadanos.
Isacio Siguero, presidente del
CGCOM.
-¿Qué ha supuesto en su dilatada carrera la presidencia del Consejo General de Colegios de Médicos?
-He tenido el honor de representar a la profesión médica ante las instituciones nacionales e internacionales durante todo este tiempo. Cuando uno se presenta a unas elecciones tiene que ser consciente de la gran responsabilidad que asume si es elegido, máxime en el cargo de la más alta representación en la profesión médica como es la presidencia del Consejo General de Colegios de Médicos. Así lo hice y puse a favor de esta institución toda mi experiencia como presidente del Colegio de Médicos de Sevilla durante 11 años y como presidente del Consejo Médico Andaluz durante seis. Me voy con la satisfacción del deber cumplido, dejando esta institución en una posición mucho más fuerte que cuando tomé su mando.
-A su llegada a la OMC se le calificó como ?el presidente del cambio?. ¿Cómo ha transcurrido este tiempo?
-A lo largo de estos cuatro años se han sucedido muchos acontecimientos. Han sido años de mucha ilusión y arduo trabajo. Tengo que reconocer que, al principio, hubo dificultades para lograr el entendimiento, pero a través del diálogo y de poner a un lado intereses personales para trabajar todos juntos en una meta común, se consiguió formar la Comisión Permanente más unida, más completa, la que más ha trabajado y, posiblemente, la que más documentos de trabajo ha sacado adelante a lo largo de la historia.
-¿Cuándo se produjo el punto de inflexión que cambió el rumbo de la institución?
-Fue a partir de unas jornadas de reflexión que celebramos en junio de 2006 en Segovia. En este encuentro la Comisión Permanente asumió el compromiso de aceptar unos objetivos comunes dejando al margen cuestiones personales por el bien del colectivo al que representamos. Todo ello dio pie a esta nueva etapa marcada por la cohesión y el entendimiento.
-A lo largo de su trayectoria se han destacado algunas cualidades suyas, como son la valentía e independencia a la hora de defender los posicionamientos de esta institución?
-Soy muy exigente conmigo mismo, y eso ha quedado patente a la hora de presidir este Consejo General. Valoro mucho el trabajo, entendiendo que sin sacrificio y esfuerzo no es posible llevar las cosas a buen término. Por otra parte, siempre he puesto de manifiesto mi independencia frente a cualquier poder político o económico, aunque esto entrañe dificultades, que es necesario asumir cuando se representa a una organización que es y debe seguir siendo independiente.
-¿Cómo han sido sus relaciones con la Administración?
-Siempre he tenido presente el juramento que hice en cumplimiento de los estatutos del Consejo General, que nos marca la responsabilidad de colaborar con las Administraciones públicas cualquiera que sea su ideología. Ahora bien, de la misma manera que somos exigentes para cumplir con nuestras obligaciones, también lo somos a la hora de exigir a la Administración que nos otorgue el lugar que nos corresponde. Por consiguiente, nuestras relaciones han sido de total colaboración pero exigiendo el respeto que merecen nuestros representados.`p>
-Precisamente, Vd. ha defendido que ?la profesión médica no es propiedad de estamentos políticos??
-En la mayoría de las encuestas de opinión el médico aparece siempre como la profesión mejor valorada por los ciudadanos. Esto supone no sólo una gran satisfacción sino también el compromiso de mantener ese mismo nivel de aceptación en lo sucesivo. En este sentido, hay que seguir trabajando desde los Colegios de Médicos, ya que estas instituciones son las que garantizan el buen ejercicio profesional y, en consecuencia, dan seguridad a los pacientes, por lo que su función es irreemplazable. Cuando hace 10 años la Comunidad Autónoma de Andalucía liberalizó la colegiación, fuimos los primeros en reclamar ante el Tribunal Constitucional y, aunque la justicia es lenta, espero que nos dé la razón, como ya lo ha hecho en otros temas importantes.
-Sin duda se refiere a casos como, por ejemplo, la sentencia del Tribunal Supremo que anula un acuerdo entre los ópticos y la Consejería de Salud de Andalucía?
-Así es; en este caso, tras diez años de trabajo por conseguir que se respetase la ley, finalmente, el Tribunal Supremo nos ha dado la razón. La sentencia reconoce el riesgo que supone para la población otorgar competencias sobre salud oftalmológica a profesionales sin la formación suficiente en esta materia. Hemos logrado que se ratifique que la asistencia sanitaria ha de ser impartida por profesionales reconocidos para ello, como son ?en este caso- los oftalmólogos. Esta sentencia, además, marca el camino para la defensa de la profesión ante las pretensiones de otros colectivos por asumir competencias que por formación, y porque así están reconocidas por la ley, corresponden sólo a los médicos. Lo que defendemos, en definitiva, es la calidad de la asistencia y el cumplimiento de las leyes, ya que uno de los compromisos que adquirimos a la hora de tomar posesión de nuestros cargos, fue el de ser garantes de la calidad de la asistencia sanitaria que se presta a los ciudadanos.
-¿Sería necesario poner la Sanidad por encima de intereses políticos y lograr el tan ansiado pacto político?
-Cuando tomé posesión de mi cargo, ya manifesté mi convencimiento sobre la necesidad de un gran pacto sanitario, por encima de cualquier interés partidista. Al igual que debería suceder en ámbitos como la Justicia o la Educación, también en Sanidad es preciso un pacto nacional que garantice la equidad en las prestaciones sanitarias, así como la sostenibilidad del sistema, otorgando a los médicos el papel que le corresponde. Sobre estas cuestiones básicas no deben existir diferencias entre los ciudadanos según sea la Comunidad Autónoma en la que residan.
-¿La transferencia de la Sanidad a las Comunidades Autónomas dificulta la representación del Consejo General?
-Aunque todos perseguimos los mismos objetivos, es evidente que nos encontramos con 17 sistemas sanitarios diferentes. La existencia de carreras profesionales distintas, según cada Comunidad, complica en gran medida el ejercicio profesional?Todos estos factores dificultan el trabajo de esta organización que representa a más de 200.000 médicos en todo el territorio nacional.
-¿Cómo han transcurrido estos últimos meses en el seno de la Comisión Permanente?
-Con el paso a la arena política de nuestro anterior vicepresidente, el doctor Jesús Aguirre, un hombre realmente importante y querido en esta casa, vimos llegado el momento de que los colegios catalanes tuvieran una representación en nuestros órganos de gobierno, y hubo unanimidad para lograr el consenso en la figura del doctor Ricard Gutiérrez. Después, en toda la organización ha habido consenso también a la hora de proponer una candidatura única para esta nueva etapa a la que, sin duda, el doctor Juan José Rodríguez Sendín dará la continuidad y progresión que todos deseamos.
-¿Cómo valora la representación de los médicos españoles en el ámbito internacional?
-Durante esta legislatura se ha mantenido una intensa actividad de representación en los organismos internacionales, presentando propuestas, dirigiendo equipos de trabajo o haciendo valer nuestros posicionamientos como, por ejemplo, en la defensa del voto ponderado en el seno del Comité Permanente de Médicos Europeos (CPME), actitud que, por cierto, ha sido apoyada por los principales países de nuestro entorno y que exige un nivel de representación justo para nuestros médicos, al igual que sucede en las instituciones democráticas europeas. Además, por primera vez en la historia, la Organización Médica Colegial de España ha alcanzado dos de las cuatro vicepresidencias de los organismos de representación internacional más importantes, como la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS) y la Unión Europea de Médicos Generales (UEMO).
-Para terminar ¿cuál sería la valoración final de su gestión al frente del Consejo General de Colegios de Médicos?
-En mi toma de posesión marqué el camino a seguir durante esta legislatura y dejé claras cuáles eran mis convicciones personales y profesionales. Así lo he mantenido a lo largo de todo mi mandato, aunque con la flexibilidad necesaria para lograr ese clima de cohesión y unidad que es imprescindible para alcanzar unos objetivos comunes. Por consiguiente, me siento satisfecho del trabajo realizado y, por supuesto, agradecido por la colaboración y trabajo de todos los que formamos esta organización que debe seguir siendo el primer referente de los médicos ante la Administración, la profesión y la sociedad en su conjunto.