El Colegio de Médicos de Ceuta manifestó su absoluta repulsa ante la agresión sufrida por una colegiada del Centro de Salud del Tarajal, al ser amenazada por un paciente con un arma blanca (una navaja) por su negativa a prescribirle psicotropos
Igualmente expresó su firme apoyo y solidaridad con la doctora agredida y con todo el personal sanitario víctimas de agresiones. Esta agresión pudo terminar en tragedia pero afortunadamente se evitó por la intervención del personal de seguridad del centro de salud, que le arrebató el arma y lo contuvo hasta su detención por la policía nacional. El agresor fue enviado a prisión preventiva hasta la celebración del juicio en septiembre, por tener antecedentes penales.
El presidente de la corporación, Dr. Enrique Roviralta, y la vocal de Atención de Primaria, Rosario de la Torre, se unieron a la concentración realizada en la entrada del centro sanitario junto al personal, sindicatos como el Sindicato Médico de Ceuta y pacientes, declarando ante los medios de comunicación presentes su condena a este tipo de violencia que menoscaba gravemente un pilar fundamental de nuestro estado del bienestar como es la sanidad pública y que afecta gravemente a sus profesionales, ocasionándoles angustia, miedo, frustración y estrés laboral, lo que les dificulta enormemente su labor asistencial y a la postre resiente la calidad de la asistencia sanitaria.
Además, instaron al Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) a que adopte las medidas organizativas y técnicas necesarias para proteger a los trabajadores del riesgo de ser agredidos y que ayuden a combatir eficazmente esta lacra.
También reclamaron la aplicación efectiva del artículo 550 del Código Penal que tipifica el delito de atentado contra la autoridad, aquel cometido contra funcionarios sanitarios en el ejercicio de sus funciones o con ocasión de ellas, y que puede acarrear penas de prisión de dos a cuatro años.
Al Colegio de Médicos de Ceuta, han llegado numerosas denuncias de colegiados expresando su malestar y temor por ejercer en estas circunstancias y reclamando un incremento de las medidas de prevención para poder desempeñar su labor de atención a los pacientes en condiciones de seguridad.
De hecho, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, son consideradas como los territorios de España con más riesgo para el personal sanitario de sufrir agresiones. Las agresiones físicas, las verbales y los ataques en redes sociales, generan una situación insostenible e insoportable para el personal sanitario.
Desgraciadamente esta agresión ni ha sido la primera ni será la última, expresó el Colegio, destacándose en el último año, “un preocupante repunte de este tipo de violencia contra el personal sanitario en Ceuta”. De hecho, este sábado otro facultativo sufrió de nuevo un intento de agresión física, frustrado por el personal de seguridad, en el servicio de urgencias de Atención Primaria. El agresor ha sido condenado a cuatro meses de prisión por delito de atentado.
