Con motivo del Día Nacional contra las Agresiones a Sanitarios, el Dr. José Manuel Bendaña, secretario del Colegio de Médicos de Ourense y miembro del Observatorio de Agresiones de la OMC, en una entrevista con Médicos y Pacientes asegura que “se deben de aumentar las medidas preventivas y la formación en comunicación difícil y de las situaciones de violencia”
Madrid, 16 de marzo de 2015 (medicosypacientes.com)
-Han pasado cinco años desde la puesta en marcha del Observatorio de Agresiones. ¿Cuál es el balance de lo conseguido en este tiempo?
Hemos logrado dar a conocer el alcance del problema a todos los medios de comunicación posibles, así como a los altos cargos de la administración: Presidentes de las comisiones de sanidad del congreso y senado, Defensora del Pueblo, Ministro de Justicia, Fiscal General del Estado, representantes políticos,…
También debemos de destacar la difusión lograda entre los colegiados de las líneas de actuación, actitud y medios de apoyo ante la situación de violencia y hemos fomentado y financiado la formación específica en este ámbito.
Por otro lado, se ha conseguido poner en evidencia ante la sociedad el problema, crear registros nacionales del Observatorio y llevar a cabo una evaluación y seguimiento anual del mismo, y también se han obtenido importantes acuerdos con fiscalías y servicios de salud para lograr la consideración de delito en lugar de falta y su uniformización en todo el territorio nacional.
¿Cuáles son los fines y objetivos que se propone el Observatorio a corto? ¿A medio plazo?
Queremos continuar la tarea de mejorar el registro y difundir tanto éste como el protocolo de actuación entre los colegios y colegiados; aumentar las medidas preventivas en relación a formación específica respecto al manejo de la comunicación difícil y situaciones de violencia y extender los contactos con los responsables legislativos y judiciales para mejorar el tratamiento de las agresiones a sanitarios, sin olvidarnos de la comunicación para que la sociedad y los médicos oigan las voces que denuncian esta lacra social.
-El trabajo del Observatorio de Agresiones ¿ha repercutido en una mayor concienciación por parte de la población ante este problema?
No podría decirlo a ciencia cierta, lo que si percibo es que mediáticamente cada vez vemos mayor número de impactos informativos y ello podría indicar indirectamente que el tema despierta mayor sensibilidad social.
¿Qué medidas se han puesto en marcha gracias al trabajo del Observatorio?
Claramente la más obvia ha sido iniciar un programa formativo específico para la prevención de las agresiones en el ámbito laboral y manejo de situaciones de violencia laboral, dirigido, en principio a todos los médicos en ejercicio y en especial a los que ya han sufrido algún tipo de violencia, y ahora ampliado a los médicos en formación, además con carácter gratuito.
-Algunos colegios han puesto en marcha convenios con la Fiscalía ¿cómo han repercutido estos acuerdos? ¿Cree que deberían hacerse un acuerdo marco a nivel nacional?
Ha facilitado la orientación y el manejo desde las fiscalías de las agresiones a sanitarios. Aunque no está establecido en todas las comunidades, sí que existen directrices internas desde las fiscalías autonómicas para protocolizar las actuaciones fiscales. Sería deseable una norma nacional para el manejo de esta situaciones de violencia social y todavía mejor si se contase con el respaldo de una legislación que considerase la agresión a un sanitario como delito de atentado.
-En 2013 se produjo un descenso del número de agresiones a médicos y parece que en 2014 continúa esa tendencia ¿cuáles han sido los factores más determinantes para lograr este descenso?
Creo que es el resultado de un esfuerzo de todos, organización colegial en su conjunto, órganos judiciales, medios de comunicación y la propia sociedad que se ha implicado en el problema. Aún así pienso que tofdavía existen muchos casos que no llegan a denunciarse y que quedan impunes, por lo que sería prudente en las valoraciones.
-Cuándo un profesional sufre una agresión ¿Cuál es el protocolo a seguir? Como médico, ¿alguna vez se ha sentido agredido?
Existe un procedimiento muy claro que está definido en el protocolo de intervención que el Observatorio a puesto a disposición de los Colegios de Médicos y de los colegiados y que suele figurar en todas sus webs. Lo primero es establecer contacto con los sistemas de apoyo colegiales y las asesorías jurídicas para ser orientados y asistidos desde la propia organización. Muy importante es recabar asistencia sanitaria en los casos de agresiones físicas y/o psíquicas, comunicarlo al empleador y con la asesoría jurídica presentar la denuncia judicial oportuna.
Cualquier médico que haya ejercido lo suficiente habrá podido sufrir situaciones de violencia, bien física, bien psíquica. No olvidemos que el concepto de agresión lo entendemos en su sentido amplio. Las coacciones y amenazas también son una forma de agresión.
– Hay una clara desprotección o desigualdad del médico que ejerce la medicina privada respecto al de la pública ¿Qué medidas está tomando el Observatorio para trabajar en la equiparación de ambos ámbitos?
Obviamente. Aunque la proporción de casos es menor, el médico de la privada no va a ser tratado jurídicamente como una víctima igual que cuando ejerce en la pública. Por eso desde el Observatorio abogamos porque el tratamiento jurídico de la agresión al sanitario se dirija a la función asistencial y no al ámbito de la misma. Que se proteja la función sanitaria independientemente del ámbito en que se realice ésta.
-Se ha puesto en marcha la segunda edición del Curso de Prevención y Abordaje de las Agresiones ¿Qué opina de esta iniciativa? ¿La prevención es la mejor herramienta para evitar las agresiones?
Excelente. Es una propuesta más del Observatorio que pretende dar la formación que ayude a manejar las situaciones de violencia en la consulta y mejorar la comunicación.