Según se ha destacado en una jornada sobre nutrición en el anciano, celebrada en Toledo, las personas mayores representan el 17,5 por ciento de la población de Castilla-La Mancha (unas 365.000 personas) por lo que es necesario promover una nutrición adecuada a fin de detectar, prevenir y evitar la malnutrición
Toledo, 26 de marzo 2010 (medicosypacientes.com)
El consejero de Salud y Bienestar Social , Fernando Lamata, inauguró en Toledo una jornada sobre la realidad de la nutrición en el anciano. El Gobierno de Castilla-La Mancha promueve, tanto en sus centros asistenciales como sociosanitarios, una nutrición adecuada a las personas mayores a fin de detectar, prevenir y evitar la malnutrición de este colectivo que representa al 17,5 por ciento de la población regional, unas 365.000 personas.
Desde el punto de vista sanitario, en Castilla-La Mancha se llevan a cabo estudios de valoración nutricional en las personas mayores mediante un test de screening por parte de Atención Primaria como a través de los médicos geriatras y los servicios de Nutrición y Endocrinología de los diferentes hospitales.
La detección de una malnutrición o de un claro riesgo de padecerla pone en marcha diferentes actuaciones: en una primera fase se adopta una Alimentación Básica Adaptada (ABA), que supone un paso intermedio entre la alimentación tradicional y la nutrición clínica o artificial, ofreciendo al paciente espesantes y aguas gelificadas que ayudan a cubrir las necesidades nutricionales.
En el caso de tener que recurrir a la nutrición clínica o artificial, hay un primer paso que es la prescripción de suplementos que complementen la dieta oral, recurriendo en último extremo a la nutrición artificial enteral por sonda.
Desde el punto de vista social, en los centros residenciales de Castilla-La Mancha está establecido que los menús que se sirven deben estar supervisados por un médico y deben ser adaptados a las necesidades dietéticas y nutricionales de las personas mayores. Además en los centros propios se desarrollan acciones de formación interna entre los cocineros para asesorarles sobre alimentación sana.
En este sentido, Lamata adelantó que desde su departamento se están analizando los programas de alimentación y nutrición en los centros residenciales propios, para establecer pautas de actuación que puedan mejorar el servicio.
También hay que destacar que entre los distintos programas sobre envejecimiento activo que impulsa el Gobierno de Castilla-La Mancha hay acciones encaminadas a mejorar los conocimientos de las personas mayores en temas de alimentación, y que en los centros de mayores se organizan actividades divulgativas al respecto.
Tras la intervención de Fernando Lamata, la profesora Julia Álvarez Hernández, del Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, pronunció una conferencia sobre ética y nutrición, en la que destacó la importancia de equilibrar los intereses del triple agente que interviene en la correcta nutrición de los ancianos: el médico, el paciente y sus familiares, y así mismo organismos añadidos como la Administración sanitaria o los jueces. Estos mismos aspectos fueron abordados, desde ese punto de vista multidisciplinar, en la mesa redonda posterior.