El 20% de los niños afectados por los conflictos bélicos en zonas como Oriente Medio están en riesgo de desarrollar enfermedades mentales debido a las experiencias traumáticas que están viviendo en la guerra o en el camino de huida, según alerta UNICEF en un reciente informe. Bajo el título "Niños en emergencia", identifica las cinco situaciones más graves a las que están expuestas menores de todo el mundo. La entidad calcula que hay 250 millones de menores que están creciendo rodeados de violencia y terror
Desde UNICEF se alerta de que cada vez son más las situaciones de emergencia que se producen en el mundo. Se asegura que desde la Segunda Guerra Mundial, nunca antes se habían sentido tanto los efectos de guerras y desastres naturales. Millones de personas están sufriendo las consecuencias de esta grave situación, muchas de las cuales son niños, advierte en su documento.
Desde esta organización que vela por la infancia, se calcula que en el mundo hay 250 millones de niños que están creciendo rodeados de violencia y terror. Millones más viven en zonas en riesgo de sufrir desastres naturales como sequías, inundaciones y epidemias.
Desde UNICEF se reconoce que las emergencias en el mundo actual son complejas y se están intensificando. Conflictos como el de Afganistán, Siria, Yemen o Sudán del Sur llevan varios años destruyendo infancias.
En este contexto, se han identificado aspectos alarmantes sobre la situación de estos niños, motivo de indignación. Cada día, una media de 4 hospitales y escuelas de zonas en conflicto son atacados, además, 75 millones de niños en todo el mundo no pueden ir al colegio o van de forma interrumpida debido a las constantes crisis y desastres que viven sus países.
Según esta organización, solo en el año 2015, 16 millones de niños llegaron al mundo en medio de la guerra y han pasado sus primeros meses de vida entre balas y bombardeos; en Siria, durante el año 2015, se identificado más de 1.500 violaciones graves de los derechos de los niños. Más del 60% de estos ataques acabaron con sus vidas o les produjeron graves heridas; el 20% de los niños afectados por los conflictos en Oriente Medio están en riesgo de desarrollar enfermedades mentales debido a las experiencias traumáticas que están viviendo en la guerra o en el camino de huida.
A estos desastres se suman el cambio climático y fenómenos meteorológicos como El Niño aumentan las probabilidades de riesgo para las poblaciones más débiles como la de los menores.
Ante la falta de esperanza y de seguridad que muchas personas sienten en sus países de origen, la única salida, a juicio de dicha organización, la elección que se han visto obligados a tomar más de 65 millones de habitantes en el mundo, de la que la mitad son niños, es la de dejarlo todo y huir.
Desde UNICEF se recuerda, finalmente, que los niños que sufren guerras y catástrofes naturales necesitan mucho más que agua potable, alimento y medicinas. Por eso, aseguran, «trabajaremos para que puedan acceder también a educación y protección, dos elementos clave para que sigan siendo solo niños y su futuro no se vea determinado por la situación que les ha tocado vivir».
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