El Dr. Miguel Guimarães es el actual presidente de la Ordem Dos Médicos de Portugal, la corporación que representa a los médicos colegiados lusos. Con motivo de su participación en la IV Jornada Europea del CGCOM avanza en esta entrevista concedida a "MedicosyPacientes" algunos aspectos sobre su visión de la profesión médica en Europa
-Desde el pasado mes de enero es Vd. el nuevo presidente de la Ordem Dos Médicos, ¿cuáles son sus objetivos para estos dos años de legislatura?
-Uno de los puntos de mi Carta de Compromisos para la candidatura a Bastonario de la Orden de los Médicos apuntaba a la necesidad de respetar y valorar a los médicos. Esto es porque en la actualidad existe una amenaza hacia la calidad de la medicina y hacia la salud de los pacientes y de los médicos. El tiempo que los médicos disponen para estar con el paciente es muy escaso, frente a la presión de disminución de los tiempos de consulta.
La relación médico-paciente es esencial para la consulta, de ahí mi propuesta de que ese tiempo resulte de cuatro aspectos fundamentales (historia clínica y examen objetivo, utilización de los sistemas informáticos, dudas acerca del caso clínico, información al paciente). Con la mejora de esta relación creo que varios otros problemas van a resolverse por sí solos, especialmente los se refieren a la prevención del síndrome de burnout / agotamiento de los médicos ya la mejora de la calidad de la Medicina.
Espero que sea posible construir una relación de cooperación entre las estructuras relacionadas con el sector de la medicina, en particular con el Ministerio de Salud, los sindicatos médicos y las Facultades de Medicina.
La Orden de los Médicos debe asumir, en cada nivel, una postura de cooperación, sabiendo no sólo identificar los problemas existentes, sino también presentar propuestas.
-¿Cuál es la situación sanitaria y de sus profesionales en estos momentos?
-Del análisis de la situación en la salud a nivel europeo lo que destaca en primer lugar son las desigualdades entre los distintos países, fruto de dos factores esenciales: financiación y organización.
En cuanto al primer aspecto se distinguen claramente tres regiones en el espacio europeo: países con un elevado producto interior bruto y un elevado porcentaje de ese PIB destinado para la salud, incluidos los países más ricos del centro y norte de Europa. Un segundo grupo de países con PIB bajo, que destinan a salud un porcentaje de éste similar al del primer grupo, y que engloba a los países del Sur, y, finalmente, un tercer grupo con PIB bajo y bajo porcentaje del mismo para la salud y que corresponde a los países del Este de Europa.
Los indicadores de salud revelan una relación entre los resultados obtenidos y el dinero invertido en la salud. Se observa cómo algunos países han alcanzado buenos indicadores con presupuestos más limitados, lo que indica un papel relevante en la forma en que el sistema está organizado.
De estas desigualdades resultan también diferentes situaciones para los profesionales, especialmente para los médicos, con flagrantes diferencias en las condiciones de trabajo y en los salarios, provocando un importante flujo migratorio en la clase médica.
Cuestiones como el cumplimiento de la directiva europea del tiempo de trabajo, el desarrollo profesional continuo, el burn-out, el task shifting acentúan las diferencias entre los países europeos.
-¿En qué posición sitúa a la Sanidad portuguesa con respecto al resto de Europa?
-Portugal es un buen ejemplo de cómo, con menor inversión, se logran obtener buenos resultados en los principales indicadores de salud – mortalidad infantil o expectativa de vida – resultando de un cuadro organizativo basado en un Servicio Nacional de Salud que tiene como espina dorsal un sistema basado en la carrera profesional del médico, el liderazgo clínico y la autorregulación de la profesión.
-¿Qué sinergias tiene previstas con la Organización Médica Colegial de España?
-Para la Orden de los Médicos de Portugal la relación con la OMC constituye una prioridad, y vamos a profundizar en esa relación con vistas, siempre que sea posible, a una estrategia conjunta a nivel europeo o latinoamericano.
-Ambas corporaciones pertenecen a una Confederación Latino-Iberoamericana de Entidades Médicas ¿Qué tiene previsto con respecto a CONFEMEL?
-Desarrollar y profundizar en las relaciones con las Asociaciones Médicas del espacio Iberoamericano, aprovechando la experiencia europea de Portugal y España para poder ampliar a los demás países el sistema de acreditación de la UEMS o la certificación europea en liderazgo clínico de la AEMH.
-Desde su punto de vista qué reorganización precisa las entidades médicas europeas?
-Se siente una necesidad creciente de trabajo conjunto entre las diferentes organizaciones médicas europeas para que cada una desarrolle unas áreas específicas, sin superposición de trabajo, profundizando en una mejor comunicación, asumiendo posiciones en común e interviniendo a nivel de las instituciones europeas de forma más eficaz.
Es fundamental una apuesta cada vez mayor por la armonización en las diferentes especialidades, en el desarrollo profesional continuo, en las condiciones de trabajo, y en realzar la importancia del liderazgo clínico y de la autorregulación y autonomía de la profesión.
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