El presidente del Colegio de Médicos de Burgos, Dr.Joaquín Fernández de Valderrama, en una entrevista concedida al "Diario de Burgos" opina que los recortes de la sanidad han hecho mucha mella en el colectivo que representa, afectado de inestabilidad laboral, duras condiciones de trabajo y mucha desmotivación a pesar de que tiene en sus manos la salud de toda la población. está convencido de que es la labor de los profesionales la que sostiene el sistema sanitario del que opina que tiene que cambiar de arriba abajo para adaptarse a los nuevos tiempos
-El próximo día 28 los licenciados en Medicina realizan el examen MIR para acceder a formarse en las distintas especialidades. ¿Qué cree que van a encontrarse en esta provincia cuando lleguen?
-Esto es una profesión muy vocacional, que gusta mucho. Yo me pongo en su lugar -quise ser médico desde los 10 años y sé que lo que les gustaría ahora es poder ejercer el resto de su vida pero también sé que no todo lo van a ver tan bonito después.
–¿Piensa que se van a dar de bruces con una realidad muy distinta a la que esperan?
En la medida en la que vayan conociendo el sistema y su realidad se van a ir desencantando pero les pido que no pierdan la ilusión, que se centren mucho en la formación y que exijan al tutor que realice bien su papel y te lo digo porque yo soy tutor de residentes, aunque desgraciadamente por último año porque ya sabes que en los hospitales de Aranda y Miranda la Junta ha retirado la acreditación de formación por decreto, en contra de la opinión de la gerente de Atención Primaria y de la comisión de tutores, que nunca entendieron por qué se hizo. Ahora se ha vuelto a pedir porque se ha visto que ha sido un error de planificación tremendo que creo que lo hicieron por una cuestión económica (aunque imagino que no sería mucho dinero) pero han creado un gran problema por no haber gestionado bien el tema de las jubilaciones, que no va a haber repuesto a los médicos que se vayan retirando.
-¿La falta de formación en hospitales y centros de salud no empobrece la calidad de la atención que se presta?
-Empobrece la calidad, la ilusión de tener gente en formación, sobre todo en hospitales pequeños y centros de salud. En el caso de Miranda, por ejemplo, había más tutores que en Burgos ciudad.
-La tutoría de los médicos residentes sigue realizándose sin cobrar por ella y es una carga más de trabajo. ¿Cree que esto debería cambiar?
-Hombre, en general, es gratificante si todo va bien aunque de vez en cuando surgen problemas. Es cierto que lo hacemos gratis pero lo asumimos como parte de nuestro trabajo.
-Me dice que no se está gestionando bien la planificación a corto plazo de los recursos humanos pero no es eso lo que dice el consejero, que lleva a gala que se está preparando bien y con garantías…
-Hace tiempo que la planificación en recursos humanos es mala, yo ya lo he dicho más veces: la gestión preventiva de la edad no existe, no está siendo buena. Mira, en los próximos cinco años se van a jubilar 351 médicos de esta provincia, 203 en Atención Primaria y ahora mismo solo hay cinco plazas de formación en Burgos para médicos de Familia. Las cuentas no salen… pero es que ahora tampoco, porque cuando llaman a alguien para cubrir vacaciones o días de libranza les acumulan a los pacientes de dos o tres médicos.
-¿Cree que las condiciones laborales de los médicos que sustituyan a los jubilados van a ser las mismas?
-Esto tiene que cambiar. Los momentos de crisis son momentos de oportunidades y no de recortes. El sistema sanitario español, que es de los mejores del mundo, necesita cambios y las autoridades no lo pueden hacer solas sino que necesitan del conocimiento científico de los profesionales, a quienes no están consultando todo lo que se debiera. Las listas de espera, las demoras, la sobresaturación en los centros de salud, en las urgencias… conforman un cúmulo de despropósitos al que hay que poner freno. Y pienso que se puede hacer potenciando la medicina preventiva, la Atención Primaria, la relación entre los servicios y consiguiendo que haya un sistema sociosanitario que se preocupe, por ejemplo, de los cuidadores porque cada vez hay gente más mayor y con más enfermedades a la que cuida gente que también es mayor y tiene sus propias enfermedades.
-Pero la Junta ya tiene un programa específico para pacientes crónicos…
Está empezando a funcionar pero está en mantillas. Es tal la presión asistencial que existe y tan estrictos los números que tienen que presentar los gerentes a Valladolid, que los profesionales se centran en el trabajo del día a día. Pero, además de criticar, quiero hacer propuestas como las que te decía de potenciar la Primaria y mejorar e intensificar las relaciones entre los servicios, porque no es posible que el hospital vaya por un lado y los centros de salud por otro. Estaría bien copiar el sistema del País Vasco en el que cada vez que un ciudadano necesita una atención sanitaria en el nivel que sea (centro de salud, hospital, farmacia, dentista, podólogo…) todo está integrado en un programa informático y en una tarjeta sanitaria. ¡Esto no es de Dinamarca ni de Islandia, es de aquí al lado!
-¿Cómo se relacionan aquí los centros de salud y los hospitales?
-Bien, hay iniciativas que están funcionando bien pero hace falta más relación, empezando por la informática porque los médicos de los centros de salud pueden ver en su ordenador las intervenciones que han hecho sus colegas del hospital pero al revés, no. ¿Tan difícil es conseguir esto?
– ¿Y así el paciente no tendría que explicar un montón de veces las mismas cosas, como ocurre en ocasiones?
-Claro, es que esto es lo principal, dar la mayor calidad a la asistencia sanitaria en beneficio del paciente. Hay que agilizar los sistemas y sacar a los médicos del hospital a los centros de salud para que hagan interconsultas, que tampoco es inventar nada.
-Por cierto, y hablando de no inventar nada… ¿Cómo es posible que se sigan colapsando en enero los recursos sanitarios por la gripe si todos los años pasa lo mismo y en el mismo momento?
-Es que ahora no hay recursos para estas eventualidades. Estamos en fechas en las que los trabajadores tenemos muchos días libres -y encima este año nos han devuelto los que nos quitaron hace años-, hay menos gente en los centros de salud y en los puntos de atención continuada (urgencias) y no hay médicos en paro para cubrir estas eventualidades porque no salen los que debieran, como ya hemos dicho.
-¿Se verán este año, por fin, las unidades de gestión clínica tan ansiadas por la Junta?
-Creo que no. Al menos, tal y como están diseñadas por Sacyl. Creo que para que las haya, en principio, tendrán que cambiarlas la denominación porque gestión clínica la llevamos haciendo desde siempre y es parte de nuestro trabajo diario.
-Hace ya tiempo que el Colegio de Médicos de Burgos se ha convertido en una entidad implicada a nivel social en los problemas sanitarios después de años de prácticamente ser irrelevante en ese sentido. ¿Las autoridades sanitarias les tienen en cuenta, les escuchan?
Yo tengo hilo directo con cualquier gerente y con el consejero. Y todo esto que te estoy contando en la entrevista se lo he dicho a ellos muchas veces y en ocasiones nos han resuelto problemas graves. Gracias a la intervención del consejero de Sanidad, por ejemplo, se solucionó la situación de médicos de otros países a los que hemos formado y que aquí hacen mucha falta en los hospitales pero que se veían obligados a marcharse por la normativa de Extranjería.
-¿Pero hay que solucionar las cosas tirando de teléfono o debería existir la planificación de la que me hablaba antes?
-Claro, claro, por supuesto que debe haber planificación.
-¿Las figuras de los gerentes son más políticas que técnicas?
-Totalmente. Y son ellos los primeros que lo dicen…
-Pero ninguno deja el puesto por esta causa…
-La OMC lo ha dicho muchas veces y lo tenemos por escrito en un acuerdo pidiendo un pacto entre partidos para que prime el perfil técnico sobre el político y que se demuestre con el currículum que se está a la altura de las exigencias del puesto.
– ¿Qué opinión le merece la gestión del gerente del HUBU?
– Ha tenido y tiene varios conflictos y no sé si los habrá gestionado bien pero considero que ha tenido una época muy complicada con la transición del Yagüe al HUBU en plena crisis, y aún con todo, los resultados que está teniendo el hospital son buenos y pienso que su gestión es buena.
-Uno de ellos es el de la sedación irregular de un paciente en Medicina Interna, en la que un juez ha visto indicios de homicidio imprudente. ¿Cree que la gerencia fue diligente en este asunto teniendo como tenía un documentado informe sobre estas prácticas al que no le había hecho caso hasta que el asunto fue publicado por este periódico?
-No, evidentemente, teniendo como tienen una Comisión de Bioética y expertos tendría que haber sido más ágil en la gestión de este caso.
-El Colegio de Médicos que usted dirige reflexionó sobre este asunto en un comunicado llamando a la tranquilidad de la población y criticando «el desprestigio de la clase médica» cuando solo se hablaba de la práctica de un profesional… ¡Luego se quejan cuando les llaman corporativistas!
-Lo que queríamos hacer era quitar el miedo a la gente cuando oye hablar de las sedaciones, que es una práctica habitual y se hace con mucho rigor en determinadas especialidades.
– ¿Su institución está abierta a la población en general?
-Sí, tanto a través de nuestra web, donde informamos sobre los médicos colegiados y de qué especialidades y tenemos un consultorio online, como presencialmente. Nuestra vocalía de médicos jubilados ha organizado una serie de charlas para la población en general y el salón de actos se nos queda pequeño. Muchas de ellas son conferencias de los médicos a los que obligaron a jubilarse con 65 años…
-Por lo que muchos de ellos se enfadaron…
-Lógicamente. Y mira, ahora probablemente amplíen la edad del retiro a los 67 años porque no hay relevo. Es que era un colectivo de gente muy competente, generaciones muy preparadas y que fueron las que pusieron en marcha tanto la jerarquización de los hospitales, tal y como la conocemos ahora, y los centros de salud modernos, además de tener un singular compromiso con sus pacientes, a los que siempre dieron una gran calidad. Desde el Colegio agradecemos mucho su labor y se cuenta con ellos para que participen en actividades divulgativas.
-¿Ve en los médicos jóvenes este compromiso con la profesión del que habla?
-El que llega a esta profesión por vocación, seguro que lo tiene.
-¿Y considera que pueden tener la misma capacidad de crítica frente al sistema que sus mayores, dada la precariedad laboral con la que se encuentran?
-El compromiso no es el mismo, desde luego, y la situación laboral les hace inhibirse de esa parte reivindicativa pero, como en tantas otras cosas, en ésta, el sistema también tiene que cambiar.
-¿Qué opina del colectivo Sanidad Pública Sí?
-Me parece que sus reivindicaciones van siempre en beneficio de la sociedad.
