El Ministerio de Defensa, el Servicio de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Central de Defensa (HCD) y Sociedad Española de Psiquiatría Clínica (SEPC) han organizado unas jornadas, que se desarrollarán durante el 14 y 15 de noviembre, para abordar los traumas psicológicos tras catástrofes y conflictos bélicos.
“Los desastres naturales, los conflictos armados y otras crisis humanitarias generan un impacto psicológico devastador en las comunidades afectadas, que se enfrentan a la pérdida de seres queridos, la destrucción de sus hogares y el trauma de vivir situaciones extremas”, afirma el catedrático de Psiquiatría y miembro del comité organizador de las jornadas, el doctor Miguel Gutiérrez Fraile.
En estos casos los profesionales de la salud mental juegan un papel fundamental para ayudar a la población a enfrentar y superar el sufrimiento psicológico que estas experiencias acarrean. “Sin embargo, para realizar esta labor de manera efectiva es imprescindible que los profesionales estén actualizados en cuanto a las técnicas, herramientas y métodos de intervención más efectivos y éticamente sólidos”, explica el doctor Gutiérrez.
Asimismo, señala que considera que esto implica comprender los aspectos particulares del trauma en estos escenarios, los factores culturales que influyen en la respuesta psicológica y las estrategias de intervención basadas en evidencia que se han desarrollado en los últimos años.
Las IV Jornadas Cívico-Militares de Psiquiatría y Salud Mental, se centrará en los traumas psíquicos producidos ante conflictos bélicos y catástrofes, permitiendo a los profesionales adquirir y compartir conocimientos sobre intervenciones efectivas, intercambiar experiencias con expertos de otros contextos y recibir formación sobre prácticas emergentes.
Además, en esta jornada se abordará situaciones reales, lo que facilita la comprensión de los desafíos prácticos que surgen en la atención post-catástrofe, así como las soluciones que han demostrado ser efectivas en distintos lugares del mundo.
“La importancia de esta reunión va más allá del desarrollo profesional”, añade el catedrático, que considera que la asistencia a este evento “es, en muchos sentidos, una responsabilidad ética para quienes trabajamos en salud mental, pues estamos llamados a brindar el mejor cuidado posible a aquellos que han sido profundamente afectados por circunstancias extraordinarias”.
Además, el experto insiste en que ante la actual catástrofe vivida en Valencia, asistir a esta reunión no solo permitirá adquirir conocimientos esenciales para una intervención efectiva, sino también contribuir a la construcción de una red de apoyo sólida y capacitada que sea capaz de responder a las crecientes necesidades psicológicas de la comunidad.
Por último, el experto concluye asegurando que “la actualización en el manejo de traumas psicológicos post-catástrofes es, hoy más que nunca, una prioridad que nos permitirá estar mejor preparados para servir en este difícil momento y en los desafíos que, sin duda, vendrán en el futuro”.