Cuatro de cada 10 familias que acuden a Cruz Roja Española, un 41,4%, se enfrentan a la llamada 'pobreza energética', es decir, la incapacidad de mantener la vivienda en unas condiciones de climatización adecuadas para la salud. Según Cruz Roja esta situación puede impactar en la salud de las personas, ya que el frío y la humedad permanente en un hogar pueden llevar a serios problemas respiratorios como asma o bronquitis, y pudiendo causar así un aumento de la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y respiratorias
La “pobreza energética” que sufren muchas familias en sus viviendas puede generar problemas de salud causados por el frio o la humedad
El encarecimiento de los precios de la energía sumado a la disminución de ingresos del hogar (relacionado directamente con factores como el desempleo), la antigüedad del parque de viviendas y la disminución de ayudas y subvenciones son, según Cruz Roja Española, las causas del agravamiento de esta pobreza energética.
Así se recoge en el ‘Boletín número 11 sobre Vulnerabilidad Social’ de Cruz Roja Española, que recoge datos de las personas atendidas por esta organización durante el año pasado y del que ésta ofreció un adelanto sobre lo relacionado con la ‘pobreza energética’, la incapacidad de un hogar de satisfacer una cantidad mínima de servicios energéticos para sus necesidades básicas, como mantener la vivienda en unas condiciones de climatización adecuadas para la salud (de 18 a 20ºC en invierno y 25ºC en verano).
Según la Asociación de Ciencias Ambientales, un 17% de los hogares españoles (más de siete millones de personas) dedica un gasto desproporcionado de sus ingresos al pago de las facturas de la energía y un 9% (más de cuatro millones) se declara incapaz de mantener su vivienda a una temperatura adecuada.
Esta situación es más preocupante en el caso de las familias atendidas por Cruz Roja el año pasado porque un 41,4% de los hogares no podían mantener su vivienda con una temperatura adecuada durante los meses fríos. Además, un 22% de las personas asistidas tenían problemas para sufragar gastos de la vivienda, un 42,2% no podía pagar el alquiler y un 14,8% no pagaba la hipoteca desde hacía algún tiempo.
“Ahora, con la bajada de las temperaturas, se complica aún más esta situación y su impacto en la salud de las personas, ya que el frío y la humedad permanente en un hogar pueden llevar a serios problemas respiratorios como asma, bronquitis, etc. Además, estas condiciones constituyen una de las causas del aumento de la mortalidad causada por enfermedades cardiovasculares y respiratorias entre personas mayores de 60 años durante los meses de invierno”, explicó este organismo.
Por otro lado, el número de personas que solicitan ayuda a los servicios sociales, Cruz Roja y otras ONG para hacer frente al alquiler ha aumentado notablemente desde diciembre de 2013, concretamente ocho puntos porcentuales entre quienes piden asistencia a Cruz Roja, al pasar del 16% al 24% en los dos últimos años.
Para hacer frente a esta situación, Cruz Roja Española desarrolla diversos programas de emergencia social que se dirigen a la cobertura de las necesidades básicas y al apoyo a las familias para afrontar las situaciones más graves a las que se ven sometidas.