La Organización Mundial de la Salud (OMS) defiende la necesidad de mejorar el acceso global de las vacunas ya que, según denuncia con motivo de la Semana Mundial de Vacunación 2016 que se celebrará del 24 al 30 de abril, todavía hay unos 18,7 millones de niños sin acceso a una vacunación sistemática para las principales enfermedades prevenibles como la difteria, la tos ferina o el tétanos
La directora general de este organismo de Naciones Unidas, Margaret Chan, reconoció que en el último año se han dado “algunas victorias notables” en la lucha contra la polio, la rubeola o el tétanos que sin embargo son “aisladas”, y por ello pide nuevos esfuerzos para “hacer que estos logros sean la norma” de cara a cumplir con los objetivos globales de vacunación para el año 2020.
De hecho, asegura la OMS, aunque actualmente la vacunación evita entre 2-3 millones de muertes al año hay otros 1,5 millones que también podrían evitarse con una mejor cobertura vacunal.
En 2012 la Asamblea Mundial de la Salud aprobó el Plan de Acción Mundial para la Vacunación (GVAP), un compromiso de todos los Estados miembros para garantizar que nadie en el mundo se queda sin las vacunas más esenciales. Y pese a los avances de los últimos años, los objetivos fijados están todavía lejos de cumplirse.
De hecho, actualmente solo uno de los seis principales puntos de ese plan de acción está en marcha, el relacionado con la introducción de nuevas vacunas en países de medianos o bajos ingresos.
Nuevas vacunas para los países más pobres
En los últimos cinco años un total de 86 países con pocos recursos han incorporado 128 nuevas vacunas, entre ellas las del rotavirus, el virus del papiloma humano (VPH) o el neumococo, cuando el objetivo era que para el año 2015 al menos 90 países en desarrollo hubieran incorporado al menos una nueva vacuna.
Entre los avances del último año, la OMS destaca que la India se haya unido a Camboya, Madagascar y Mauritania en la erradicación del tétanos materno y neonatal, al tiempo que también se mejoró la cobertura de la vacuna trivalente frente al tétanos, la difteria y la tos ferina hasta el 83 por ciento.
Asimismo, y pese a las dificultades ocasionadas por el ébola, el continente africano está más cerca de quedar libre de polio después de que Nigeria consiguiera erradicar la enfermedad, cuando en 2012 tenía la mitad de todos los casos registrados a nivel mundial. Actualmente la enfermedad sólo es endémica en Afganistán y Pakistán.
Además, las nuevas vacunas contra el dengue, el ébola y la malaria tienen potencial suficiente para cambiar la historia de la vacunación en el futuro, y gracias a la estrategia de “vacunación en anillo” se está inmunizando del ébola a cualquier persona que haya estado en contacto con un paciente afectado por el virus.
La cobertura se ha “estancado” en los últimos años
“A pesar de que el mundo ha sido testigo de algunos de los logros en materia de vacunación, la cobertura mundial se ha estancado en los últimos años”, reconoció Flavia Bustreo, subdirectora general del Departamento de Salud de la Familia, la Mujer y el Niño de la OMS.
Para mejorar la cobertura de vacunación, la OMS anima a todos los países a mejorar la protección de aquellos niños que se han quedado fuera de una vacunación sistemática, en especial en aquellos países o zonas de conflicto o en los que la cobertura vacunal es inferior al 80 por ciento.
Este organismo reconoce que en diferentes regiones de América y África entre un 23 y 96 por ciento de los niños que acuden a un centro de salud no reciben las dosis de vacunas que necesitan, y ellos son el colectivo que “lo tiene más fácil para mejorar su cobertura de vacunación”, añadió Jean-Marie Okwo-Bele, director de Vacunas y Productos Biológicos de la OMS.