Según datos expuestos en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad del Congreso de los Diputados, celebrada el pasado martes, se estima que el 25 por ciento de la población europea está afectada con algún tipo de incapacidad aunque sólo el 5 por ciento posee una acreditación que lo certifica
Madrid, 2 de julio 2015 (medicosypacientes.com/Servimedia)
El porcentaje de europeos con certificado de discapacidad ronda el 5%, aunque la cifra llega hasta el 25% si se tiene en cuenta a todos los ciudadanos que, con documento acreditativo o sin él, sienten que tienen sus capacidades mermadas a la hora de desempeñar ciertas tareas en su día a día.
Así lo explicó este martes en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad del Congreso de los Diputados Inmaculada Placencia, jefa adjunta de la Unidad de Derechos de las Personas con Discapacidad de la Dirección General de Empleo, Asuntos Sociales, Habilidades y Labor de Movilidad de la Comisión Europea.
Placencia, que compareció en la Cámara Baja para informar sobre las políticas europeas relacionadas con la discapacidad, detalló que entre los europeos que sienten que tienen alguna discapacidad pero no cuentan con un documento legal que lo acredite hay que distinguir dos grupos: uno formado por personas en edad de trabajar, donde el porcentaje de individuos que se creen con discapacidad se sitúa entre el 10 y el 15%, y otro que engloba a toda la población, que cuenta con un 25% de ciudadanos que dicen sentirse con discapacidad.
La representante de la Comisión Europea quiso dejar claro que otorgar un grado de discapacidad a un ciudadano es algo que solo puede hacer el Estado en el que viva y no la Unión Europea, que tampoco está legitimada para homologar este documento, sobre el que sí puede ofrecer no obstante información a los países miembros
A este respecto, Placencia recordó que Europa “tiene la obligación” de velar por que todas las políticas que vaya a implementar tengan en cuenta la vertiente de discapacidad, algo que, además, se hará “más explícito” en el nuevo paquete de medidas sobre la mejora de la regulación europea, que aclarará cualquier duda que pudiera haber al respecto y ayudará “a concienciar” a los funcionarios sobre este aspecto cuando preparen iniciativas.
La jefa adjunta de la Unidad de Derechos de las Personas con Discapacidad de la Comisión Europea apuntó también que se estima que la tasa de empleo de ciudadanos con discapacidad ronda en la Unión Europea el 50%, una cifra alejada del 75% registrada en el caso de la ciudadanía en general.
Algo similar ocurre con los datos relativos a europeos con estudios universitarios, que en el caso de los que tienen discapacidad son del 27,8%, frente al 40% de la población en general.
Otro aspecto que puso de manifiesto la representante de la Comisión Europea este martes en Madrid fue el de la ratificación de la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, un paso que, informó, han dado ya 25 Estados y están en proceso de culminar otros tres: Irlanda, Finlandia y Países Bajos.
Esto no significa, aclaró, “que los países que están en proceso de ratificar la convención no se preocupen por su cumplimiento, como evidencia el hecho de que hay Estados que han tardado bastante en ratificar el texto, pero a cambio han ido adaptando su legislación a él para tener el terreno allanado en el momento de la ratificación”.
Otros Estados, por el contrario, añadió la representante de la CE en asuntos de discapacidad, “prefirieron ratificar la convención poco después de su entrada en vigor, en 2008, y adaptar posteriormente y de forma paulatina su legislación interna a los requerimientos del texto”.