La imperante necesidad del control de datos e información sobre la población médica en nuestro país para poder garantizar la viabilidad de la profesión tal y como la conocemos y sobre todo la de los profesionales que la integran es una realidad a día de hoy, abordada en la IV Convención Médica. En la ponencia se puso de relieve la importancia de que empiecen a funcionar, cuanto antes los registros de profesionales para una adecuada planificación de RR.HH.
Madrid, 5 de diciembre 2014 (medicosypacientes.com/J.M.)
El control y los datos sobre las cifras de la población médica en nuestro país constituyen, actualmente, una de las áreas más importantes e influyentes en el ámbito laboral del médico. Por este motivo, el tema de la demografía médica fue elegido para ser desarrollado en la III ponencia satélite celebrada durante la IV Convención de la Profesión Médica.
El presidente del Colegio de Médicos de Cuenca, el Dr Carlos Molina Cuenca, como coordinador del bloque temático en el que se incluyó esta ponencia, destacó la imperante necesidad del control de datos e información sobre la población médica en nuestro país para poder garantizar la viabilidad de la profesión tal y como la conocemos y sobre todo la de los profesionales que la integran. En su introducción quedó patente el amplio camino que se vislumbra en la profesión médica para poder manejar cifras y datos ajustados a las realidades sociales en las diferentes autonomías para afrontar una planificación real y útil que pueda ayudar a evitar desigualdades y a controlar la demografía de los profesionales médicos. La complejidad de la profesión marcada principalmente por las numerosas especialidades existentes, y los largos periodos de formación dificultan el control y registro de los profesionales que ejercen la profesión médica en nuestro país.
Además participaron la presidenta del Colegio de Médicos de Valencia, Dra. Mercedes Hurtado, como moderadora; José Luis Lancho de León, economista y autor del abstract base del contenido de esta ponencia satélite; Dra. Carmen Fernández Martínez-Septien. Secretaria COM Burgos y ponente junto con Joaquín Rubio Agenjo, del Ministerio de Sanidad. Las preguntas a la mesa corrieron a cargo de los Dres. José Molina Cabildo, presidente COM Ciudad Real; Jesús Delgado Aboy, presidente COM Melilla; y Fco. José del Riego Tomás, presidente COM Palencia.
El testigo del Dr. Molina fue recogido por la moderadora de las mesas, la Dra. Mercedes Hurtado, quien explicó el funcionamiento de la ponencia que partió del abstract del economista José Luis Lancho, centrada en la importancia de los recursos humanos en el ámbito de los servicios sanitarios. Parte de esta importancia radica en la elevada inversión que se hace en capital humano, caracterizada por alta calificación de los futuros profesionales; largo período formativo; elevado número de especialidades; y elevados errores de planificación, entre otros.
El autor destacó, asimismo, la baja calidad de la información disponible debido, fundamentalmente, a la carencia de un registro de especialistas. También incidió, entre otros aspectos, en las diferencias entre CC.AA. en cuanto al número de médicos asistenciales por 100.000 habitantes. No obstante, como comentó, dicha dispersión “viene siendo en España más reducida que la de la renta per cápita entre CC.AA. (la renta per cápita de un vasco fue, en 2010, 1,86 veces la de un extremeño, mientras que la relación extrema entre el número de médicos asistenciales fue de 1,60), lo que evidenciaría que la Sanidad contribuye, en España, a reducir la desigualdad”.
Entre las propuestas aportadas por este experto cabe destacar la necesidad de un registro de profesionales de la Organización Médica Colegial en el que se incluyan datos referidos a la titulación de postgrado y centro de actividad y del que se pueda obtener información sobre plazas ofertadas anualmente por especialidad y centro de trabajo.
Asimismo, opinó que el Ministerio de Sanidad debería recuperar mayor protagonismo en lo referente a función legislativa; estadística sanitaria y soporte informático; construcción de hospitales; y en lo referente a aprobación de nuevas Facultades de Medicina y acreditación de hospitales universitarios.
Por su parte, la Dra. Carmen Fernández Martínez-Septien, secretaria del Colegio de Médicos de Burgos, abordó el tema de la demografía médica analizando diferentes estudios demográficos realizados en 2006, 2008 y 2010 desarrollados por la Dra. Beatriz González Lopez Valcárcel junto a un grupo investigación en economía de la salud de la Universidad de Las Palmas.
Ante los resultados de estos estudios expuestos ante los asistentes a la ponencia la Dra. Fernández planteó incógnitas respecto a los estudios argumentados en dos líneas de discrepancias, las derivadas de la crisis y de la calidad de los datos recogidos. En el aspecto de la influencia de la crisis en los datos obtenidos por los diferentes estudios Fernández planteaba como variables que distorsionan el registro y control de datos demográficos factores como el crecimiento poblacional, la tasa de reposición de jubilados y la extensión de la jornada laboral.
En cuanto a las concordancias con los estudios planteados por la citada Universidad de las Palmas, la Dra. Fernández expuso los datos que a su juicio pueden servir de base estructural para conocer los factores que generan la falta de rigor y fiabilidad en el control de la población médica. Resumía en tres líneas estos factores de estudio. En primer lugar planteó que los estudios reflejan la discrepancia entre comunidades en el número de médicos/100.000 hab. y entre las diferentes especialidades. En segundo lugar detalló que la formación médica es demasiado rígida y duradera, marcando de media un periodo de 11-12 años para tener un especialista. Y por último esgrimió que las fuentes de los datos no son fiables y son variables, planteando así la necesidad de un registro unificado a nivel estatal.
La segunda ponencia estuvo a cargo del representante del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Joaquín Rubio quien detalló la propuesta del gobierno para la ejecución del Real Decreto 640/2014, de 25 de julio, por el que se regula el Registro Estatal de Profesionales Sanitarios.
En ese sentido, Rubio resumió en dos, los objetivos del Gobierno con la implantación de esta norma. En primer lugar habló de facilitar la adecuada planificación de las necesidades de profesionales sanitarios del Estado. Y en segundo lugar, de la necesidad de coordinar las políticas de recursos humanos en el ámbito del Sistema Nacional de Salud. Una vez planteados, expuso el ámbito de influencia que tendrá la legislación detallando los susceptibles de la misma. En el registro se incorporarán los datos de los profesionales sanitarios que ejerzan su actividad en el territorio nacional, matizando los diferentes grupos divididos en tres; Los profesionales sanitarios con título universitario de la rama de ciencias de la salud o con título de especialista en ciencias de la salud, a que se refiere la Ley 44/2003, de 21 de noviembre. Los profesionales del área sanitaria de formación profesional a que se refiere la Ley 44/2003, de 21 de noviembre. Y por último los profesionales sanitarios a que se refiere la disposición adicional séptima de la Ley 33/2011, de 4 de octubre, General de Salud Pública.
Por último Rubio trató de explicar los mecanismos de tráfico de información con el Ministerio de Sanidad para conformar este gran registro. En este sentido, el ponente hizo especial hincapié en el importante papel que debe adoptar la Organización Médica Colegial y los colegios profesionales provinciales en particular en la elaboración de este registro a través del flujo de información ordenado y regulado. De ese modo, el tráfico de esta información de ir dirigido desde colegios profesionales y sus consejos, las entidades sanitarias privadas, servicios de salud de las CC.AA y los ministerios y entidades dependientes, hacia el ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e igualdad para reagrupar y jerarquizar los datos recibidos.
Al finalizar las ponencias, los participantes plantearon cuestiones con el fin de clarificar las diferentes dudas suscitadas tras el planteamiento por parte del gobierno del registro profesional centralizado. En ese sentido el Dr. Francisco José del Riego, presidente del Colegio de Médicos de Palencia planteó la siguiente cuestión. ¿Se podría arbitrar algún sistema para unificar los criterios a la hora de tener en cuenta los estudios de demografía de especialistas en España y verse reflejado en la oferta MIR?
Por su parte, el presidente del Colegio de Médicos de Ciudad Real, Dr. José Molina, aportó datos sobre la distribución de médicos en España y sobre las diferencias entre las ratios de médicos por cada mil habitantes entre las distintas comunidades autónomas.
En la misma línea, valoró la formación MIR en las distintas comunidades, dándose el caso que comunidades más pequeñas que Castilla-La Mancha estaban formando a muchos más médicos.
Teniendo en cuenta esta situación, planteó si el actual Real Decreto Ley que regula el Registro Estatal de Profesionales Sanitarios, aprobado en el mes de julio pasado, “¿servirá de verdad para una organización de los recursos humanos en Sanidad, o se va a quedar en un registro estadístico que, por otra parte, ya tenemos o estamos trabajando en él desde la OMC?”
Del mismo modo, el presidente del Colegio de Médicos de Melilla, el Dr. Jesús Delgado Aboy lanzó la cuestión de si “teniendo en cuenta las dificultades de personal que se plantean en zonas periféricas lejanas de poder completar las plantillas médicas y el envejecimiento de las mismas sin posibilidad de solución a corto plazo ¿qué se va a hacer cuando le llegue la jubilación al 70-80% de la plantilla global?”.
Las respuestas a estas cuestiones fueron contestadas y debatidas por los diferentes ponentes y asistentes que no alcanzaron un punto en común por la complejidad del tema y los diferentes planteamientos que se pueden hacer del mismo.
Finalmente, de las conclusiones extraídas por la Organización Médica Colegial sobre este tema cabe destacar que “la falta de un registro real y fiable de médicos, sus especialidades y distribución geográfica, implica que las previsiones y recomendaciones de planificación, ordenación y gestión de RRHH y profesionales sean variadas y discordantes. En este sentido, los registros de los Colegios de Médicos representan una seguridad para el ciudadano, una garantía para el médico que le asiste y una responsabilidad de la profesión en su conjunto con las administraciones y con la sociedad”.