La mortalidad por gripe en Europa se encuentra "en los niveles esperados para esta época del año", pero algunos países comienzan a observar cierta mortalidad en exceso en poblaciones mayores, según los datos de los 23 Estados miembros de la Región Europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recogidos en el Programa Europeo de Monitoreo del Exceso de Mortalidad por Acción de Salud Pública (EuroMOMO)
En su informe semanal de actualización de la temporada de gripe, OMS Europa informa de cómo se está propagando el virus de la influenza a través de Europa (a menudo en un patrón de este a oeste), así como qué cepas del virus predominan. El objetivo es ayudar a preparar a los países para el pico de la temporada, cuando los servicios de salud pueden verse sobrecargados por el número de pacientes.
Los virus de la influenza tipo A están siendo los más comunes en esta temporada. Existen 2 tipos de virus que causan enfermedades en humanos, A y B. Actualmente, los 2 subtipos de virus de influenza estacional A están circulando en Europa en proporciones “casi iguales”, con los virus A (H1N1) pdm09 un poco más prevalentes que A (H3N2). Hasta ahora, se han detectado “muy pocos” virus de influenza B.
Sobre la eficacia de las vacunas hasta el momento, la OMS asegura que “es demasiado pronto para saberlo”. Se están realizando análisis de laboratorio para determinar la similitud de los virus de influenza A (H1N1) pdm09 y A (H3N2) en circulación con las cepas de la vacuna. “Es demasiado pronto para decir qué línea predominará (Victoria, incluida en las vacunas trivalentes, o Yamagata, de las cuadrivalentes).
Durante los meses de invierno, la influenza puede infectar hasta el 20 por ciento de la población, dependiendo de qué virus estén circulando. Las personas con mayor riesgo de enfermedad grave una vez infectadas son ancianos, mujeres embarazadas, niños pequeños, personas con problemas inmunológicos y con enfermedades crónicas subyacentes. Estos grupos representan una proporción significativa de la población en Europea.
La OMS recomienda que todas las personas con riesgo de desarrollar una enfermedad grave debido a la infección, así como a los profesionales sanitarios, se vacunen. Como no es posible predecir si un virus de influenza predominará en una estación en particular, las vacunas contra la influenza de temporada deben cubrir todos los virus que se prevé que circulen, a saber, la influenza A (H3N2), la influenza A (H1N1) y la influenza B.