El Hospital Universitario 12 de Octubre operará en Madrid a Wissam Alnawaji, un niño sirio refugiado en Jordania que sufrió la amputación de su pierna derecha y que padece graves problemas de movilidad en la pierna izquierda. Según ha informado la ONG Global Humanitaria, la operación se establece en el marco del proyecto 'Ayúdales a Caminar', que presta atención médica y psicológica a niños y niñas sirios refugiados con heridas y traumas de guerra
En el transcurso de la operación, a Wissam se le reemplazará la prótesis que lleva actualmente en la pierna derecha para colocarle una de aluminio, de mayor calidad. También se le repararán los tendones y se le estabilizará la rodilla de la pierna izquierda.
Esta operación ha sido autorizada por la Subdirección General de Cooperación Sanitaria y Relaciones Institucionales de la Consejería de Sanidad de Madrid después de una primera visita médica de Wissam a España en diciembre de 2015.
A raíz de un bombardeo de la aviación del ejército sirio en su localidad natal, Daráa, en enero de 2014, Wissam, de 15 años, sufrió la amputación de su pierna derecha y el corte de ligamentos internos de su rodilla izquierda. Wissam y su madre huyeron a Jordania el mismo día del bombardeo para intentar salvarle la pierna izquierda.
Actualmente, Wissam vive en Jordania en el centro médico Bader, especializado en ortoprótesis y fisioterapia para niños heridos. El equipo médico en Jordania, sin embargo, les daba un porcentaje de un 70 por ciento de posibilidades de que durante la operación tuvieran que amputarle también la pierna izquierda.
Con la operación en Madrid se prevé que esta amputación no sea necesaria para poner fin a los “fuertes dolores” que sufre y que pueda recuperar íntegramente la movilidad de la pierna. Actualmente Wissam no puede caminar más de dos horas con la prótesis por sufrir fuertes molestias.
‘Ayúdales a Caminar’
La intervención a Wissam se realiza en el marco del proyecto ‘Ayúdales a caminar’, puesto en marcha por Global Humanitaria y la ONG jordana Al Mahd for training and social development, con el objetivo de “atender a cerca de 1.200 niños y niñas con heridas y traumas de guerra, que viven en los campos de refugiados de Jordania y en el norte del país y contribuir a su recuperación física y emocional”.
Además del trauma físico vivido, que conlleva a menudo secuelas, intervenciones quirúrgicas múltiples y la implantación de prótesis, los niños y niñas sirios refugiados deben afrontar las consecuencias psicológicas de sobrevivir a un episodio de guerra, que suelen ser devastadoras para el desarrollo del niño: sentimiento de culpa, pérdida de autoestima, fobias y miedo, trastornos del sueño, incapacidad para hablar y traumas que, de no tratarse, pueden derivar a largo plazo en trastornos mentales.
Como parte de este proyecto, Global Humanitaria también ha creado la exposición de pinturas ‘Little Hopes’, que integra cerca de 50 obras realizadas por niños sirios refugiados que, como Wissam, se están recuperando de sus heridas.
Mediante el apadrinamiento de niños y la venta de las obras de la exposición ‘Little Hopes’, disponibles en la web globalhumanitaria.org, se pueden financiar intervenciones quirúrgicas, la implantación de prótesis y la compra de material ortoprotésico.